Capítulo #66

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Santiago

Ya en la noche, en mi departamento, tenía demasiada hambre, sé que suelo comer muy seguido, pero ya eran las 12:30 de la noche y no había ningún restaurante cercano abierto.

Me decidí a cocinar, es obvio que no puedo solo, y pedí ayuda al internet, mientras me convertía en un chef profesional, me doy cuenta que no tenía sal; y salgo a ver si un vecino tenía un poco que me regale.

Toqué varias puertas y nadie salía, supongo que están durmiendo, de pronto veo que una chica entra a la habitación 104, justo la que queda alado de la mía, se me hizo raro que una chica este afuera a estas horas, ¡Y si es un fantasma! No, no creo que haigan fantasmas aquí, ¿o sí?.

Necesitaba la sal, mi estómago gritaba ¡Alimentame!, y me arriesgue, fui caminando muy lento con una cuchara en la mano, para defenderme de cualquier cosa sobrenatural que encuentre.

Toqué la puerta pero nadie salía y escuche la chapa sonar, y giraba lentamente, ¡Dios que no sea ningún fantasma! Agarré mi cuchara listo para atacar, por una extraña razón que sucediera
-¡No me hagas nada fantasma!- grité
-¡No me hagas nada ladrón!- gritó.

Abrí los ojos poco a poco y al frente mío estaba ella, muy asustada con los ojos cerrados.

Tan perfecta, su cabello caía perfecto sin que ella lo pretendiese, su piel delicada, sus labios tan rosados, era ella, era de nuevo ella.

Sofía

En la noche estaba muy aburrida y recibo la llama de Liam
-Hola, Sofía quiero saber, si quisieras ir al cine un rato conmigo- se notaba nervioso, sonreí
-Por supuesto, no tengo nada que hacer
-Ok, voy por ti a las 9, ¿te parece?.
-Sí, te veo en un rato- me arreglé, me coloque una blusa un poco más abajo de mi hombligo color blanca con estampados amarillos y una falda larga color mostaza, la que llegaba arriba de mis rodillas, lleve un chaleco, por el frío.

Ya lista, fuimos a comer, yo quize pizza, pero como Liam no le gustaba el queso, aún no entiendo qué le pasa, ¡El queso es lo mejor del mundo!, el escogió otra cosa y luego  vimos la película; fue muy divertido ya que vimos de comedia, mis favoritas, cuando bajábamos las escaleras, el tropieza y lastima sus rodillas, las cuales sangraban.

Nos dirigimos a mi habitación, como eran las 12:30 de la noche, no habían cerca farmacias abiertas, para comprar alcohol; por lo cual baje a recepción a pedir un frasco, no había nadie, pero había un botiquín.

Cuando subí, remoje un trozo de algodón en alcohol y pase suavemente sobre la herida que tenía, mientras sanaba la herida Liam dice
-Eres tan linda
-Gracias, ya lo sabia- y reímos juntos
-Te hablo en serio, me gustas mucho- de pronto suena la puerta; era raro que tocaran mi puerta a esta hora de la noche.

Además en los pasillos de las habitaciones no había nadie. Y los guardias ya no estaban en la puerta. ¿Será un ladrón?, ¿O un fantasma?, pero es más probable un ladrón, hay no.
-¿Vas a abrir?- dijo mirando mi cara de susto
-Sí- me hize la fuerte, no quería parecer niña pequeña asustada.

Caminé y cuando estaba al frente de la puerta vi la escoba y la agarré, ¡Dios que no sea un ladrón!, moví la chapa para abrir la puerta lentamente
-¡No me hagas nada ladrón!- grite
-¡No me hagas nada fantasma!-grito alguien, sonaba una voz masculina, pero aún así no abría mis ojos.

Luego de unos largos segundos los abro. Era él, mis ojos se abrieron tan grande, estaba al frente mío, ¡Santiago estaba justo frente mío!, quería salir corriendo pero no podía, nos mirábamos uno al otro y no apartába mis ojos de los suyos.

Me percaté que tenía una cuchara en su mano y yo una escoba, me salió una sonrisa
-Que extraña forma de volvernos a ver- dijo Santiago sonriendo
-Así parece- dije muy tímida, mientras nos veíamos, se me había olvidado de Liam y el sale
-¿Que sucede Sofía?- dijo colocándose al lado mío
-¡Ouch! No sabia, lo lamento mucho- dijo muy apenado
-No, no es...- dije, pero no me dejo terminar
-Hola Santiago, ¿que haces aquí?
-Solo quería saber si tenían un poco de sal
-Sí, ya te la traigo
-No, yo voy por ella- dijo Liam, el entró y en ese momento el rostro de Santiago se torno triste, ¿tal vez no le gusto verme de nuevo?- Aquí está- dijo Liam, dándole un envase donde estaba mi sal
-Gracias, mañana te la devuelvo
-No te preocupes- e ingreso al cuarto de alado.

Aún seguía mirando la puerta en la que había entrado
-¿Sofia no vas a entrar?
-Sí, vamos- ingresé, terminé de sanarle la herida y se retiró a su casa.

Aún no creía que el estuviera viviendo justo alado mío. Me apoye a la pared que comunica con su habitación y resbalé mi espalda sobre ella, hasta caer en el suelo totalmente sentada- Santiago, no te imaginas cuanto te he extrañado.

Santiago

Después de ingresar a mi habitación, me sentía tan triste y tan feliz a la vez, ¿Sofía se había comprometido con Liam?, ¿Ya eran esposos?.

Es tan hermosa, sus ojos brillantes, su sonrisa, la había extrañado tanto, luego huelo algo muy mal.

¡Diablos! Deje prendida el horno con el pollo dentro. Corrí y saqué el pollo, pero según la receta debía quedar dorado, pero el mío salió tostado; se había arruinado todo, pero las ganas de comer se me habían ido.

Me apoye a la pared que me comunica a su habitación, y resbalé mi espalda sobre ella, hasta caer al suelo- Sofía, no te imaginas cuanto te he extrañado

Se despide Jhoselyn 💖.

Se despide Jhoselyn 💖

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