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Dustin y Lucas ya se habian ido a su casa, mientras que El yacía dormida en esa especie de cama que Mike le habia hecho.

-¿Por qué tu hablas más que ella?- me preguntó Mike refiriendose a El.

-En donde nos tenían no nos dejaban hablar mucho, además de que tampoco nos hablaban, y bueno, yo soy telepata, así que aprendí todo mi vocabulario leyendo la mente de los guardias o de quien fuera.- expliqué y me miró asombrado.

-¿Qué es lo que pueden hacer?- preguntó intrigado.

-Bueno, sé que El tiene telekinesis, pero yo creo que tambien tiene tecnopatía, aunque no tan desarrollada.

-¿Tecnopatía?- preguntó Mike.

-Es la capacidad de controlar la tecnología- dije y asintió, demostrando que entendió-. Y bueno, mis poderes son telepatía, como ya dije, y tambien manipulación molecular.

-¿manipulación molecular? ¿y qué hay de la teletransportación?- dijo sin entender.

-La manipulación molecular es usar las moleculas a mi anotojo, por eso puedo teletransportarme, es hacer que las moleculas sean dirigidas hacia otro lugar, aunque tambien podría hacer que las particulas de algo se movieran a una velocidad enorme para así quemarlas, lo mismo pero al revez pasaría para congelarlas- expliqué y sonreí-. Sobre lo que dije antes, de no confiar en tí y pensar que eras malo, lo siento.- dije avergonzada.

-Está bien, lo entiendo.

-No, es que sólo... quiero proteger a mi hermana, es todo lo que tengo, ya ha sufrido mucho...- dije apenada.

-Espera, ¿El es tu hermana?- preguntó.

-Bueno, ella no lo sabe, pero sí, lo vi en los recuerdos de un hombre, el que nos atrapó en primer lugar. Por favor no se lo digas, quiero decirle, pero no sé cómo, es una gran noticia.- dije nerviosa y enojada conmigo misma por haberlo dicho.

-Debí haberlo adivinado, Eleven y Twelve.- dijo y reímos por lo bajo.

-Gracias Mike, eres un gran amigo, me alegro de que El tenga a alguien como tú- dije agradecida.

-De nada, gracias a ustedes tambien, gracias a ustedes podremos hallar a Will- dijo feliz-. Bueno, se hace tarde, buenas noches, Vee.

-Buenas noches.- dije y me recosté en el sillón que había ahí.

Abrí los ojos de repente, miré a mi alrededor y me dí cuenta de que otra vez estoy en el otro lado.

-¡Will!- llamé al antes mencionado-¡Will- volví a llamar, espero que el Demogorgon no lo haya encontrado.

Corrí a buscarlo, tenía que saber que estaba bien, corrí por un par de minutos hasta parar a una casa, entré para ver si es que se encontraba ahí, y efectivamente, ahí estaba.

-Will, ¿estás bien?- pregunté preocupada al verlo en una esquina del piso, temblando en posición fetal.

-Sobreviviste- dijo asombrado.

-Te prometí que lo haría- dije riendo por lo bajo.

-No me dijiste tu nombre- dijo levantandose.

-Bueno, soy Twelve, puedes decirme Vee.

-Veo que tienes ropa nueva- dijo mirandome, y era cierto, Mike me había prestado ropa porque segun los chicos era muy raro e incómodo que estuviera con esa ropa de hospital. Traía un hoodie azul y un buzo negro- ¿cómo te cambiaste en este lugar? O mejor dicho, ¿cómo conseguiste ropa?

-No sé cómo pero... yo puedo entrar y salir de aquí involuntariamente...- dije sin saber cómo explicarlo.

-¿Qué? Entonces... ¿hay una salida?- preguntó.

-¡no lo sé! Sólo sé que lo hice cuando estaba con el Demogorgon, y que entro aquí cada vez que duermo. Pero te prometo que te voy a sacar de aquí, este lugar es un infierno.

-Gracias- dijo feliz-, realmente lo aprecio- dijo quitando su sonrisa-, pero no sé si algún día saldré- dijo apenado y lo miré compasiva.

-No seas pesimista, sé que saldrás, yo te ayudaré.- dije intentando animarlo.

-¿Lo prometes?

-Lo prometo- dije sonriente. De repente escuché un ruido, eran como pisadas-. El Demogorgon.- avisé alarmada y segundos despues, el anterior mencionado derribó una pared.

Miré a Will asustada y miré al Demogorgon, instintivamente levanté mi brazo e hice quealgunas de las celulas del Demogorgon se movieran rapidamente, provocando fuego, al mismo tiempo hice que vibraran para así congelar parte de su cuerpo. Will me miró asustado, yo ignoré eso y tomé su brazo, dispuesta para huir.

Me teletransporté junto a él, seguido de caer por el cansancio, sentí un fluido tibio debajo de mi nariz, caía en grandes cantidades y yo apenas podía levantarme.

-¿C-cómo hiciste eso?- preguntó nervioso y asombrado, lo miré entristecida, no sabía si iba a querer hablarme despues de esto, Will de verdad me agradaba, y no quería que me odiara por mis poderes.

-Lo siento, debí decirtelo- dije apenada.

-¡Es asombroso!- dijo feliz y lo miré confundida.

-¿No... me odias?- pregunté.

-¿Qué? Claro que no. ¡Eso estuvo fabuloso!- dijo y sonreí, por estas cosas me agrada este chico.

-El Demogorgon no debe estar lejos, corre mientras lo distraigo.- dije.

-¿Qué? No. No te voy a abandonar, te ves muy cansada- dijo preocupado y sentí un leve calor en mis mejillas, no le tomé importancia debido a que seguramente era por el esfuerzo y mi corazón se había acelerado por eso. Sí, seguro que es eso.

La hermana de Eleven (Will y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora