¿Por que a mi?

¿Qué pasa si le das alcohol a Carolina? No quieres saberlo.

-Vamos Niall, la pasarás bien-le decía Diego mientras le entregaba unos walkies-talkies a él, Manuel y Matías.

-Lo sé es que tengo miedo de que no haya suficiente comida…

Julieta rodo sus ojos.

-¿Puedes dejar de pensar en eso? ¡Solo son dos personas! ¡Que tenga que cocinar para un ejército para ti no significa que el resto sea igual!

Niall suspiro y la abraza para tranquilizarla.

-Lo siento, amor

Julieta asintió y sacudió la mano restándole importancia.

-¿Dónde está Lily?-pregunto Diego mirando para todos lados. Pero solo veía mucha gente por todas partes y las pocas luces no ayudaban en nada.

Lily era la extraña y loca prima de Diego y Julieta.

-No lo sé…¡Se suponía que la vigilaras!-lo regaño Julieta.

-¿No tenías que hacerlo vos?

-¿Es para tanto?-intervino Manuel.

-Ella suelta puede ser un peligro para la humanidad-le contesto Juli.

La seriedad de Diego había dicho que era cierto.

-Creo que todo está bien solo falta…¡Ah hablando del rey de roma!-ironizó Matías al ver a Agustín que entraba en la casa arrastrando a Carolina.

-Ya suelta-se quejo la rulosa intentando soltarse.

Había echo todo lo posible para demorar todo lo que podía. AL final había logrado su objetivo: Agustín con un humor de perros.

Él diviso a sus amigos en la otra punta… (era difícil no ver a Niall arriba de la mesa gritándole para que valla con ellos y a Diego intentado bajarlo mientras lo amenazaba con un palo de escoba)

-Bien. Nos vemos cuando termine. Si necesitas algo solo llama…-pareció pensarlo por unos segundos- ah y ni se te ocurra hablarle a algún chico y tampoco bebas lo que te den y ignora a los que te hablan.

Caro lo observo incrédula.

¿Desde cuando el alient se había vuelto tan responsable?

-¿Me cuidas?-se burlo ella

Esperaba alguna broma o ironía…sin duda no la respuesta que le dio:

-Claro que sí.

Intento decir algo pero… él ya había desaparecido.

-¡Hola Caro!-la voz de Lucia la sorprendió.

-Hola-la saludo está feliz de no estar sola.- ¿Y Meli, Agus y Matías?

-Matías fue con sus amigos y Agus y Meli al baño…¿Dónde estabas? ¡Te llamamos en la tarde! Pense que no vendrías.

-Es una historia larga.

Suspiro y se alejo hasta que se encontró algo sumamente extraño: una chica de cabello castaño largo y ojos grandes y extrañamente brillantes estaba entreteniéndose desarmando las luces del techo y dejándolas caer.

-Y terminamos con una…y empezamos con la otra… la luz verde es mala y la roja no me agrada, la amarilla engaño a la azul y la rosa…-estaba cantando a todo pulmón.

Luego de unos minutos pareció notar que la miraban y se dio media vuelta para encontrarse con las miradas de Carolina y Lucia.

Por un momento pensaron que se enojaría.

Pero hizo todo lo contrario. Se bajo de la silla que había utilizado para alcanzar el techo y le dedico una sonrisa tan simpatíca que Caro se asusto. Las tres se presentaron.