—Suelta me —Exigí molestó, pero no con ella, conmigo por no poder alejar la, conmigo por no poder quitar sus brazos de mí alrededor, molesto conmigo por sentir él aroma de su cabello, por sentir otra vez nervioso por su cercanía, por querer también corresponder le en él abrazo.
—No lo haré, tienes que escuchar me, por favor —Apreté mis diente molestó.
—No quiero oír te, no significas nada para mí.
—Tu sí para mí —Ella alzó su vista, viendo me a los ojos —Te amo, siempre lo he hecho, a ti no puedo odiarte, a ti no, no me odies cuando yo te amo —Me solto para después inclinar se hacía mí, me quede en shock, sin palabras, sentía la cercanía de Bulma, me quede viendo sus ojos "¡reacciona idiota!" decía mí subconsciente, pero no puedo, con fuerza la tomé de su cuello, uní nuestros bocas, la besé, la besé con deseos, una de mis manos bajo hasta su trasero, él cual apretó, ella gime en mí boca, sus manos van hasta mí camisa intentando quitar la, suelto él cuello de ella, y bajo mis manos hasta sus muslos sin dejar de besar la, tomó sus piernas abriendo las, con fuerza la cargó, ella rodea mí cadera con sus piernas haciendo que nuestros sexos se toquen, sus manos van a mí cabello, jalando lo, me dirijo a mí cuarto mientras la besó, al llegar con rudeza, ella sonrió, me acosté sobre ella, tomé sus brazos con una sola mano dejando los sobre su cabeza, sabía que lo haría, me acostaría con ella, y listo.
Sujeté sus muñecas con una sola mano, y empecé a besar su cuello, bajando por su clavícula, la solté para romper su blusa con mis dos manos, dejando la en brassier empecé a besar sus pechos por encima de la tela, bajé por su abdomen oyendo sus gemidos, hasta llegar a mí objetivo, empecé a bajar hasta él borde de su short, lo abrí quitando se lo, y dejando la en ropa interior, se ve extremadamente sexy así... Argh, Bulma...Continuará....
Nuestro adorado Vegeta cayo ante Bulma, ¿qué pasará después?
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Whispers Of Blood. || V.B || ✔
Fanfiction[TERMINADA] A.U Y la vio, quitando se él casco de la motocicleta, su cabello azul claro como él cielo, cayo sobre sus hombros, sus labios rojos contrastaban con sus ojos que parecían un par de piedras exóticas. La reconoció en ese instante, sí era e...