Capítulo 2.

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Capítulo 2.

Destiny's POV:

-¿Crees que se haya roto sus viejos huesos?-dije mientras miraba por la ventana.

Gire mi cuerpo hacia mi hermana y esta estaba jugando con una pequeña pelota, tirándola al aire y agarrándola.

Ella me miro y sonrió de lado-Ojala que si-reí sentándome a su lado, en el suelo.

-Por cierto querida Denize-la mire-no me olvido de lo que hiciste conmigo en el micrófono eh-aproveche su distracción y tome la pelota en el aire, antes de que llegara a sus manos.

Escuche su risa y luego más risa y más. Me pare y le tire la bola a su cabeza, haciendo que sequejara pero que no dejara de reír.

-¡Cállate Denize, eres una inmadura!-me senté en mi cama cruzándome de brazos, su risa no se escuchó más, de reojo vi cómo se acercaba a mí, esta vez de pie.

-¿Me dices inmadura a mí?-asentí-pequeña-susurro, aunque llegue a escucharla, le tire una patada que esquivo perfectamente. Gruñí, ¿Por qué mi hermana tiene que tener tan buenos reflejos?

-Fallaste-canturreo burlona, la imite y le saque la lengua-¿Ahora quien es inmadura? Boba-me pego un golpe en la cabeza y mire hacia el otro lado, conteniendo una risa.

-Ya cállate, tonta-tome el almohadón de plumas y lo tire a su cabeza, ella sonrió y me lo aventó de nuevo. Así formando una guerra de almohadas.

Las plumas blancas estaban por todos lados, el piso, las camas, mesas de luz, todo. Reíamos a rienda suelta, como si recién hubiésemos salido de un manicomio por trastornos severos.

-¡SEÑORITAS HYLAND!

Denize y yo miramos la puerta, de donde provenía el grito de la madre superiora. Me repuse en mi lugar, y escondí la almohada... o lo que quedaba de ella, detrás de mí. Aunque era estúpido, la almohada era más ancha que yo, era obvio que se vería.

-Hola madrecita querida-dijo con tono de niña buena Denize, mordí el interior de mi mejilla evitando soltar mi risa-¿Cómo está el padre? Me tiene preocupada, no eh podido estar tranquila-ironizo acercándose a ella y poniendo una de sus manos en el hombro de Rosa María.

La pobre monja estaba roja de la ira, eso fue suficiente como para soltar mi risa, solté lo que tenía en mano para llevarlas a mi estómago, cada vez que trataba de recomponerme me reía mas.

-Señorita Destiny, debe de saber que por su culpa el padre Tobías ha sufrido graves lesiones-puse mi mano sobre mi boca para poder estar "seria".

Aclare mi garganta y le eche una rápida mirada a mi hermana, esta estaba aprovechando que la madre tenía su atención en mí, para lentamente sacarle las llaves de los dormitorios de su bolsillo. Enseguida entendí lo que quería, así que la ayudaría.

-¿Qué se ha roto madre?-pregunte poniendo mis manos juntas delante de mi estómago.

Ella suspiro y negó con la cabeza-Se ha roto un hueso de la pierna derecha, uno del brazo izquierdo y se ha golpeado fuerte la cabeza, la tiene vendada-miro hacia el suelo y siguió moviendo su cabeza en negación-Ojala que Dios se apiade de el-asentí como si de verdad estuviera prestando atención al tema.

Por el hombro de la madre vi que Denize me mostraba las llaves, le di una mirada aprobatoria y carraspee.

-¿Eso era todo?-Rosa María asintió-Muy bien, puede retirarse ahora, necesito hablar con mi hermana.

Me acerque a ella y literalmente la empuje suave hacia la puerta hasta que estuvo en el pasillo. Antes de que arrematara algo en contra de nosotras le sonreí y cerré la puerta en sus narices. Cuando la madre ya estaba fuera de vista me gire hacia Denize.

The Hyland Sister'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora