Capítulo 6: Bienvenidos, Están en casa.

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Sarada
¡Llegamoooooooos!- gritó Boruto

Miré a mi alrededor, en verdad estaba en la casa de los Uzumaki, hace tanto no venía aquí.

¡Sarada! ¡Estás de vuelta!- sonrió Hinata mientras me abrazaba

Si- sonreí

La Señora Uzumaki se separó de mi con una sonrisa.

¡Sarada!-

¡Himawari! ¡Mírate! ¡Te ves muy bien!- comenté feliz

¡Igual tu!- sonrió Hima

Bueno chicos, bienvenidos, están en casa- sonrió Hinata

Unos minutos más tarde, me encontraba en la sala de estar hablando con Himawari.

Seguro quiere ir enserio, Boruto nunca había traído una chica a casa, ni siquiera Kakei pisó este territorio- susurró Himawari con sonrisa traviesa

Bueno....- esto es algo incómodo

Ah Sarada, ven un momento- pidió Boruto desde las escaleras que llevaban al segundo piso

Boruto
Cuando Sarada me empezó a seguir, fui a mi cuarto, para poder seguir nuestra conversación como se debe.

Pasa, y disculpa el desorden- dije abriendo la puerta

¿Cuál desorden?- rió la chica

Y la verdad es que si, tenía todo perfectamente ordenado, pues.....digamos que mamá me hizo un trauma el año pasado en cuanto a mi desorden, y por cierto...¡No es normal no poder ni respirar a gusto en tu propia recámara! Es todo lo que diré respecto al trauma.

Le gustaste a Shadow- comenté serio

¿Ah si?- se burló la Uchiha

Si- respondí

Bueno, querías hablar ¿o no?- dijo la Uchiha

Así es, ya que solo somos tú y yo ahora- sonreí

¿Solos los dos?- continuó Sarada

Si así quieres verlo- seguí

Pervertido- sonrió Sarada

Solo tuve la opción de sonreírle.

Si de algo me había dado cuenta durante mi "adolescencia", era que el amor o amistad entre dos pervertidos, era mucho mejor que una relación de dos con mente limpia.

Entiendo tus intenciones, Uzumaki, y la verdad es que estoy dispuesta a intentarlo- aseguró Sarada

Me alegra escuchar eso- dije feliz

Quieras o no vamos a vivir una serie de aventuras de las que no te arrepentirás de haber vivido, ¿entiendes?- condicionó

¿Cuándo empezamos?- pregunté

Ahora, y empiezas tú- ordenó mientras se ponía unos lentes de pasta negra

Te ves linda así- comenté ladeando mi cabeza para ocultar mi posible maldito sonrojo

Maldita sea, eres bueno en esto-

¿Se supone que eso cuenta?- me burlé

No, aguanta un poco......creo que.....tus ojos, esos profundos y azules ojos que tienes son preciosos- concluyó

Omnisciente
Aunque no lo pareciera, esa era la primera vez que Sarada se perdió en los ojos del muchacho, la primera de muchas.

¡Chicos la cena está lista!- avisó Himawari tras la puerta

¡Gracias, ya vamos!- respondieron ambos adolescentes

Ambos bajaron de inmediato, hora de la verdad.

BoruSara: Here We Go...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora