Ser sociable no era de las cosas que mas se me daban, yo soy una persona que si no tenia nada que tratar con otra preferia no hacerlo. Precisamente por eso el contacto fisico ere casí inexistente.
Incluso llevandome a sentir incomoda si alguien que no conocia me abrazaba.
—Jason—El hombre mayor de cabello grises oscuresio su mirada-Sueltala.
—¿Eh?... Yo sólo queria conocerla.
Sonrió pero dicha sonrisa me causo un sentimiento de rechazo, por lo que sin quererlo parecia alerta, esperando algo de su parte sin saber que.
—Silver—Nash metió sus manos en sus bolsillos-Ella es Tetsuna Kuroko.
—Uhm...
Mascullo aún sin dejar de abrazarme, cada vez me sentia mas sofocada sobre todo porque sus ojos grises me miraron fijamente como estudiandome.
—¿De donde eres?
Finalmente me soltó y sentí me alma regresar a mi cuerpo. Al fin mi especio personal regreso.
—Japón.
—¿Como conociste a una chica japonesa?
Arquea una ceja, cuando Nash esta por respender veo llegar por el rabillo del ojo a Dawn.
—Tomen, tomen.
Los tres dejan de mirarme en un dos por tres. Y ya se porque luce tan presumida. Es la niña de la casa, tal parece.
No pude más que quedarme en mi mismo sitio siendo ignorada una vez más
Aveces me impresionaba la facilidad con la que todos se olvidaban de mi presencia tan fácil, aunque debía estar acostumbrada.
—¿Acaso quieres que te de la bebida en la mano?
Me congele.
Algo en mi hizo erupcion en este instante.
Tal vez escuche mal, quise creer sin embargo a mi costado estaba Nash con su cara inexpresiva. Mirándome desde arriba como lo hacia con todos.
¿Él se acordó de mí?
—Ah yo... —Torpemente tome un vaso de vidrio de la bandeja.
Antes habia sentido ese extraño cosquilleo.
Como de hormigas recorriendo tu espina dorsal.
Bebi del vaso lentamente y con las mejillas algo calientes mientras veia el perfíl de Nash.
Era un chico muy bello.
La forma en la que su cabello rubio rodeaba su cara y el verde de sus ojos... Era un hombre atractivo.
-¿Y bien que tal va todo con tu padre?
Nash resoplo y su semblante antes tranquilo desapareció en segundos.
-Papá-Reprocho Dawn.
-Bueno... -Empezo Nash-Le ha pedido a mi entrenador aumentar la rutina.
-Veo que aún sigue insistiendo con lo mismo,he...
Dijo el señor Silver mientras yo me preguntaba que era aquella en lo que tanto insistia el padre de Nash.
-Bueno... ¿Al menos no has dejado de jugar basquetbol?
Pregunto esta vez sonriendo supongo que tratando de alivianar el ambiente tenso.
-No-Nash medio sonrió-Últimamente hubo algo que lo volvió aún más divertido.
Nash miro por el ravillo del ojo en mi dirección.
Aunque me convencí a mi misma que sólo fue concidencia.
-¿Y se puede saber que es?
Pregunto Jason que hasta ese momento había permanecido callado.
El rubió soltó una risita-Me temo que no.
Justo en ese momento pude sentir la mirada de Dawn sobre mí y le regrese la mirada con la misma intensidad.
Se volvió un duelo silencio de miradas que no duro mas de 15 segundos porque Nash se levantó junto al señor Silver.
-¿Quieres aprender un nuevo truco?
Preguntó este sonriendo.
Nash volvió a sonreir y comenzarón a jugar un One-on-one para calentar.
-¿Tú no entrenaras?
Preguntó Dawn a su hermano.
A lo que este resoplo y se levanto de su asiento.
-Pff... Yo no lo necesito. -Dijo levantandose de su asiento-Dile a papá que salí de casa.
Puesto que este estaba concentrado en Nash ni siquiera notó cuando su hijo se marcho.
Dawn y yo nos quedamos escasos segundos solas antes de que ella dirigiera la mirada hacia a mí, me ignorá y se fuera a ver el partido de su padre y Nash de cerca.
Yo permenací en mi sitió viendo el partido de ambos desde ahí.
Nash sonreia. Una bella sonrisa... No una que parecia fingida y echa para menospreciar, una sonrisa que causaba calides.
Entonces pense que si él era capaz de hacer eso... Él era mucho mejor persona que yo.
Y tambien pensé que... Era un más mala persona por envidiarlo.
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So ist es immer©[Nash Gold Jr. AU]
Hayran KurguTetsuna Kuroko va america para cumplir una promesa a su amigo de la infancia, el cual es ahora uno de los mejores en las filas de la NBA dentro de su instituto. Fuerte por si solo ya no necesita de una sombra que le ayude arresplandeser más de lo qu...