So ist es immer©[Nash Gold Jr. AU]

7.Gefährlicher Kuss

Si haces cosas buenas vendran cosas buenas. Eso es lo que decia mi madre.

Pero pese a eso yo habia hecho cosas malas y no deberia quejarme de resivir este trato.

-Camina mas rapido quieres.

Ordena Nash caminando delante de mí.

Sólo tengo vista de su ancha espalda y de su cabello rubio recien lavado.

Hace apenas unos minutos salimos de sus casa para ir a una fiesta con uno de sus amigos, aunque no sé que hare yo ahí.

Debo abmitir que este juego raro de sumisión aún no tiene forma definida no puedo evitar sentirme a la defensiba y algo impasiente.

Dejo mis pensamientos de lado y pongo atención a mi entorno notando que justo ahora caminamos por una calle desconocida y muy silenciosa que me hace sentir incomoda al igual como si alguien me observará.

-Sí-Músito y tengo que correr para llegar a su lado.

Apenas y le llego al hombro pero eso no impide que pueda oler su perfume masculino agradable.

-¿Qué me ves?

Hasta ese instante no me habia percatado de que lo observaba con atención.

Aunque aquí en America hay varias personas con sus caractaristicas: Rubios, altos, ojos verdes.

Nash tiene algo diferente que lo distingue de los demas. No sé si es esa mirada misteriosa o esa actitud que impone miedo pero a la vez te intigra o esa tranquilidad que te hace creer que siempre esta analizando todo, pero sin duda alguna él es alguien interesante.

Interesantamente peligroso.

-N-nada.

Carraspeo.

Me pregunto que clase de amigos debe tener para venir a un barrio con mala pinta.

Dudo que él me diga.

Pasamos una casa con perros y me hacen recordar Niguo.

Me dan ganas de reir. No me acuerdo de mis amigos pero me acuerdo de un perro, soy una exelente persona.

-Esperame aquí.

Choco contra su espalda puesto que estaba embobada mirando a los perros jugar con una pelota dentro del terreno donde estan.

-S-sí-Desbio la mirada al notar la cara de frialdad de Nash.

Con ella me dice que no le gustan las personas torpes.

Suelta un suspiro y toca la puerta de una casa de color blanco con plantas colgando en ella.

Alguien abre la puerta segundos despues aunque apenas y pude ver quien era.

La verdad es que aún no sé que hise. No sé como mierda termine besandome con Nash el gimnasio, ni como termine besandome con él esta mañana cuando llegue a su casa.

Él actua tan indiferente luego de cada beso que apenas y puedo afirmar si no ha sido un sueño. No dudaria en creer si algún dia me dice que sólo me lo imagine.

-Vamonos.

Pego un brinco chocando contra una de las macetas que estan colgadas al escuchar su voz.

Tiene una sonrisa que me da mala espina y no hay que conocerlo demasiado para saber que algo malo planea.

No digo nada y sólo camino detras de él con la cabeza gacha.

Nash Gold Jr es un tipo raro.

Teniendo auto vino caminando desde muy lejos junto conmigo. Aunque no hay que pensarlo demasido para adivinar que talvez lo haga para joderme.

Continuamos avanzado por las calles hasta que llegamos a otro barrio pero a diferencia del anterior este luce mucho mas desente. Muchisimo más, aclaro.

Es un lugar con autos de lujo por donde veas.

Este el tipo de personas con los que es mas creible que Nash se relacione.

-Llagamos.

Dice seco parado frente a una gran casa con una alta barda que me hace recordar a un anime que vi hace unos años.

Toca el timbre y no pasa mucho cuando alguien... Mejor dicho, una chica se abalanza sobre él dandole un beso en los labios.

¿Qué carajos pasa aquí?