La piscina

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Entonces, me vine a trabajar a Italia, después de terminar mi curso de cocina y a aprender el idioma.

Vaya...eres como yo, nunca dejas de aprender ¿no?.

Claro, cada experiencia en la vida te hace aprender y enriquecerte.

Entonces...viniste aquí por trabajo...

Bueno...realmente, me trajo el amor, me enamoré perdidamente de un chica y al final la cosa terminó mal.

¿Se acabó el amor?

Más bien...se acabó las mentiras...me ponía los cuernos con otra.

Vaya...lo siento.

Yo no la verdad, con el tiempo entendí que no era la mujer de mi vida, así que agradezco que me abriera los ojos, gracias a ello, tengo la suerte de conocerte a ti ahora.-dijo coqueta-

Bueno...¿podemos hablar de otro tema? La verdad que me está dando sed, Carla, ¿puedes hacer más limonada?-dije seca. Si no hacía que desapareciera esa stronza de un radio de diez metro no respondería de mis actos.-

Si...ya te lo traigo-dijo ella molesta,interrumpiendo su conversación con Daniela.No era tonta la chavala...entendió mi indirecta la bicha-

Eli,¿qué te pasa? Estás muy rara desde que llegó Carla, solo quiere ser amable-dijo Daniela-

Esa stronza quiere ser amable en muchos sentidos me parece a mi, además, ya me aburría su monólogo-

Eso que siento...¿son celos gruñona?-dijo ella jugueteando conmigo-

¿Qué dices tía?¿celos de qué? Estás enloqueciendo vaffanculo.

Bueno,bueno...está bien. ¿Te apetece darte un baño en la piscina?

Que va parsera, que me ahogo...quita quita...

¿No sabes nadar?-dijo extrañada-

Cazzo claro que si, pero no sé, tengo miedo a ahogarme, no me meto desde mi accidente

Bueno,no pasa nada bonita, si te lo piensas, me avisas y yo te ayudo.-dijo dándome un beso en la mejilla- ojalá decidas meterte- dijo casi susurrándome en el oido con voz sensual~per favore Daniela~

Sentí como se iba de mi lado al notar su aroma alejarse, era impresionante como podía reconocerla a kilómetros. Escuché el agua de la piscina y por un instante, deseé ser agua y tener la suerte de acariciar su piel.
Según la descripción que me había dado Marco y sus tatuajes, sin duda debía de ser todo un espectáculo verla entrar y salir del agua. Solo de pensarlo, sentía como el corazón me iba a mil, excitada con solo imaginármela nadando con ese cuerpo tan perfecto.

Toma Elettra,aquí tienes tú limonada-dijo Carla acercándome el vaso, molesta por su tono-

Grazie, pero ya no tengo sed-dije en plan chulesco-

Muy bien.-dijo sintiéndola más molesta- pues ahora me iré a la piscina, a disfrutar de esa rubia imponente...es una lástima que te pierdas el espectáculo...no tiene desperdicio,es toda una diosa-dijo para devolvérmela.~si quería joderme se había equivocada de chica la testa di merda~

Daniela amore...¿me ayudas a meterme?- dije en plan juguetona-

¡Claro! Me alegro que te hayas animado-dijo Daniela contenta-~daría cualquier cosa por ver la cara de Carla en este momento.upsii...ciao bella, ELETTRA 1 CARLA 1~

Agárrate a mi mano bonita-dijo guiándome por las escaleras de la piscina-

Aiuto...no me metas muy adentro que tengo miedo

¿Y cómo me mirabas? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora