en guardia. |namjin.jikook.yoonseok|

capítulo dieciséis

Lo gracioso de darte cuenta de que estás enamorado, Namjoon piensa, es que empiezas a ver a esa persona desde una perspectiva completamente diferente. Seokjin está sentado frente a él, hablando sobre la cena que Taehyung y él habían hecho, pero el oficial parece no poder registrar bien las palabras que salen de la boca del otro hombre. Los labios rosados y suaves de Seokjin se están moviendo alegremente, las esquinas levantándose de vez en cuando o simplemente abriéndose por completo para lanzar una carcajada cuando recuerda un evento gracioso en particular sobre la noche que pasó con el pequeño.

Hay tanta calidez en los ojos del hombre, Namjoon no está seguro de cómo no lo había notado hasta ahora. Hay un nivel de profundidad en ellos que provienen de haber vivido más que una simple vida. Seokjin ha pasado por dolor emocional. El hombre había soportado rechazos, fracasos y negativas, y todo eso se pueden notar a simple vista una vez que realmente te detienes a verlos. Aún así, los vestigios de lo que probablemente había hecho al hombre llorar es lo que hace que Namjoon crea que Seokjin puede entender su dolor y culpa también. 

Seokjin ahora está hablando sobre cómo Taehyung luchó para poder quedarse despierto y así ver a su papá llegar pero no pudo, especialmente porque Seokjin había llevado a Taehyung a un pequeño paseo al parque para jugar. Los ojos de Seokjin forman dos medias lunas mientras ríe recordando cómo Taehyung se las había arreglado para espantar a unas niñas con su imitación de un dinosaurio, y mientras que se da cuenta del gran afecto que tiene el hombre por su hijo, Namjoon sabe que definitivamente no hay duda alguna de los sentimientos que tiene por el hombre. 

Amor.

Qué extraño sentimiento, él piensa.

"Perdón por todo eso," Seokjin dice una vez logra calmar su risa. "Creo que hablé mucho. ¿Qué hay sobre ti? ¿Qué tal estuvo la cita?" el profesor pregunta, jugando con el vaso vacío en su mano.

"Estuvo..." Namjoon empieza a decir pero se detiene. Había accedido a ir a las citas más por compromiso que por interés, sabiendo que no debía ser grosero y huir solo porque había sido un estúpido ciego todo este tiempo. Va a tener que disculparse propiamente con ella eventualmente, pero no ahora. No ahora cuando Seokjin está sentado frente a él viéndolo con esos hermosos ojos, haciendo muy poco esfuerzo por ocultar el evidente sentimiento de preocupación.

"Oh...¿pasó algo?" Seokjin dice con cuidado, mordiendo su labio inferior. Namjoon niega con la cabeza lentamente, tratando de encontrar las palabras correctas. 

"Creo...creo que podrías decir eso," el oficial empieza a decir cuidadosamente, desviando la mirada para así no tener que enfrentar la mirada del otro hombre, en lugar de eso, se concentra en su vaso con agua. "No creo que vaya a funcionar."

"¿...En serio? Es una pena... Creí que ustedes se llevaría muy bien," Seokjin comenta, rascando su barbilla con el dedo índice. "Bueno, pero sí conozco a alguien más con quien podrías-"

"No, está bien. Es decir, estoy bien por ahora. Pero, muchas gracias," Namjoon le interrumpe y Seokjin parece verdaderamente sorprendido por ello. El hombre abre la boca para tal vez tratar de convencer al policía de lo contrario pero decide no hacerlo y se conforma con asentir.

"Tu decisión. Pero, si cambias de parecer, siéntete libre de decírmelo."

"¿Qué hay sobre ti? ¿Estás saliendo con alguien...?" Namjoon pregunta cuidadosamente. Él de repente se siente muy nervioso y se da cuenta de lo rápido que su corazón está palpitando mientras que observa a Seokjin alzar ambas cejas. Por favor dí que no, Namjoon ruega en su cabeza. De repente siente que no puede más, no necesita saber que ni siquiera tendrá oportunidad de intentarlo con él.