Acción

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El sonido del pitido proveniente del termómetro en su boca llamó la atención del hombre sentado al borde de su cama. El padre Siwon había acudido a su habitación cuando no se presentó a sus tareas, lo cual no le dejó de otra alternativa más que fingir estar enfermo. Internamente rogaba tener aunque fuera una mínima de fiebre para poder quedarse en su cuarto el resto del día para poder pensar sus opciones.

-Bueno, aunque tenía mis dudas, si tienes fiebre. Treinte y nueve con siete es bastante elevado, luego mandaré a Taehyung para que te de medicina y un té natural. -El alivio le invadió, por ahora todo salía bien. -¿Me estás escuchando?

-A-Ah sí, disculpe señor. -Replicó añadiendo una tos falsa a su actuación. Estaba nervioso, no sólo porque el sacerdote siempre descubría sus mentiras con facilidad, sino que también la presencia del demonio con brillantes ojos grises recostado en la pared detrás del hombre cooperaba en poner sus nervios al límite.

-Vaya, eres pésimo actor. -Comentó despreocupado el pelinegro. Aunque ese ser sobrenatural, que nuevamente se había identificado a si mismo como Jeon Jungkook, le había asegurado que sólo él era capaz de verlo en ese momento porque estaba usando algún tipo de poder, según le explicó era un tipo de camuflaje especial que nombró "El velo de las almas" -Del cual no entendió mucho por supuesto- y por lo tanto no importaba si estaba allí a plena vista incluso hablándole. -Ya dile que te quedarás descansando así se va de una buena vez, tenemos que hablar.

-Si... -Murmuró muy bajo, lo último que quería era que el hombre le oyera.  -Por ahora quisiera descansar si no es molestia. -Habló ahora para ser oído.

-Por supuesto, estaré pasando a verte seguido para asegurarme de que te encuentres bien. -Dijo Siwon levantándose de la silla que había colocado a la par de la cama donde él estaba.

-No será necesario señor, muchas gracias-

-Insisto. -Replicó al instante. -Hay que cuidar bien de tu salud si queremos que vuelvas a tus tareas mañana, ¿No lo crees así? -Yoongi hizo una mueca. Ahora entendía porqué era tanta la preocupación por su supuesta enfermedad, todo se trataba de no perder al chico al cual asignarle las tareas aburridas y ponerlo a cocinar. -Llama si necesitas algo -En cuanto Min quiso hacer una pregunta, el mayor tomó la palabra de nuevo. -Algo muy muy vital, que sea de vida o muerte. -Añadió con una risilla. Y sin más, abandonó la habitación.

-Ugh, ese sujeto me irrita.

-Creo que tu también lo irritas a él. -Jungkook se separó del muro donde había estado recostado acercándose al pelinegro, para nerviosismo de este. -¿Por qué tienes esa cara de susto? Sólo quiero sentarme en la silla. -Consultó arrugando la nariz con molestia. -Es muy grosero tu comportamiento conmigo, ¿Lo sabes?

-¿Ah si? Pues disculpa por ser precavido con el hecho de que una criatura maligna se quiera poner cómoda en mi presencia, porque según recuerdo, los de tu especie no son la mejor compañía para un humano como yo y-

-"Los de tu especie" Si, eso fue grosero. -Interrumpió Jeon haciendo un puchero. -Creí que ya lo habías notado, pero no soy como los de que tu llamas mis iguales... De hecho, ellos y yo ya no tenemos nada en común más que nuestro origen. -Explicó calmado, tomando asiento de todos modos. -Pero no estamos aquí para hablar de especies, sino de como vamos a escapar. -Le escuchó resoplar. -¿Ya lo pensaste? Debe ser esta noche y mi plan es infalible.

Yoongi bufó.Comenzaba al fin a sentir la presión en sus hombros y pecho.

"Tendrás que ensuciar tu alma para que el Cerberus no te tome por su presa. Sólo hay dos formas de hacer eso... Deberás asesinar a alguien". Esas palabras continuaban repitiéndose en su mente, sumadas a las que le habían seguido, que en su opinión eran aún peores. "El objetivo perfecto es ese chico que vino a despertarte, puedo ver que él confía en ti, que te estima; lo ideal es que lo cites esta noche en la iglesia y allí lo asesines. Yo ayudaré a inmovilizarlo para que claves una daga en su corazón..."

La sólo idea de asesinar a alguien le revolvía el estómago, nunca siquiera se le había cruzado el pensamiento de que tendría queacabar con una vida, mucho menos, que quién moriría sería una persona tan dulce y adorable como era Taehyung. Si bien no podría decir que eran buenos amigos, el castaño había ganado algunos puntos con él y eso era mucho  teniendo en cuenta que sus personalidades era posible describirlas como polos opuestos sin que esta frase llegara a ser una hipérbole. Dudaba llegar a lograrlo, pero la mirada grisasea y helada clavada fija sobre él le daba a entender que negarse no llegaba a ser una opción viable.

¿Por qué ese demonio quería llevarlo fuera con él? No terminaba de entenderlo, aunque tampoco necesitaba saberlo, porque entre sus planes no figuraba el ser cómplice -O mejor dicho prisionero- de un demonio. No, Yoongi pensaba algo mejor: utilizar a Jungkook como vía de escape hasta un lugar seguro y luego voltear el tablero a su favor, sellando a esa criatura de maldad con sus conocimientos de exorcista para finalmente huir libre sin mirar atrás. Todo era perfecto. Excepto claro, la imagen de la estúpida sonrisa de Taehyung en su mente.

[ • ○ ♤ ○ • ]

La noche había caído demasiado rápido para su gusto. Tal y como dijo el sacerdote Choi, durante el transcurso del día le visitó varias veces, molestándolo no sólo a él sino que también a su azabache compañero temporal, al menos en apariencia.

De acuerdo al plan trazado, en cuanto Jungkook le dijo que Taehyung se acercaba para traer su cena comenzó a repasar mentalmente lo que debía decir. -No lo olvides, citalo en el interior y dile que no prenda las luces sino que lleve una vela para llamar menos la atención. -Asintió sin decir más. -No lo arruines. -Añadió con una sonrisa ladina mientras ingresaba a su armario, cosa que le llamó la atención. Si bien antes no lo había notado, cada vez que el castaño venía a traerle algo, el de orbes resplandecientes se escondía más no con los demás visitantes. Era curioso pues recordaba a este decirle que el velo de las almas era algo así como una barrera que separaba el mundo natural del sobrenatural y por ello, cuando hacía ese supuesto hechizo para traspasarlo, nada podía verlo, nada más que él claro, porque en palabras textuales "Era especial".

El golpeteo sobre la madera le sacó de sus ensoñaciones reflexivas y le trajo a la realidad. -Hyung, con permiso. -Una castaña y alborotada cabellera hizo acto de presencia en el marco de la puerta. -Traje tu cena y un postre que robé de la cocina. Creo que es compota de limón y jengibre. -Yoongi hizo una mueca de asco que provocó la risa de su menor. -Sé que suena feo pero los cítricos ayudan a las defensas y el jengibre es bueno para la salud, mi mamá decía eso~ -Tal y como en la mañana, algo en el interior del pelinegro se contrajo. -¿Sucede algo? ¿Te sientes mal?

-No... S-Sólo es que yo... -Sin poder completar su oración, desvío la mirada de los grandes ojos marrones que le observaban curiosos, posando su vista en las puertas de su armario donde dos destellos parecían hablarle con un claro "Hazlo". -Yo... Quería hablar contigo, a solas. -Pronunció al fin, pero no con menos peso encima.

-Oh, pues, aquí me tienes. -Señaló lo obvio.

-N-No, aquí no se puede lo que necesito... -Hizo una pausa en la cual trago grueso, cerró sus ojos y suspiró. -¿Crees que puedas verme en la capilla a media noche?

Estaba hecho ya. Su elección había sido sellada y esta fue acompañada con una sonrisa ladina de Jungkook, la cual dejó ver uno de sus grandes colmillos.

[ ° ● ♤ ● ° ]

Al dar la última campanada de las que anunciaban el comienzo de un nuevo día, Kim Taehyung ingresaba con prisa y cuidado de que su vela no se apagara. No podía ver más allá de su nariz pero eso no le molestaba.

-¿Hyung? -Murmuró al aire llamando a quien él creía su mejor amigo. -¿Estás aquí o yo llegué temprano? -Al no recibir respuesta alguna comenzó a dudar, hasta que el sonido de una respiración detrás de él le llamó la atención.

Antes de siquiera poder voltear, sintió algo punzando en su espalda. Lo último que sus ojos pudieron ver fue a una figura vestida totalmente de negro acercándose de frente; luego, nada.




¿Perdón?

Igual estoy segura que nadie esperaba esta actualización 😄

Mejor huyo de las pedradas(?)

Holy Sinner - YoonKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora