Capitulo 4:

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Mi temperatura iba subiendo cada vez mas y mi respiración cada vez era más fuerte y acelerada, la de el también era acelerada y chocaba contra mi piel haciendo que esta se erizara, junte sus labios con los míos besándolos dulcemente, para el esto seguramente solo seria sexo, porque yo para el solo era un juguete, un beso para el solo era un beso, puede que esto sonara cursi, pero para mí era algo más que un solo beso, o sexo, para mí era un sentimiento, lo que sentía hacia al, transmitírselo en un acto, pero eso solo eran gilipolleces mías.

El empezó a acariciarme la piel por debajo de mi camiseta, haciendo círculos imaginarios con sus dedos en mi vientre. De repente, como si le hubiesen quitado una idea estúpida de la cabeza o como si estuviera haciendo algo que no tenía que hacer, me quito bruscamente la camiseta, casi arrancándomela, el sin dejar hacerme nada se quito la suya, yo empezó a acariciar su abdomen definido y sus pectorales, el rápidamente me quito el sujetador sin vacilar y en un rápido movimiento me quito los pantalones dejándome tan solo con mis bragas, se separo un poco de mi para que pudiera observar mejor las vistas que el tenia, eso hacía que me incomodase, tenía los ojos clavados en mi cuerpo semidesnudo, yo me incline hacia él y volví a atrapar sus labios con los míos para que dejara de observarme, empecé a morder su labio inferior haciendo que el gimiera levemente, después empecé a morder suavemente su mandíbula y luego, baje a su cuello, dándole húmedos besos, el vio las intenciones que tenia y hizo que yo me pusiese encima suyo. Seguí besando su cuello hasta llegar a sus pectorales y bajando hasta su abdomen, roce su gran erección con mi vientre y eso hico que el gimiera de placer, quite los pantalones dejando al descubierto sus bóxers que cubrían un gran bulto. Empecé a acariciarlo rítmicamente hasta que susurro en mi oído.

-Creo que esa tela sobra ya preciosa. -Eso hizo que se erizara de nuevo mi piel.

Quite sus bóxers en un rápido movimiento con su ayuda lanzándolos a dios sabe donde. Tenía su erección a centímetros de mi cara y después de pensármelo unos segundos empecé a depositar besos en su parte intima, el gemía de placer mientras yo seguía depositando besos, nunca había hecho esto, era mi primera vez aunque no fuese virgen, esos pensamientos hicieron que unas horribles imágenes vinieran a mi cabeza.

Flashback

-¡No por favor no! ¡Suéltame, suéltame por favor!-Dije yo con mis lagrimas corriéndome por mis mejillas.

El me cogió bruscamente de las caderas dejándome contra la pared, sin defensa alguna, me quito los pantalones junto con mis bragas dejando a mi feminidad al descubierto, sin ningún obstáculo para él. Me arranco un par de botones de la blusa y la desgarró completamente, eso me dolió y mucho, empezó a sobar mis pechos con sus sucias manos.

-¡No me agás nada, no me toques!- Gritaba yo desconsolada y sin poder remediarlo.

El se desabrocho el cinturón de su pantalón quitándoselo. -¡Cállate zorra!-Me grito el pegándome con la correa en la cara, yo llore aun mas.

-¡Te he dicho que te calles puta!-Las palabras de ese completo desconocido que ahora mismo me estaba violando en los baños de mi instituto me hacían daño, pero más daño me hacían sus actos.

Yo le empuje en un intento fallido de huida, el tenia mas fuerzas que yo. Eso hico que se enfadara mas y me volvió a pegar poniendo mi cara contra la pared.

-¡No me violes, suéltame, suéltame!

-¿Que no te viole?-En eso momento metió de una sola embestida su pene entero por mi vagina.

-¡Hijo de puta!-Llore sin consuelo mientras el seguía follándome, yo era virgen y el daño que me estaba haciendo era indescriptible. Lloraba, lloraba y gritaba, pidiendo ayuda.

Fin del flashback

En ese momento Louis se puso encima mío otra vez, ya no podía aguantar más y se dispuso a quitarme las bragas.

-¡Louis no, para!-Le grite yo acordándome de esas imágenes horribles para mí. Me despegue de su cuerpo y me solté de su agarre corriendo hasta la habitación de invitados de la planta de abajo, corrí hasta que llegue y cerré la puerta con llave, me tumbe en la cama llorando hasta que caí en un profundo sueño.

¿Quién es tu debilidad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora