Dimitri Ross era el típico chico superficial, al que todas las chicas aman porque resulta atractivo.
El día que perdió la visión fue para él, el más terrible. Habían estado quemando cosas con sus amigos, en un puro acto de rebeldía, para el final de esa noche, había perdido completamente la vista, sus córneas estaban quemadas.
¿Si volvería a ver? Dimitri requería un trasplante de córneas, y la lista de espera para quienes necesitan donante de córneas es casi interminable, pasaría mucho tiempo hasta que pudiese volver a ver.
Afectado por esto, dejó de ir a la escuela y comenzó a tomar clases particulares en su casa, donde, nunca había nadie.
Dimitri se había vuelto una persona solitaria y de poco humor.
Sólo ella podía hacerlo sentir un poco más vivo.

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El amor es ciego
RomansaDimitri jamás creyó en el amor fuera de lo superficial, hasta que un accidente le quita la visión, solo entonces descubrirá que amar no se trata solo de atracción física.