¡Obsesión! (Sterek) [CORRIGIENDO]

Capítulo 6

Pov. Stiles.

El partido y los entrenamientos habían acabado por esos días. Todos estábamos nuevamente en casa, resguardados entre las paredes de nuestros hogares y la cruel facultad. Solo veía a los demás estudiantes ir y venir, con una infinita paz en su día. Mientras que yo, me hundía en miles de recuerdo y pensamientos. No entendía el porqué de todo esto.
Derek se atrevió a venir a mi casa, hasta conoció a mi padre y para el colmo se llevaron bien. Es algo que aún no puedo asimilar, más cuando en aquel tiempo ellos se odiaban a muerte. Sí que es un mundo extraño este. Después de eso a estado mandando regalos, viene seguido con algún presente y mi padre es muy feliz porque tenga una persona así como conocido. Liam a estado dándome el apoyo necesario para que no enloquezca.

—Hey... Cariño regresa. -vuelvo la mirada a quien conduce a mi lado. Sus grandes ojos verdes observándome, sus sonrisa ladina, esos grandes brazos escapando de su camisa negra entre abierta, sus vaqueros azules y esa flamante imagen del interior del Camaro. Para muchos era un sueño, para mi un temor constante. —¿Qué ocurre? -el carro se detiene. Lo veo mirarme unos minutos y como siempre su mano busca un poco de contacto con mi ser. Pero, como me es costumbre evitó esos contactos. —Bien... -ya es costumbre escucharlo suspirar.

—¿Donde estamos yendo? -miro el gran bosque a mi alrededor. Tenía una idea de donde estábamos pero...

—A la mansión Hale. -si no fuera que estaba sentado seguro me estaría cayendo al suelo. ¿Estaba bromeando? —Espero que esto ayude a que entiendas que no es un juego todo lo que te digo. -no digo nada, simplemente las palabras no salen. Estaba dudando de quién era este Derek. Y pensar en que podría ver a su familia no me ayudaba mucho, siempre les tuve un terror más grande. Son personas con una imagen intachable y una brecha en generaciones sobresalientes. Lo último que recordaba de ellos fue ver cómo expulsaban a su único hijo del ceno familiar, solo por estar con un simple chico dejado a su suerte. Eso lo había destrozado mucho, aunque salió adelante económicamente, el no volvió a ser el mismo. 

No quería volver a experimentar aquellos horribles días. Las hojas de los arboles siendo movidos con violencia por el viento no me tranquilizaba. Estaba realmente nervioso, mucho más si tenia que cruzarme con aquella mujer. Thalia Hale no era alguien que mantenía su boca cerrada y no dejaba que nadie se sintiera a gusto con su presencia, se sentia esa sensación de ser observado, de ser examinado desde que exhalas e inalas, el peor momento de cualquier persona. No quería pasar por eso nuevamente, tampoco ser culpable de que su vida se vuelva desafortunada como en aquel tiempo.  

—Pienso que no es buena idea. -soy sincero, no me callaré ante esto. —No creo que alguien como tu familia le parezca correcto que quieras atar a un chico cualquiera a tu vida. ¿O si? -suspiro consternado. 

—Eso no puedes saberlo. Deberías dejar de ser tan aguafiestas. Es mejor que dejes esa poca fe en todo o te hará mal para el futuro. -su tosco y poco tacto me dejo en claro que lo habia hecho enojar. 

—No soy aguafiestas, sino que soy simplemente realista. La vida y las personas son crueles, no siempre es todo color de rosas. Y sabes muy bien que no he aceptado salir estos días contigo por mi propia voluntad, e aceptado solo porque me has obligado. -el fuerte rechinar de las ruedas en el asfalto hacen eco por todo el extenso bosque. 

—¿Cómo puedes estar tan seguro de todo esto? ¿No me conoces realmente? Quien dibujaba y expresaba todo esos sentimientos hacia mi, donde a quedado ese chico. ¡Responde! -suelta su cinturón y sale del carro. Lo observo recostarse sobre la parte tracera del carro, lo vi sacar un cigarrillo. No sabia que fumaba. Eso era algo nuevo. 

—Porque tiene que pasarme todo esto. -me saco el cinturón y voy tras él, lo veo fumar y fruncir el ceño. —No sabia que fumabas. -no me mira, observa el camino tras nosotros. —Derek, te lo he estado dejando muy en claro estos últimos días. No entiendo porque te sorprendes. Los bocetos que tanto te encantaron ya no existen, solo fue una ilusión de un adolescente ya pasó. Somos grandes para esto, no estoy interesando en tener ninguna relación y mucho menos que me obliguen a estar con alguien. Si en verdad te gustó déjame decidir. -suelto, mi corazón duele y el alma llora por todo esto. Lo veo fumar, ninguna otra reacción se hace presente.