| | «C a p í t u l o 6» | |

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I

Dorian regresó antes del amanecer. Se desnudó en el río a pesar de ser pleno invierno; gracias a nuestro pacto, no le teme a un simple resfrío. Con cierta prisa, lavó su cara utilizando agua de deshielo y volvió a ingresar a la mansión Gray a través de la misma ventana de la biblioteca que había utilizado al escapar. Ya en el calor de su hogar, se colocó su bata y esperó a que alguien lo encontrara allí, leyendo a causa de un supuesto insomnio relacionado con su malestar de los últimos días.

Pero nadie fue por él.

Supongo que lo habrán creído demasiado cansado y no desearon interrumpir su sueño.

A la hora del desayuno, Dorian se cansó de esperar, se hartó de pasar las hojas de una novela que no le interesaba. Entre resoplos y maldiciones silenciosas, asomó al pasillo y recorrió la construcción hasta lograr que su camino se cruzara con el de su madre; sabía los horarios y recorridos de memoria. Explicó a Margaret que el insomnio lo había arrancado de la cama en medio de la noche y que recién en ese momento se sentía listo para reposar. Aseguró que iría a darse un baño de relajación y que luego descansaría un rato. Se disculpó por ausentarse de la mesa y de sus obligaciones. Así, continuó con el resto de la mañana como mejor le pareció, sin interrupciones.

En realidad, no se recostó.

Ahora vuelve a partir, furioso ante una nimiedad. Abandona la mansión Gray por la puerta principal y sin ocultar su salida. Poco tiempo ha pasado desde el mediodía y nadie parece haber notado su excursión al puerto durante la madrugada. No lo han interrogado y ni siquiera su curiosa madre parece sospechar de lo ocurrido. Toda preocupación al respecto se ha diluido con el paso de las horas. En estos momentos, la mente de mi protegido está centrada en otro asunto más mundano (o eso cree él).

Ambos cambiamos nuestros planes.

Yo estoy preparado para tomar forma física y para presentarme frente a Dorian cuando estuviese en su cuarto.

Él, por su parte, no tenía pensado realizar un nuevo viaje a la ciudad todavía, pero su fascinación por la belleza y por la perfección lo han llevado a modificar su laxa agenda. Está enfadado, decepcionado. Y la causa me hace querer reír a carcajadas.

Le dejaré montar su escena antes de hacer acto de presencia. La queja que tiene en mente carece de fundamentos y posee una explicación que solo yo puedo darle. Aunque, de nuevo, ¿qué clase de diversión podría tener yo si le resuelvo todas sus incógnitas?

Quiero sorprenderlo.

Tengo algo en mente, solo me falta ultimar un par de detalles.

"Pronto, Dorian, muy pronto estaré a tu lado para guiarte a tu propia perdición".

El joven Gray ajusta su chaleco y se coloca un abrigo. Se recoge el cabello con un cinto negro y espera a que un sirviente traiga a su viejo alicanto desde el criadero de la montaña. Lo ha mandado a pedir hace ya más de una hora y sabe que llegará pronto.

Siente que la impaciencia lo consume. El malhumor es palpable en la curvatura de sus labios y en la posición de sus cejas. Atraviesa uno de esos momentos humanos en los que hasta el más mínimo problema hará que su furia estalle. Como en él solo queda un nexo con su Vert, las pocas emociones que sienten son siempre negativas.

Mueve uno de sus pies a causa del hastío; todo le resulta frustrante. No es solo la espera lo que le incomoda. Los alicantos no son sus bestias preferidas, pero tienen el equilibrio perfecto entre comodidad, velocidad y tamaño. Son criaturas imponentes que solo el rey y la familia Gray poseen entre sus monturas. Además, Botsy es la mascota que sus padres le han obsequiado a Dorian cuando era niño y por eso se ha vuelto su montura usual. El ave no es bella y ha tomado años enseñarle a enfriar sus flamas cuando un amo se lo ordena. Mi protegido teme, de hecho, que un día la criatura escape a su control y lo queme vivo. No hay registro alguno de esta clase de accidentes con aves entrenadas por la familia Gray, aunque incluso yo comprendo que existe siempre una primera vez para todo.

Corromper a Dorian Gray  (CDLH #1) (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora