La vida es un completo vaivén.
Hoy podemos estar sonrientes,
con el corazón dando brincos
y mañana podemos estar llorando a mares.Nunca sabes cuando el dolor pueda tocar tu puerta,
simplemente no hay escape.Pero si algo he aprendido en estos últimos años
es que el dolor es un buen amigo.No, no leíste mal.
Es la verdad.Una vez cuando mi transporte fue a buscarme al colegio, salí corriendo, me tropecé, y caí al suelo.
Y cuando fui a levantarme sentí mucho dolor en mi rodilla derecha.
No era sólo que me había hecho un raspón, sino que se me había incrustado un pequeño vidrio allí.
Así que al llegar a casa fui con mi mamá al hospital a curarme.Entonces, el dolor, sencillamente nos ayuda a saber que "algo no va bien".
Si bien, es un proceso.
En ocasiones demora muchísimo más de lo imaginado.
O peor, nunca llega a terminar.¿Pero sabes qué?
Es bueno pasar por el dolor.Es bueno tener esos momentos dónde las lágrimas corren y corren,
y pareciera que el tiempo se detiene para siempre.Dónde queremos olvidar todo,
y dónde más recordamos.
Dónde queremos estar solos,
y dónde más compañía necesitamos.
Dónde queremos que todo acabe,
y dónde hacemos lo que sea para reparar algo.Es desesperante, es angustiante, es horrible,
pero es necesario.Si no pasamos por el dolor, nunca creceríamos.
Nunca aprenderíamos cosas nuevas.
Y nunca, nunca conoceríamos el verdadero refugio:
Dios.No sé qué situación de tu vida estés atravesando,
en la que sientes que todo a tu paso se derrumba,
que todas las puertas que tienes a tu alrededor están cerradas,
y que no tienes esperanza de salir de allí...Pero algo si te diré.
¡Pon tu mirada en Cristo!
No mires tu dolor, no lo creas interminable.
¡Cree que puedes salir de allí!
¡Cree que puedes afrontarlo!
¡Créele a Dios!En Él está la salida.
Sólo basta con una oración de fe.
Sólo basta con que le busques.
¡Él puede hacer maravillas en tu vida!Si tan sólo le permites entrar...
Ahora es su turno,
ahora le toca a Él entrar,
a sanarte, restaurarte, vendar tus heridas y levantarte de nuevo.No esperes más.
No des por acabados tus sueños.
Confía, y despide al dolor en completa paz.Y si volviese a aparecer, dale la bienvenida.
Recuerda: ¡Tu Sanador vendrá otra vez!
LUZ
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"L" de letras con "A" de amor
EspiritualEste mundo. El mundo en el cuál vivimos. Dónde todos los días hay una batalla que luchar y una victoria que ganar. Dónde muchas veces, más son las ganas de tirar la toalla que las de seguir adelante. Dónde hay que tener un espíritu de valiente; un c...