Presa en el amor

¡Gracias por Volver!

Cap 29

Andrew POV

—¿Aisha?—Pregunté desconcertado.

—Sí—Sonrío— Soy yo hermanito mayor—Continuó con una sonrisa de oreja a oreja.

—Ven aquí, dame un abrazo—Dije mientras la halaba hacía a mí.

—¿Cuándo llegaste?, ¿Por qué no me avisaste nada?—Pregunté.

—Llegué hoy en la madrugada, y me quedé en un hotel, luego al despertar, le hablé a Álex, y me dijo que están aquí—Respondió.

—Estoy muy alegre de que estés aquí, y cuéntame, ¿Qué tal es Europa?—Pregunté nuevamente.

—Es hermoso, pero Andrew, luego tendrás tiempo de hacerme todas las preguntas que estás pensando, ahora necesitas relajarte, supongo que la chica que está adentro y tu, son algo, ¿No?—Supuso.

—Seré el "Padre" de su hijo, y es lo mejor que me ha dado, para serte sincero—Expliqué.

–Andrew–Dijo.

–¿Qué?–Respondí.

–Te derrites por esa chica–Confirmó, cómo si me hubiera leído la mente.

–La verdad, sí, pero bueno, ya–Comenté.

***

–Doctor, ¿Cómo salieron los exámenes de Sophie?–Pregunté.

–Afortunadamente, está muy bien, en cuanto despierte, se pueden ir–Respondió.

–Bueno, muchas gracias–Agradecí.

-No hay de que–Dijo mientras dejaba la habitación.

–"Bueno Sophie, supongo que este será el único momento en el que podré tenerte tan cerca, y verte fijamente, admirar toda tu belleza natural"–Pensé.

Mientras acariciaba su rostro, con mi dedo índice, y la veía fijamente; pensaba en esos momentos, todos esas veces que pasamos juntos, y poco a poco, me fué gustando más y más, esta chica es realmente hermosa. Me encanta, pero supongo que ella nunca estaría con el mejor amigo de su ex novio.

Tantos pensamientos invadían mi mente, qué tan sólo para despejarme de ellos, decidí romper los pocos centímetros que me separaban de Sophia Grace, para darle un beso dulce y delicado.

Luego de unos segundos, despegué mis labios de los de ella, y justo segundos después empezó a abrir sus ojos.

–¡Hola bella durmiente!–Exclamé.

–¿Bella?, Estoy cómo una loca–Dijo con una sonrisa.

–La loca más hermosa–Comenté.

–Ya vas a empezar, Rubio bonito, me avisas y me vuelvo a dormir–Confesó.

–Ya nos podemos ir–Dije.

–Y, ¿Dónde están todos?–Preguntó.

–Mathias, Santiago y yo; Nos turnamos durante la madrugada para cuidarte, tu padre se fué a trabajar, y las chicas a la casa–Respondí.

–¿Qué tal está Christopher?–Preguntó.

–Está muy bien, y precioso–Confesé.

–Bueno, me voy a vestir para irnos, ¿Está bien?.

–Está bien, le diré a Santiago que entre a ayudarte a vestirte–Aclaré mientras salía–.

Unos minutos después, vimos que se acercaba Santiago junto a Sophie. Sophia daba pasos lentos y delicados, yo sólo deseaba que estos 7, ya se convirtieran en 9, para que Sophia y Christopher salieran de riesgo alguno.