-No estoy segura de cómo me queda-susurro al espejo-No me gusto-
-A mi me encantas y estas preciosa con ese vestido-
-Te estoy hablando en serio-
Viene hasta mi y a mis espaldas, con sus manos en mi cintura.
-No existe nada que no te quede perfecto-
-No quiero ir a la fiesta de tu madre, podes ir solo-
-Voy a ir con mi mujer embarazada a la fiesta de mi madre-
-No me entendes...-
-No hay mas nada de que hablar, licy-
Me da un beso rápido en los labios y desaparece del vestidor. Tengo todo el día de hoy para convencerlo que no me lleve a la fiesta, si fuera de noche me pongo algo oscuro y se disimula la silueta pero es pleno medio día.
Salgo del cambiador una vez me puse mi ropa y con el vestido en la mano, me encamino a buscar a Tian.
-Señora, Shire...-
Me sorprende el vendedor, pero todavía no me acostumbro a mi nuevo apellido.
-¿Se decidió por ese modelo?-
-Creo que si...-digo entregándoselo.
-Enseguida se lo envuelven y se lo entregan en la caja-
-Perfecto, gracias-
Así que voy hacia la caja, busco la billetera en mi cartera, pero cuando voy a pagar, me informa la chica que ya esta pago, así que agarro el empaque y estiro el cuello buscando a mi marido, pero no lo encuentro en todo el local.
Cuando estoy llegando a la puerta de salida, un hombre que entra me lleva puesta.
-Lo siento, señorita, ¿está bien?-murmura el hombre con acento francés.
-Si-respondo, lo miro con mala cara y continuo mi camino, mientras busco mi teléfono en la cartera para llamar a Tian.
-Perdón... no me parece que este bien-
-Si, lo estoy, gracias-
Trato de abrirme paso, pero se coloca frente a mi bloqueándome el camino.
-Señora, Shire, voy a ser directo, su marido no va a aparecer, si es a quien busca-
Cuando dijo "Señora Shire" se me paralizo el cuerpo.
-¿Dónde está mi marido?-me sale preguntar con prepotencia.
-Su marido, nos debía un favor, y no cumplió-se acerca más a mí.
-Me pongas una mano encima... porque grito-susurro dando un paso hacia atrás.
De repente le suena el teléfono y responde, habla en francés, no entiendo nada. Entonces, me empiezo a preguntar si debería correr y recuerdo que estoy embarazada y no es la mejor opción, la otra opción es dejar hablar a este hombre y ver de que va todo esto. Un miedo me corre por el cuerpo, necesito que Tian este bien, necesito saber donde esta.
El hombre termina la llamada y susurra...
-No voy a lastimarla... su marido... -no llega a terminar la frase ya que recibe una piña en el rostro de un hombre más grandote que él que viene acompañado de otro hombre que se acerca hasta mí.
-Señora, Shire, vamos, secuestraron a su marido, no entendemos como pasó-
-¿Cómo secuestrado?-pregunto casi en una crisis de nervios.
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Incesante Deseo, Para siempre mía, en cuerpo y alma...
Storie d'amoreContinuación de Incesante Deseo, la pasional historia de amor de Bastian y Alicia.