Epíologo

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15 junio de 2021.

Estaban en la boda.

La habían organizado de manera diferente, primero celebraban el convite, luego se casaban y de la iglesia se iban directamente a la luna de miel. Al fin y al cabo era la boda de Fanny y Fer, no podía hacer algo común.

-Estoy tan contenta-Se reía una Abril de veinticinco años conmocionada al ver a su mejor amiga dentro de un vestido blanco.

-Sigo pensando que debería haberte hecho yo el vestido-Respondió Maika-Pero aún sin ser mío, estás preciosa.

-Gracias chicas, no me creo que al fin me case-Le respondió Fanny con su pomposo vestido.

Era un vestido, poco tradicional. Era apenas un vestido corto de palabra de honor, con una sobre capa pomposa puesta encima que dejaba al aire la parte de delante, y se quitaba y ponía a su antojo.

-Te veo tan rara vestida de un solo color-Respondió Abril.

Fanny, dio una vuelta luciendo su vestido completamente blanco, igual que el velo y los zapatos de tacón.

-Por cierto, ¿dónde está Fer? Queda una hora para la boda con el cura y no le encuentro.

-No estará con los padrinos-Respondió Abril.

-No, Nico, Tom y Kim están en la mesa-Añadió Maika.

En la primera mesa, al lado del escenario, los chicos charlaban alegremente sobre la boda. Kim con Maika de su brazo comentaban cada chico guapo que pasaba por delante apostando quien de los dos ligaría con él, Tom con su prometida, una chica castaña que conoció en la universidad, después de su anterior novia que también lo dejó por otro chico y Nico fue con Abril, ya que ambos iban solteros a esa boda. Ninguno de los dos quería casarse si no era con quien querían. Y los que querían estaban a kilómetros, ya fueran físicos, como Ben, o sentimentales, como Fanny.

-Tranquila estará en la sala del novio-Dijo Abril calmándola.

-Voy a verlo, ¿me esperáis aquí un momento?

-Sí, claro iré preparando el coche para ir a la iglesia, es más ya están empezando a salir todos los coches, solo quedamos nosotros y algún primo tuyo-Comentó Maika.

-Estupendo, gracias, sois las mejores damas de honor y mejores amigas que podía haber tenido-Respondió su amiga besándole en la cara a cada una.

Fanny corrió dentro de aquella casa en medio del campo y subió cogiéndose el vestido para llegar arriba más rápido. Cuando estuvo en la planta de arriba empezó a gritar el nombre de su futuro esposo por todo el pasillo:

-¡Fer! ¡Fer!-Gritaba mientras avanzaba por el camino.

Pero algo la hizo frenar en seco, en el lavabo se oían unos gritos de placer. Más por instinto que por curiosidad abrió la puerta y lo que vio la rompió en mil pedazos. Era Fer. Su Fer, con una chica morena. Una de las camareras. Se quedó un rato observando sin decir nada, sin poder decir nada. Hasta que gritó.

-Fanny cariño-Dijo él, debajo de aquella chica.

Fanny se cogió el vestido y bajó corriendo. Cuando llegó al jardín, ante la mirada anonadada de los pocos invitados que aún quedaban ahí, siguió corriendo hasta las afueras de la casa y se sentó en el suelo mientras de un tirón se apartaba el velo de la cabeza y lo tiraba en medio del camino.

Nico, quitando la parte donde la mujer de su vida estaba casándose con el gilipollas de turno, estaba disfrutando de la boda. Tenía la mejor de sus falsas sonrisas puesta en la cara. No había dejado de querer a Fanny desde el primer momento en el que la vio en la presentación del primer día de instituto. Hace un par de años, en otro momento de debilidad se habían besado, era la segunda vez que se besaban. Pero esta vez, al contrario de la primera, había sido él el que la había besado.

"Plus je pense à toi"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora