El precio por tu amor

Visita

"El precio por tu amor" 

Capítulo 2: Visita.

—Hasta pronto, Ji Yong. —Su mano se estiró hasta alcanzar a un cansado Ji Yong, gesto que no demoró en ser correspondido, tomando la mano con delicadeza. El tacto fue suave y agradable.

La delgada y blanquecina mano del menor a penas y lograba abarcar la palma del otro.

—Adiós, Choi. —Las rectas palabras sólo ensancharon más la traviesa sonrisa, el contacto se hizo más fuerte y la distancia más corta.

—No tienes por qué hablarme tan formalmente, nosotros...

—No somos cercanos...—Contradijo Kwon de inmediato, intentando soltarse y alejarse un poco, de no ser así temía lanzarse encima del otro. —Yo...soy una persona muy tímida con la informalidad...—Excusó dudoso, no era precisamente bueno mintiendo ni mucho menos inventando cosas.

Los modales podían irse a la reverenda nada, sin que le importase un poco, pero necesitaba un excusa para alejarse de aquel hombre. Un alejamiento voluntario, y no porque en la corte le consideraran culpable de violación en un grado muy alto.

Porque sí, Choi le agradaba en ese sentido y muchos otros.

—Yo creo que los modales son maravillosos. —Respondió, apresurándose a soltar la mano de Ji Yong, sin querer incomodarle más. —Ha decir verdad, me he comportado de manera inapropiada usted, déjeme compensarle. —Su gesto y palabras eran severamente serias, al grado de sentirse ahora como verdaderos extraños. Como lo que eran. —Mi nombre es Choi Seung Hyun, recientemente he comenzado a vivir frente a usted. —El gesto de Kwon se descompuso ante la innecesaria presentación, remplazando la seriedad por sorpresa. —Espero poder verle más tarde, sino hasta mañana será. Con su permiso. —Se despidió, dedicando una última sonrisa.

Debía estarse divirtiendo, ya que, aunque sus palabras eran formales, su mirada brillaba divertida. Ji Yong sólo le observó marcharse en dirección contraría hacia su casa, casi podía jurar verle sonreír.

— ¿Por qué tiene que lucir tan bien en ropa deportiva? —Murmuró entrando a su hogar, intentando alejar ese caprichoso pensamiento que le había atacado esa mañana.

Choi Seung Hyun era del tipo de personas dignas de ver en grandes carteles del famosas marcas de cualquier cosa, de eso estaba seguro.

...

—Llegando tarde otra vez. —El viejo profesor había tomado la molestia de detener su explicación, tan sólo para recriminar a Ji Yong, quien yacía en el marco de la puerta, mirando el suelo avergonzado.

No era la primera vez.

—Lo siento...—No había más excusas que usar, ya todas las había agotado.

—Ésta es la última vez, Kwon. —Y esa advertencia también la conocía perfectamente.

El menor entró en silencio, bajo la atenta mirada de todos, hasta posicionarse a un lado de su compañero de mesa.

—Eres un caso perdido, Kwon Ji Yong. —Escuchó decir a SeungRi, intentando hablar lo más bajo posible, cubriendo sus labios con el libro de la clase.

—Mira quien lo dice. —Agregó, sacando lo necesario para tomar nota del día, tenía muchas más cosas que agregar, sin embargo la arisca mirada del viejo profesor bajo sus anteojos le hizo desechar la idea. No necesitaba más problemas.

Las clases transcurrían exactamente igual que el día anterior y que el día siguiente, era tedioso. A pesar de estudiar lo que siempre deseó terminaba aburrido en clase, sin importar que Ri estuviera a su lado. Le hacía falta algo.