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-Por que esté Hyung es cada vez más encantador...- Pensé suspirando mientras lo observaba leer sus líneas en nuestra nueva canción-Hasta sus notas altas perfectas son.

Con un suspiro dejé de observarle cerrar mis ojos fingiendo cansancio, quería irme a casa, tener tan cerca pero a la vez tan lejos a Hyung me hacía querer escapar. Hasta que él notó mis expresiones acercándose a mi con un aura preocupada.

-¿Channie estás bien? Te ves muy cansado y podría jurar que tienes fiebre- acercó su mano a mi frente e hizo que mi corazón se acelerará sólo con su fino roce-No, no hay fiebre que alivio.

-Hyung estoy bien no te preocupes, sólo necesito descansar un poquito-siento que me voy a desmayar con su maldita forma de mirarme...

-Oh no, nos vamos a casa, me iré contigo para cuidarte no me vas convencer con eso de que "no Hyung estoy bien", le diré a los chicos que nos iremos, no te voy a dejar aquí si te sientes mal- Se levantó y no me dejó ni siquiera protestar, realmente me sentía algo alagado, se preocupa demasiado por mi.

Con mis mejillas rojas como la camiseta que llevaba me levanté, me sacudí el polvo y noté como todos los chicos se acercaron a chequear mi estado de salud, luego de las exageraciones de algunos miembros y unos "Dino, ¿de quien eres el bebé?" Me fui junto con Seokmin.

-Channie...- decía con su suave y cálida voz mientras miraba hacia adelante.

-¿S-si hyung?-le observé y el portaba una hermosa sonrisa en su rostro, de esas que te hacen babear por horas.

-¿Puedo preguntarte algo? Aunque si no quieres responder está bien-Asentí con una sonrisa tímida y nerviosa, además de que sentía curiosidad- ¿T-tú con Junhui tienen algo?

¿QUE YO CON JUN HYUNG QUE?

El detuvo su caminar, colocándose frente a mi esperando obviamente una respuesta, suspiré y luego de unos eternos segundos lo miré a los ojos.

-¿Hyung por que piensas eso? digo si pasamos mucho tiempo juntos pero no hay nada más que una amistad- un poco sorprendido sonrió, su aura era muy feliz ahora y me extrañaba eso, es raro que de la nada me pregunté por cosas así...

-Creo entonces que no era como yo y Hosh pensábamos- río suavemente y me uní a su risa simplemente porque amaba verlo así de feliz - me debe dinero ese Hámster.

-¿Apostaron sobre eso?-pregunté divertido mientras comentábamos a caminar ya que faltaba poco para llegar a casa.

-Si, es que teníamos esa duda desde hace un tiempo ya, pero bueno ya sé la verdad, gané dinero así que soy feliz- su sonrisa parecía imborrable y era mucho más brillante bajo las estrellas.

Seokmin, ¿que te hace tan feliz?

Rondaba esa pregunta en mi cabeza, estaba tan distraído en mis pensamientos que ya estaba dentro de casa y no lo había notado.

-¿Channie tienes hambre? puedo preparar algo si quieres... Oh! ¿Chan? ¡tierra llamando a Lee Chan!-me miró desde la entrada de la cocina, para luego caminar en dirección hacia mi persona para mirarme divertido-¿Pequeño en que piensas tanto? Ve a cambiarte y haré algo para comer,¿si?

Asentí con nerviosismo porque el simple hecho de tenerlo tan cerca y que se comportará así de lindo conmigo me tenía en las nubes.

Este Hyung siempre me tenia en las nubes...

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(...)

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-Dios santo...- dejé escapar un suspiro mientras pensaba en que hacer de comer, este niño me tiene muy mal -Channie deja de ser tan malditamente adorable...

Segundos después de eso comencé a preparar pollo frito, y al terminarlo los dejé sobre un plato en la encimera. Cuando estaba guardando las cosas que utilicé sentí los pasos de Dino dando la señal de que venía hacia a cocina.

-Hyuuuuung! creo que si tengo fiebre- me miraba los ojos preocupado con sus mejillas rojitas y un tierno puchero en sus labios, tome su carita con mis manos comprobando su temperatura, la cual seguía normal-

-Channie no hay fiebre alguna, no te asustes pequeño- le sonreí calidamente para tranquilizarle, no me gustaba verle preocupado- Ven, vamos a comer pollo frito hice mucho.

-Oh genial Hyung ¡¡tenía mucha hambre!!- se sentó cerca de la encimera y comienzo a comer con emoción, parecía una pequeña ardillita feliz al comer.

-Chan,¿ya no te sientes mal? digo te veías muy mal en la sala de prácticas- me senté cerca de el y lo miré curioso, no me gustaría que estuviera enfermo o algo así.

-Hyung sólo estoy muy cansado...y hambriento, muy hambriento- decía divertido, luego me miró fijamente aguantando la risa- ¿Eh S-Seokmin?

-¿Si? ¿Que pasa?- incliné mi cabeza hacia un lado, mirándolo con mucha curiosidad y sólo veía que el aguantaba su risa mordiendo su labio.

-Tienes harina en el cabello y en la nariz...-comenzó a reír con fuerza mientras yo reía con el, ¿como llegó la harina hasta mi cabello? creo que estoy muy distraído últimamente.

Él entre risas se acercó un poco más a mi para comenzar a sacudir mi cabello, con una sonrisa le agradecí, iba a sacar la harina de mi nariz con mi mano cuando el la tomó diciendo-Hyung lo haré yo no te preocupes...- acercó más su rostro al mío para sacar con cuidado la harina de la punta de mi nariz.

Lee Chan, tu cercanía me está matando y sus rosados labios estaban a tan pocos centímetros de los míos que estaba apunto de enloquecer, me miró a los ojos y quité rápidamente mi vista de sus labios para hacer lo mismo.

-Ya está listo Hyung...deberíamos descansar un poco en el sofá y si quieres jugar videojuegos o algo así...-su suave voz era música para mis oídos tal como sus bellos ojos tenían un brillo especial que no había visto nunca en él.

Lee Chan...

Mi amado dinosaurio

¿Qué ocurre contigo pequeño?

-Está bien Dino bebé...vamos-mi voz sonó algo grave lo que hizo que las mejillas de Channie se tornaran rojas comenzando lentamente a alejarse para caminar hacia la sala.

Dejándome en claro una cosa...

Cada día me vuelves más loco, Lee Chan

24 Hours. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora