Cap 7: Escape

7 1 0
                                    

Ya he acabado mi jornada diaria de trabajo, y estoy en mi habitación. La hora del escape empieza en 5, 4, 3, 2, 1... Ya.

Rápidamente cojo el ordenador y ejecuto los debidos comandos para pasar toda la información de HOT a mi ordenador, como copia de seguridad, y me aseguro de que se eliminen todos los datos disponibles. Ya no hay vuelta atrás. Con el sistema de seguridad hackeado, no me cuesta hacer que absolutamente todas las puertas del edificio se abren.

Mis manos están temblando, y con toda la adrenalina que me produce la acción salgo de mi habitación de una vez por todas. Al abrir las puertas les he dicho a la cara que algo estaba mal, y tengo que aprovecharme de esa desventaja. Corro por los pasillos en el orden que he memorizado. Me he asegurado de que a esa hora nadie estuviera por allí. De estarlo, con un solo numerado, aun el más débil de todos, bastaría para frustrar mi escape y continuar con el experimento como si no hubiera pasado nada. El punto malo es que para mí no sería como si no hubiera pasado nada.

-Izquierda Derecha, ¡NO! la otra derecha- Me va guiando Navi con una precisión fuera de lo esperable. Aun así, sienta bien tener una vocecita guiándote. Aunque lo haga mal.

-Sé por dónde ir- Le contesto.

Mientras tanto sigo corriendo. Llego a un callejón sin salida. Todo bien. Con mis débiles brazos subo por un conducto de ventilación. Cierro la entrada, y miro el ordenador. No llevará mucho salir de aquí si todo va bien. Aún así necesito un minuto para recuperar el aliento. Pero puedo aprovechar ese minuto. Abro el programa que me conecta con el servidor. Han bloqueado mi IP. Mejor. Copio y pego el algoritmo que me permitiría entrar sin permiso y sin que se den cuenta en los servidores, y congelo las cámaras de los conductos. Después, desconecto las de los pasillos. Con esto sospecharán que estoy en los pasillos, y tengo media hora para encontrar la salida hasta que se den cuenta de la congelación como he planeado. Merece la pena tener cuidado. Sé que si paso por ciertos sitios las cámaras automáticamente se reiniciarán sin que yo pueda hacer nada. En ese caso será también game over. Eso sin contar las trampas mortales, los caminos sin salida y las habitaciones donde si no haces cierta cosa te encierran en una cámara y sueltan un gas que mata. O eso ponía. Me gusta pensar que no es verdad. Le dedico lo que me sobra a pensar en mis padres. Todavía no sé nada y ya creo que de verdad existen.

Fin del minuto de descanso. Cierro el ordenador y empiezo a avanzar reptando. Hacer eso cansa mucho. Demasiado. El camino es extremadamente largo. Mis codos arden, y mi camisa se ha desgarrado. Mi constitución es muy débil. No sé si podría aguantar el camino. Sólo hay una forma de averiguarlo. Reviso en mi cabeza el mapa de la ventilación. Sorteo unas cuantas trampas.

-Ya hemos llegado- Dice navi. Él no ha ayudado mucho que digamos

Abro la entrada de ventilación. El sitio donde estoy está aislado del resto edificio, de forma que sería imposible acceder a él de otra forma que la ventilación. No sé por qué se construyó esto, aunque no me quiero poner paranoico pensando en ello. Navi dice que doy mal rollo cuando lo hago.

-Tengo que concentrarme en lo que me toca o antes se oxidarán los cimientos que salgo de aquí. Tengo que hacerlo. No hay miedo. No hay miedo- Ahora.

Acto seguido corro con toda mi alma y pego un salto como el que no he pegado nunca. Nunca he pegado saltos. El pasillo parece normal hasta que cuando vas caminando de repente se desvanece el suelo y caes. Me he conseguido librar de eso, y tengo que seguir avanzando. Peeeeero no es tan fácil. Lo difícil de esto es que mientras voy a toda mecha tengo que presionar la pared en ciertos sitios para que al final se abra la puerta, y no se puede describir con palabras lo rápido que se tiene que pensar y actuar para hacer esto porque no da tiempo. YA..

Blue MagmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora