-Clark, hemos llegado.-
Escuchaba a lo lejos una voz que me llamaba, pero el lugar donde me encontraba dormida estaba demasiado cómodo como para dejarlo, lo que me llevó a no reconocer donde estaba en primera instancia.
-Mamá, unos 5 minutos más por favor.- dije al mismo tiempo que hacía un puchero.
Su risa resonó en mi cabeza.- Si lo que deseas es dormir más, por mi no hay problema, pero me harás no querer liberarte jamás.-
Fue ahí cuando reaccioné, me había dormido en el automóvil de Graham, darme cuenta de este hecho hizo que me sobresaltara en el asiento, y al momento de abrir mis ojos vi un par de pupilas grises mirando con diversión y preocupación hacia mi dirección.
-Entonces..¿qué dices? ¿te quedas conmigo?- el seguía hablando, con una mirada pícara.
No sabía que contestar me había tomado por sorpresa y dije lo primero que se me ocurrió.
-Mm, ¿no gracias?.- En vez de salir como afirmación salió como pregunta.
Siguió riendo.-¿Entonces no estás segura? Dijo acercándose a mí peligrosamente entonces cerré los ojos y dije.- No gracias.-
Se detuvo y cuando abrí los ojos vi que su cara se entristecia un poco mientras veía en dirección a mi casa.
-Está bien, pero...-dudo un segundo.-¿Y si no quiero dejarte ir?.-me veía con una mirada suplicante.
Su comentario hizo que me quedara sin palabras, sólo sentí que mi cara se enrojecia cada vez más como si de un tomate se tratase.
- Clark, en verdad no tienes remedio, estoy bromeando.-dijo como quien no quiere la cosa y volteó su cara, a lo que yo en respuesta reaccioné y tomé su cara entre mis manos lo volteé hacia mi, era el momento de preguntarle.
El abrió mucho sus ojos al ver como había yo reaccionado.
-No es que me moleste pero ¿Qué estás..?
No le dejé terminar la frase.
-Respondeme algo Graham, no me gusta andar con rodeos y si estoy muy intrigada por saber ¿Hay algo de verdad en tus palabras?.-
Lo vi con mirada expectante, estaba segura que él me atraía pero no podía seguir avanzando si no tenía claro como se sentía el respecto a mi.
-¿En serio no lo sabes?.- preguntó incrédulo.
-Pues por algo te estoy preguntando.-ya me estaba molestando claro que le preguntaba porque no sabía, necesitaba estar segura para no cometer los mismos errores que en el pasado, para preparar mi corazón, tal ves solo me estaba haciendo cuentos en mi cabeza.
Acunó con cariño sus manos a las mías que seguían en sus mejillas y casi con un susurro que si no hubiese estado tan cerca tal ves no lo escucharía.
-Todo es verdad Clark, si estuviera en mis manos y si tú quisieras en este momento no desearía que entraras a casa aún sólo para poder estar un poco más de tiempo contigo.-sus ojos se veían tan brillantes como el cristal.-Ha pasado mucho tiempo desde que me sentí así por alguien.
Mi corazón palpitaba muy rápido mientras lo veía, así como a él, pasaba lo mismo conmigo.
-Entonces...no hay prisa por entrar, puedo esperar unos minutos más, contigo.- bajé la mirada apenada, sentí que mi cara estaba hirviendo.
Sentí una de sus manos levantando mi barbilla y me dió un pequeño escalofrío.
-Por favor no bajes la mirada, porque si lo haces no puedo apreciar esos hermosos y profundos ojos tuyos.-El decía esto cuando yo ya había caído perdida en sus ojos grises, mientras con su pulgar acariciaba mi labio inferior, y sin pensarlo demasiado y ya que tenía mis manos en su rostro lo acerqué a mí y deposité un suave beso en sus labios, quise alejarme un poco para poder ver qué expresión tenía, pero él me acercó nuevamente para besarme, con firmeza que poseía suavidad y correspondí ese beso sentí que mi corazón se saldría en cualquier momento.
Nos separamos y pude al fin verlo fijamente a los ojos sentí vergüenza porque seguramente yo estaba muy roja, pero al notar su rostro vi que estaba levemente sonrojado también, bajó la mirada, lo que me causó un poco de gracia.
-No te rías Clark, lo que pasa es que me tomaste por sorpresa, una buena sorpresa definitivamente.- río por bajo.- Entonces, sé que no debía ser el orden correcto pero, ¿Le harías el honor a este pobre individuo de ser su novia?
-¿Pobre individuo?.-reí.- si fuiste tú quien lideró el acto.- lo contemplé por un momento para luego darle una sonrisa- Si Sr Graham estaría encantada, pero primero tendrás que decírselo a mis padres aprovechando que ya estás acá, lo hacemos un poco a la antigua espero no te den demasiado temor.
Parecía asustado tal ves no recordaba que estábamos frente a mi casa, lo que me parecía raro era que ninguno de mis padres había salido a recibirme si ya llevaba 15 minutos aproximadamente afuera, él recobró la compostura y sonrió de esa manera que quita el aliento.
-Para nada.- me extendió su mano.- mi lady ¿Vamos?
-Vamos- se bajó y fue a abrirme la puerta del copiloto y emprendimos nuestro camino hacia mi casa.
Tenía miedo que papá se pusiera en modo "cuidar a mi niña" pero en verdad quería que las cosas salieran bien, me sentía optimista.
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Mi Bella Excepción
Teen FictionElla, la chica nueva del instituto, inteligente y muy directa. Él, el desinteresado chico más popular de la clase quien no estaba acostumbrado a que alguien no se interesara en él, hasta que la conoció. Hará todo para enamorarla, pero...¿Qué secreto...