capitulo 24

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Vengeance se paseaba dentro de la oficina de Justice. Su plan era tan bueno como lo iba a conseguir. Dejarían hablar a Halpern, y luego lo enviarían en su camino. Negaban que Asher fuera de Halpern, por lo que sabían que nunca había visto a Asher, y Blue había producido su certificado de nacimiento, que no tenía padre en la lista.

Jacob Hill, Justice y Vengeance estarían presentes, con Tiger y Fury mirando desde los monitores de vigilancia de al lado. Planeaban grabar todo, por si acaso.

-¿Está buscando? -preguntó Blue, mordiéndose la uña con preocupación. En todo el tiempo Venganza la había conocido, ella nunca había hecho eso antes, y le mató que estaba tan nerviosa que lo hizo ahora. Si Halpern hizo un movimiento equivocado, solo uno, y Vengeance esperaba que lo hiciera, se desgarraría la garganta.

"Sí", afirmó la Justicia, "Todos los humanos que visitan la Reserva son buscados".

"Tome su teléfono celular, y verifique si hay grabadores", dijo, "grabó el discurso de un oponente una vez. Luego reorganizó las palabras de modo que él estaba diciendo algo realmente racista y lo usó para una mordida en la radio. Su oponente se retiró de la carrera Porque nadie lo creyó cuando lo negó, probablemente tratará de hacer algo similar aquí si no consigue su camino.

-No se saldrá bien -le aseguró Venganza-, se irá, y si tiene suerte, se marchará con su vida y no en pedazos.

Blue trató de sonreírle, pero fracasó miserablemente y terminó mordiéndose los labios para no llorar.

El teléfono de la justicia sonó en su escritorio y él respondió rápidamente y colgó, "Él está aquí", les dijo.

Venganza se puso delante del cuerpo de Blue, protegiéndola con la suya y Justice salió de detrás de su escritorio. Los dos hicieron una vista intimidante.

La puerta se abrió y el senador Tom Halpern entró. Justo detrás de él había un guardaespaldas, una mujer vestida profesionalmente y Jacob Hill.

Vengeance vio a Halpern escudriñar la habitación, pero no mostró ningún rastro de nerviosismo. De hecho, a pesar de enfrentarse a dos varones que apenas mantenían sus facetas de civilidad, estaba notablemente imperturbable. La venganza respiró y se sintió desconcertada. Todo lo que podía sentir era el triunfo de Halpern, el hombre estaba casi delirantemente feliz.

"Caballero", los saludó, "Eliza".

La mano de Blue se movió por el brazo de Vengeance para agarrarlo fuertemente, y ella se acercó a él, sin soltar su mano.

Vengeance gruñó, "No le hablas a ella".

Halpern, aunque de ninguna manera un hombre pequeño, era todavía cuatro o cinco pulgadas más corto que Vengeance, y por primera vez, parecía inseguro de cómo actuar o responder. Cubrió su malestar retrocediendo y alzando las manos hacia arriba, con las palmas hacia fuera, "Por supuesto", dijo, "No quería decir falta de respeto".

La justicia avanzó: -¿Qué quiere el senador Halpern? -preguntó severamente.

La mujer, que hasta ahora permanecía en el fondo, dio un paso adelante: "Soy la abogada del senador Halpern, y tengo un decreto judicial en el que declaro que Asher Halpern, el hijo biológico de Eliza y Tom Halpern, será devuelto a su padre. Policías que nos acompañaron y que no pudieron entrar en esta reunión están aquí para detener a la señora Halpern por secuestro ".

Vengeance sintió un rugido en su pecho. Estos seres humanos tomarían tanto a su pareja como a su hijo. Pondrían a Blue en una jaula. Y darían a Asher a un hombre que no dudó en herir a alguien más débil y más frágil que él.

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