Extra II

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La Noche de Bodas...

La fiesta terminó alrededor de las 2:00am. Fueron los penúltimos en irse, su luna de miel los esperaba y debían aprovecharla al máximo; ya que solo tenían tres días. No se molestaron en dormir puesto que llegarían a Estambul por la noche. Su vuelo salía a las 6:00am.

No había tiempo para mucho, apenas tendrían tiempo para vestirse e ir a por sus maletas.

Luego de bastantes horas de vuelo ¡al fin! Llegaron a Estambul. Ambos un poco tristes por no traer consigo a sus bebés. Llegaron al hotel y un par de minutos más tarde ambos se hallaban en su habitación.

"Harry..." llamó a su esposo, quien estaba recostado a su lado. Estaba cansado pero qué sería de una boda sin la luna de miel.

Harry sonrió. El ojiverde encaramó a Louis sobre su pecho. El ojiazul por su parte inició rodando las caderas.

Esta vez Harry ni siquiera pensó en la situación. Sólo lo besó.

El ojiverde sonreía durante el beso. Podía sentirlo con demasiada claridad. Después de un rato él también lo hizo. Después de todo. Por qué ocultar la emoción entre ambos. Técnicamente ahora tenían una eternidad para compartir juntos.

Al separarse, entre respiraciones entrecortadas y ojos llenos de hambre apareció. La mirada. Esa mirada con la que llegaron a un acuerdo.

Sellar aquel íntimo acto con una noche llena de gritos, gemidos, profesando aquel cariño de años, para convertirlo en un nuevo sentimiento remasterizado. 'Amor'

Los besos subieron de tono, las manos inquietas de ambos recorrían el cuerpo del contrario.

Saliva, choques de dientes, labios rojos. No había espacio para nada más. El ojiazul retomó el movimiento de caderas volviendo loco al contrario.

Una fricción dolorosamente lenta y perfecta. Jadeos roncos y gemidos tragados por el otro. Frentes sudorosas y el incesante sonido de las respiraciones agitadas cuando ambas bocas se abandonaban en busca de oxígeno.

La ropa comenzó a estorbar entre ambos. Harry fue el primero en despojarse de sus prendas, tiró del borde de su playera sacándola por los hombros. Louis imitó la acción y pronto sus bocas se conectaron de nuevo.

Sus lenguas danzando en la boca del contrario, Louis atacó el cuello pálido de su compañero.

Harry amazó los pronunciados glúteos de su compañero, retomando el movimiento de sus caderas, frotándose con afán contra Louis.

Louis bajó del regazo del ojiverde, lo despojó de sus botas, y calcetines para terminar con sus ajustados vaqueros. Iba a continuar con los suyos, pero bendito Harry, lo sentó en la cama siendo él el encargado de despojar a Louis de tan estrecha prenda.

Volvieron a la posición anterior. Con Louis sobré el regazo de Harry, ambos frotándose sin pudor alguno.

"E-estoy a nada de venirme. Y solo han sido unos besos. ¡Vamos Harry!"

La desesperación y agonía en la voz de su amado ojiazul lo hizo acelerar la situación.

Tiró de la ropa interior de Louis, con una lentitud dolorosamente excitante. Bajó los suyos y tomó las erecciones de ambos bombeando.

"V-voy a ir despacio. L-lo prometo. No dolerá, lo juro."

Louis solo asintió. Estaba malditamente asustado, Harry quería hacérselo a él (de nuevo). Pero no podía pensárselo mucho con el ojiverde bombeando de su erección. Una distracción bastante buena y placentera
-pensó-.

Y Tú, ¿Qué Miras Tomlinson? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora