Tu corazón se detuvo por medio segundo al escuchar eso, el rubor tomando parte de tu rostro mientras lo mirabas... Aquel lugar era sin dudas precioso, esto era algo que debías admitir, pues, tal y como él había mencionado era el edén que en algunos libros se solía describir, la imagen perfecta de un paraíso.
El paraíso... Tuyo, suyo... De los dos...
... Tú y él... Él y tú...
... En el paraíso.
-...Nuestro edén...- repetiste con una sonrisa excepcionalmente calmada, la sonrisa que reflejaba nada más que la felicidad pura, una calma increíble de encontrarte en un lugar así.
. . .
Entonces no fueron necesarias más palabras, el intercambio mutuo de sentimientos se hizo presente antes de que te dieras cuenta de que ya estabas pasando tu tarde con él... Con él que se había declarado como el "Dark Overlord" al pedirte aquel café, te sentías tan cómoda a su lado, riendo y disfrutando de cada segundo pasar la tarde a su lado en aquel tan relajante lugar al que él había apodado "Vuestro edén".
Pues, así como parecía, entre momentos probablemente inolvidables él te había demostrado que podía ser mucho más de lo que solía aparentar, los segundos se hacían incontables mientras perdías la noción del tiempo a su lado.
Y así era como después de un par de horas podías ver el final del atardecer cayendo sobre ambos. Él te había dejado ver un poco de su mundo al "presentarte a todas aquellas sus bestias"... Aquel montón de animales que te causaban tanta ternura, desde el más pequeño hasta el más grande... Incluso ese enorme oso que en algún momento se había presentado, primero arrancando el temor en tu mirada y seguido de él la calma, pues tan sumiso con Gundham te demostraba que su habilidad con los animales era en verdad excepcional...
Finalmente, aquel oso aparentemente llamado "Grizner" se había marchado y con eso sólo ustedes dos se encontraban debajo de un gran árbol justo al centro de ese enorme jardín, pero también suficiente cerca de la puerta por la cual habían entrado.
Después de un par de comentarios y alusiones acerca del gran árbol que se encontraba en el verdadero jardín del edén mencionado en la biblia tú no podías hacer mucho más que asentir, pues criada en una familia que no era verdaderamente religiosa apenas y habías podido entender un par de cosas acerca de lo que él había mencionado, haciendo apenas un par de comentarios a cada una de sus palabras sin querer estropear nada como si en verdad pudieras hacerlo.
-... El tiempo se hace efímero, hechicera...- él dijo después de que parecía después de que parecía había acabado con aquella conversación... Aunque, sin embargo y a pesar de las apariencias todavía no acababa -... Como cual pecador que de los frutos prohibidos consumió, mi alma ahora enajenada no obtendrá la anhelado y siempre esperada redención...-
Quizás era tu imaginación, pero al mencionar ello los ánimos de Tanaka parecían haber bajado, pues, a diferencia de la sonrisa que había mostrado anteriormente para ese momento no te ofrecía más que su mirada perdida, de perfil ya ni siquiera era capaz de mirarte.
-... He pecado, hechicera...- con simples palabras él declaró, arrancando cualquier palabra que anteriormente le hubieras podido decir -... He pecado y el perdón prioritariamente no me será concedido...-
Te quedaste callada... Debías hacer algo...No podías dejarlo así... Menos cuando parecía que sus ánimos habían bajado tanto, y sobre todo que él parecía en realidad sentirse mal con aquello que mencionaba.
Fue entonces que, como buena amiga o al menos intentando serlo levantaste tu mano, deseando poder darle unas palmadas en el hombro al menos en señal de compañerismo -... Está bien, Tanaka... Todos cometemos errores...- intentabas animarle -...Estará bien, ¿Si?- tu voz era calmada mientras estabas a punto de tocarle, eso antes que de pronto y probablemente notando tus intenciones él levantara su mano vendada para sujetarte por la muñeca, justamente presionando encima de la pulsera que te había regalado.
...
Y por un segundo no pudiste hacer más que mirarlo... Mirarlo mientras él te miraba con sus mejillas teñidas en rosa, apenas un poco ruborizado, que, aún si no lo decía en voz alta se encontraba bastante aliviado que aquel "artefacto" que tú usabas junto a tus "poderes de hechicera" te hicieran inmune a su veneno.
-Los lazos que nos unen, hechicera, ¿Aquellos que de la amistad trascienden son...?- él te preguntó, regalándote apenas un segundo para que pudieras procesar eso y por tanto responder..
-¿Eh?- con algo de duda pronunciaste -...Cla...Claro... Somos amigos, ¿No?-
Él cerró sus ojos mientras tragaba saliva, en ese momento incluso pudiste escuchar como hacía un ruido con su lengua contra sus dientes ¿Habías hecho algo mal?
-Siendo ese el caso...- abrió sus ojos, subiendo su mano despacio hasta los dedos de tu mano mientras hablaba -...Mi error va más lejos de la simpleza de un pecado, puesto que ahora mis impropios sentimientos me empujan a un mortal acto de obsesión...-
Tú lo mirabas atenta, justo después de esas palabras él comenzaba a acercarse a ti, a su vez intentando entrelazar sus dedos con los tuyos, acto que por algún motivo permitías, observando como de a poco se iba acercando a su rostro, el rubor siempre presente encima de sus mejillas mientras también comenzaba a mostrarse en las tuyas. Él tan cerca de tu cara parecía tan nervioso mientras levantaba su otra mano para llevarla hasta tu cara, acariciando tu mejilla en un primer momento antes de deslizar esta mano fría al no estar vendada como la otra despacio, despacio acariciándote hasta llegar a tu barbilla... ¿Mortal acto de obsesión? ¿Él estaba a punto de bes...?
-¡Heeeey!- de pronto se escuchó así como la puerta se abrió, revelando tras esta a dos muchachos... El primero y dueño de aquella palabra con un llamativo traje amarillo además de un todavía más llamativo... ¿Cabello rosa?... A su lado iba una joven rubia, las manos juntas frente de ella con una sonrisa calmada -...Lamentamos la tardanza...- ella agregó.
|| Notas del autor:
Así que... ¿Ahora es un buen momento de pedir disculpas?
. . .
¡Lamento a sobremanera el haber tardado más de 2 meses en actualizar esto! ;u; Aunque... También debo admitir que tuve 8 semanas algo complicadas... Sin embargoooo... ¡Muchísimas gracias a aquellos que esperan! Les agradezco por ello, por leer mi fanfic y sobre todo por su paciencia. Gracias.
¡Espero tengan un buen día! Intentaré ser más frecuente con las actualizaciones de esto. ^^'
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Conjuro. (Gundham Tanaka x Reader)
FanfictionResumen: Durante el verano consigues un trabajo en una cafetería local, los primeros días es todo aburrido hasta que cierto hombre de apariencia peculiar llega a ordenar una taza de café negro, quizá lo que encuentres en esa cafetería sea mucho más...