Después de veinte años del asesinato de Alf. Gabriel y Liam serán unidos por una propuesta de estudios que consiste en enseñarse mutuamente.
Su unión no solo traerá amor y sonrisas.
Después de encontrar el Diario de Alf los dos muchachos emprenderán...
Lamento si hay muchas faltas ortográficas pero la pizza me llama :v xD
PD.Saludos para el grupo de ATDT XD
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Los dos muchachos se quedaron jugando dos horas en la consola de videojuegos como dos niños después de salir de la escuela. Para ser sinceros Liam termino rompiéndole el culo a Gabriel en términos de videojuegos. Eran las cinco de la tarde y los dos no habían comido ni un bocado de comida, sus barrigas comenzaron a gruñir en señal del hambre.
―¿Tienes algo de comida? ―pregunto Gabriel dejando el mando de videojuegos al lado suyo.
Liam pauso el juego y asintió en respuesta, le dio una señal de que lo siguiera y bajaron al primer piso de la casa. La sala estaba llena con la voz de Peppa Pig , Beatriz estaba viendo su dibujo favorito cuando su hermano le pidió que bajase el volumen a la tele. La niña sonrojo sus mejillas en forma de protesta y el la ignoro. Gabriel y Liam entraron a la cocina se pusieron a rebuscar en la cocina haber que encontraban de comer, pero lo único que alcanzaron a encontrar fue una parte de la pizza que Beatriz y el castaño no terminaron de comer el día anterior.
― ¿Te gusta la pisa?—pregunto Liam.
― ¿Gustarme?—carcajeo―Amo la pizza.
Pusieron dos rodajas de la pizza Americana en cada plato y se lo llevaron a la mesa. Se sentaron en las sillas de madera y comenzaron a devorar a mordidas las rebanadas de pizza. Liam se puso de pie para traer algo de beber a la mesa. Una pequeña vibración en el bolsillo de Gabriel hiso que el sacara su móvil de sus pantalones. El mensaje provenía de su grupo de Básquet en WhatsApp diciendo que mañana en la tarde, de tres a siete, tendrían entrenamiento.
―Demonios―El rubio soltó el celular en la mesa.
―¿Qué paso?
―Mañana tengo entrenamiento―respondió bebiendo un poco de gaseosa.
―¿Y eso....ti
―Mañana tenía pensado en que me podías enseñar Química para el examen del viernes―comenzó a explicar―, y ahora no podre por lo del entrenamiento.
―Podemos estudiar hoy―dijo el castaño.
―¿Enserio?
Liam asintió y el rubio sonrió. Terminaron de comer en quince minutos y luego subieron a la habitación para empezar a estudiar. El castaño comenzo a buscar su cuaderno de Quimica y algunos libros extras que pudieran ayudar, mientras Gabriel ordenaba el escritorio para tener un espacio donde estudiar.
―Antes que todo, antes que nada, tienes que responder un pregunta―dijo Liam y el rubio asintió moviendo un poco su dorada melena.
