Nuestra Fugitiva #1 (Terminada)

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Quiero editar la historia porque tiene unas cuántas faltas pero no quiero perder mucho tiempo leyendo porque tengo otras historias que actualizar así que les agradecería que cuando encuentren una falta o incoherencia la comenten en el párrafo que está. Se me haría mucho más fácil porque sus comentarios me aparecen en las notificaciones y así voy directamente a donde está la falta y la corrijo

Gracias 😘

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- Hola- susurró, la persona al otro lado mantuvo el silencio unos segundos

- Lo sabes- afirmó en el mismo tono de voz

- Lo sé. Y no me duele, no me siento mal, me siento al fin aliviada y eso me asusta...se supone que tendría que doler un poco- susurró sin rastro de dolor en su voz

- Se supone...pero no duele, se siente bien al fin. Hace tiempo que no me siento tan...libre- suspiró al fin aliviado

- Estaremos bien- sonrió un poco- Michael me dijo que vendrías

- En una semana princesa

- Excelente- pronunció lentamente con ese tono pensativo que él conocía muy bien

- ¿Que se está conspirando en esa loca cabeza?- preguntó con diversión y algo de temor

- Aah...- jadeó, se puso una mano en el pecho indignadas aunque él no la viera- ¿desconfías de mi?- sollozó falsamente

Axel soltó una carcajada, era increíble el poder que tenía su hermanita para hacerlo reír en éstas situaciones

- Te tengo miedo- aclaró con una sonrisa, Lía sonrió también

- Más te vale- luego de unos minutos más, unos largos minutos de charla, se despidieron prometiendo verse en una semana

***

- Ava tranquilízate, mi hermano no es una estrella de Hollywood, es un simple estúpido con suerte genética- chupó uno de sus dedos manchados del merengue que estaba utilizando para decorar el pastel frente a ella

- Es un maldito dios griego, ¿eso quieres decir verdad?- la chica metió un dedo en el recipiente con el merengue y Lía le dió un manotazo

- Axel es demasiado tierno y sonrojable para ser un dios griego. Tus hermanos son dioses griegos, no sabes lo bien dotados que están, estoy segura de que tus padres los hicieron con muchas ganas. Y esos traseros tan firmes y...

- ¡Ya entendí! Estás caliente como el infierno con mis hermanos y seguro ustedes también lo hacen con ganas porque mira que trillizos...no se consiguen así nomás. No son uno ni dos, son tres ¡Tres!- gritó la última palabra, Lía no pudo evitar reírse

- Lo siento, el embarazo tiene mis hormonas muy activas- Ava sonrió de lado, su cuñada le caía muy bien

- Quiero tener hijos algún día. Me gustaría ser mamá joven, antes de los veinticinco como tú- se acercó a Lía para ayudarla a batir con una cuchara la masa de otro pastel- no deberías hacer ésto, deja que yo lo haga o mis hermanos me matarán por no cuidarte