¿Por que a mi?

Guerra de agua parte 2

El celular de Melina vibro, pero antes de poder atenderlo Matías se lo arrebato de las manos.

-Hola, usted está intentando comunicarse con Melina. -decía como si fuera una contestadora- Si usted es mujer-amiga de ella marque a, si usted es algún familiar marque b, y si es hombre hágame el favor de pulsar c y no volver a llamar nunca más en su vida porque juro que si lo hace lo golpeare hasta dejarlo en terapia inten…

-Cállate, Matías-gruño Agustina del otro lado del teléfono- Dame con ella.

-¡Qué carácter!-se burlo el castaño antes de que Meli recuperara su celular.

-Hola Agus

-Hola-contesto ella más calmada- ¿Soy yo o tu novio es un poco…?

-¿Posesivo? ¿Controlador? ¿Celoso?-pregunto ella divertida. Matías le saco la lengua- Sí. Lo es.

-No me extraña que se lleven tan bien-ironizó Agus.

-No te digo nada porque tenes razón-admitió la castaña riendo.

Agus rodo los ojos

-Bien, quería preguntarles a vos y Lucia si les gustaría venir a la fiesta de Diego esta noche-le dijo.

-¿Diego hace una fiesta?-pregunto y luego asintió- Sí no hay problema.

-Bueno nos vemos. Es a las diez-le aviso antes de cortar.

-¡Viva una fiesta!-celebro Matías moviendo los brazos.

-¿Quién dijo que venías?-lo interrumpió Lucia.

-Creo que es más que obvio que a donde va mi novia voy yo-explico él poniendo los ojos en blanco.

-¡Ya tenía que colarse!-río la dulce chica de ojos claros.

-Lucia, me ofende tu comentario-replico él haciendo una expresión como si le doliera de verdad.

Ella le arrojo una de las almohadas de nuevo.

-¡Hey para con la agresión!-dijo esquivándolo.

Una sonrisa triunfal se dibujo en su rostro.

-¡Meli! ¿Por qué no le preguntas a Agustina si va a ir Manuel  a la fiesta…?

La rubia se puso roja.

-Ya termínenla -los corto Melina suspirando al ver que Lucia volvía a tener otro proyectil (almohada) en la mano- me siento la única adulta aquí.

-Vieja-bromeo Matías.

Melina lo miro mal y él se acerco para abrazarla y robarle otro beso.

-Oh no empienzen de nuevo por favor-les rogo Lucia observándolos.

Ambos rieron.

-¿A qué hora es la fiesta?-pregunto Matías mirando a la castaña entre sus brazos.

-A las diez.

-Perfecto. Tengo tiempo para dormir un rato

Camino hacia la pieza de Melina para luego caer abrazado a ella.

-¡Ven Lucia! ¡Únete!

-¿Sabes? Eso no sonó muy bien…-susurro Meli logrando que él riera.

-¿Es que no piensas en otra cosa que no sea dormir?-le pregunto Lucia desde el marco de la puerta, divertida.

-Sí en comer-contesto con los ojos cerrados.

-Buen punto-y acto seguido se arrojo junto a ellos para caer profundamente dormida.