Casa club

Epílogo: lluvia de recuerdos

Diez años después

En una cálida tarde de domingo, siete amigos se encontraban reunidos charlando y bebiendo jugos naturales mientras seis pequeños corrían a su alrededor. Casi todos los domingos se repetía aquel patrón, hoy la casa seleccionada para la reunión era la de Jackson y Kunpimook. 

Algunas veces los chicos discutían, y una de las discusiones más comunes entre los niños era debido a los roles que tomarían en el famoso juego del papá y la mamá.

—Papá, Bae no quiere ser el tío.— dijo con un puchero el pequeño Chang, hijo mayor de los anfitriones. — insiste en ser el papá.
—Cariño, en otra ocasión puedes ser el papá.— intervino JaeBum, uno de los padres del muchachito.

Bae asintió de mala gana y corrió hasta las escaleras de la refaccionada casita club; aquella casita que había visto crecer a los ahora hombres de familia.

—Corre la misma suerte que yo en ese juego— rió con ganas YoungJae. —¿Recuerdan cuando jugábamos?, aunque nosotros lo nombramos como "papá y papi". Quien diría que algún día llegaríamos a ser realmente padres.

❦ ❦ ❦

Escogían por piedra papel o tijeras el rol que cada uno desempeñaría en el famoso juego del papá y la mamá, JaeBum consiguió el papel de papá uno y JinYoung sería el número dos, el papel de hijos le fueron asignados los dos menores del grupo, a quienes les agradaba la idea. De esa forma asignaron los otros roles en el dichoso juego.

—Que injusto. Yo quería ser papá, no tío.
—Ya tendrás otra oportunidad Jae, no te preocupes, ser tío es genial.— le consoló su querido vecino.
—No te preocupes, para la próxima nosotros seremos los padres.— dijo Mark, quien también era tío.
—La verdad cualquier cosa es mejor que ser la mascota.— dijo Jackson con mucho pesar, mientras sus amigos reían. Siempre perdía y le asignaban el puesto de cachorro.

Y así comenzaron el juego, todo marchaba de forma normal, los más pequeños haciendo berrinche, Jackson ladrando, los no tan contentos tíos consintiendo a sus sobrinos y JaeBum ayudaba a JinYoung con la cena (que en realidad eran galletas molidas con un poco de fruta). Una vez que la cena estuvo lista se sentaron alrededor​ de la mesita azul a comer, incluso Jackson.

JinYoung era un padre estricto, por lo que luego de cenar llevó a sus hijos a dormir y luego fue con JaeBum al otro rincón de la casita club.

—Deberían darse un beso de buenas noches, eso hacen los papás.
—Jackson, los perros no hablan, así que cállate.— mencionó Mark con molestia, odiaba cuando el chino sugería besos.

Los aludidos se rieron de las ocurrencias de su amigo, pero le dieron en gusto, claro que JinYoung solo beso la sonrojada mejilla de JaeBum.

❦ ❦ ❦

—Mark estuvo casi una semana sin hablarme luego de eso.
—No fuiste el único, YoungJae no fue a mi casa por dos semanas, estaba tan triste.
—Sinceramente yo siempre creí que ustedes terminarían juntos.— acotó Jackson con sinceridad.
—Jackson, los cachorros solo ladran.— dijo Mark logrando que todos rieran, incluido el chino.
—Aunque igual formaron una linda familia.— añadió el dueño de casa tras la mirada asesina que le enviaron YoungJae y Mark.

Luego de acabar la universidad Mark y JinYoung decidieron ir a vivir a Estados Unidos, poco después sus amigos les siguieron y acabaron viviendo como vecinos. No solo comenzaron a vivir juntos sino también contrajeron matrimonio y adoptaron a su primer hijo, Ryan. Un año después llegó a sus vidas la bonita Yun, completando así a la familia Tuan Park.