"Plus je pense à toi"

Capítulo 2

~2~

Abril

19 de Marzo de 2010.

Oigo la música tan alta y clara como si la hubiera puesto yo en mi propia habitación, aunque está sonando en la planta de abajo. Es la forma en la que mi madre me avisa que tengo que despertarme para ir a clase.

No me gusta el instituto. Las chicas van de divas, los chicos de chulos y a las que les da igual todo, como a mí, vamos a otro ritmo. A parte de eso no le acabo de coger el gusto a esto de estudiar... Despertarse temprano, acostarse tarde para aprender unas cosas que a las pocas semanas del examen olvidaré... No lo entiendo.

Salgo de la cama, aún con los ojos entornados, y me encuentro a mis pies con Rem, mi perro, ladrando en busca de cariño, segunda forma de mi madre de avisarme que ya es tarde.

Rem es una mezcla de dos mezclas, pero es adorable, blanco y peludito con el pelo rizado y los ojos negros. Es pequeñito, no demasiado, aunque no me cabe en el bolso.

Juego con él un rato, mientras lo acaricio gritándole con voz infantil que es el perro más bonito del mundo y salgo de mi habitación para ir al lavabo, con Rem detrás saltando.

Cierro la puerta dejando a Rem fuera, ya que, sino no me dejará en paz, y me lavo la cara, con el agua más fría que consigo que salga del grifo. Luego los dientes, con agua templada, y después voy directa a mi habitación a vestirme.

Antes de coger la ropa me paro a mirar el móvil, que está en la mesita de noche cargando, y veo una luz que avisa que tengo mensajes nuevos.

Lo desbloqueo rápido e ilusionada porque a estas horas solo me escriben o Ben o Maika y Fanny, y sea quien sea solo me escriben buenos mensajes. Los mensajes son de Ben, y sonrío con más fuerza.

Desde que aleatoriamente un ordenador nos unió como tutor y ahijada, o "tutorada" como él me llamaba al principio, no nos hemos vuelto a separar. Nos llevamos genial, me viene a visitar, yo a él, me lleva a clase, salimos a comer, mi madre y mi padre le adoran...

"Aby, hoy entro a las diez

Te llevo a clase, princesa."

Siempre me llama princesa, y lo de Aby es su abreviatura de mi nombre. Empezó con Abri, luego lo escribió como Abry y un día se equivocó escribiendo y escribió Aby y le gustó lo suficiente como para llamarme así.

Respondo rápido y sonrío como una tonta contra la pantalla de mi móvil, consciente de que Ben va a venir a buscarme en pocos minutos y me va a llevar a clase.

Finjo por unos segundos que es porque me quiere como algo más que su "pequeña" tutelada. Finjo que al llegar a mi casa me dará un beso como los de las películas y luego me dirá adiós desde el coche mientras mis amigas, que se resumen en Fanny y Maika, me esperan en la puerta del instituto.

Busco en mi armario, aun con el móvil en la mano, algo perfecto para ponerme y me decanto por unos tejanos lisos y una camiseta rosa con una estrella en medio. Suelto un suspiro al imaginarme como me quedará y como Ben me verá con él puesto: Como una niña.

Tal vez no visto como una diva, como el resto de chicas de mi clase que aparentan dos o tres años más de los que tienen; Tal vez mi pelo no sea brillante y con forma, ni me maquille para aparentar quince, los días que me maquillo, pero no por eso me siento amenazada al lado de ellas. Tengo mi estilo y me encanta, me gustar vestir como una chica de mi edad y no como las de cuarto de la ESO. Pero si que es verdad que no puedo evitar pensar en que con esta ropa Ben no dejará de verme como una niña, pero me encanta esta ropa.