Vuela alto, llega lejos, pero no olvides que todo comenzó desde el suelo

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"Vuela tan alto como quieras,
llega tan lejos como puedas,
pero cuando lo hagas;
no olvides que todo comenzó desde el suelo."

Bien, es verdad,
todos queremos triunfar en ésta vida,
alcanzar todos nuestros sueños;
tener "éxito".

Pero...

A medida que lo hacemos,

como que nos subimos a un pedestal,

queremos estar en lo más alto de la cúspide,

queremos que nuestro nombre resuene como campana en los oídos de la gente,

queremos que todos digan:

¡Tú si eres genial!

¡Tú si lo haces espléndido!

¡Tú!, ¡tú! y más ¡tú!

¡Y es que nos encanta!
¿verdad?

Es como si eso fuese algo
"sólo para nosotros".

Nos volvemos egoístas,

y dejamos a un lado la hermosa humildad con la que despegamos...

¡Porque sí!

Todo lo que crece,

¿empieza desde dónde?

Desde abajo...

Pero se nos olvida...

Se nos olvida que por ahí empezó el camino
y el ego se apodera de nuestro ser,
nos hace arrogantes,
ambiciosos,

incluso,

nos hace perdedores.

Porque creemos que eso está bien,
creemos que haciendo eso tenemos "el cielo ganado",

¡PUES NO!

Es en realidad, lo contrario.

No estoy diciendo que sea malo tener una vida llena de logros y aspiraciones...

¡Para nada!

No es a lo que me refiero.

Lo que trato de decirte,
es que mientras vayas alcanzando todo eso que deseas,

no olvides, por favor,

mantener tu humildad intacta,

no olvides agradecer a Dios a medida que avanzas,

no olvides reconocer a otros cuando también logren sus metas,

(incluyendo si era lo que tú querías para ti)

Mantente creciendo,
pero siempre recordando tus primeros pasos.

Y verás,
que eso te hará sentir pleno,
feliz,
y te hará fuerte
cuando los obstáculos se te presenten
y quieras rendirte.

La humildad, es algo precioso,
y quienes la viven, saben que es así.

LUZ ❤

"L" de letras con "A" de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora