ESCUELA DE ASESINOS (Traducción) | ChanBaek

Parte 21.

Park se envolvía con fuerza entre las cobijas, tratando de quedarse dormido. Sehun no apareció.

Por primera vez en meses, Chanyeol volvió a sentirse solo. No se había puesto a pensar en eso. Siempre estaba algo ocupado, y después de la llegada de Baekhyun, su vida en general se convirtió en un juego de palabras continuo. Cada día y cada sorpresa le hacían hervir la sangre, pero luego Byun desapareció y Sehun ocupó su lugar. No evitó que su vida fuera distinta, pero por lo menos aún había alguien con él en la habitación.

Anteriormente había vivido solo y fue increíblemente feliz, pero ahora algo había cambiado. Ya no podía dormir pacíficamente, no podía permanecer durante demasiado tiempo dentro de esas cuatro paredes. Incluso sus libros y enciclopedias favoritos se habían vuelto aburridos.

El cuerpo necesitaba un impulso, una sacudida. Pero el tipo no sabía de otro remedio aparte de las misiones o la dosis de droga.

Chanyeol fijó su mirada en el techo y frunció el ceño. ¿Cuánto tiempo había pasado desde la última dosis de NZ? No tanto como para olvidarse de la droga, pero aún así su ansiedad por ella se había dispersado un poco. Se le ocurrió que quizá consumiéndola podía terminar de hacer lo que le faltaba, pero Chanyeol cerró los ojos y se envolvió aún más en la manta, alejando sus pensamientos.

Ya habría tiempo, no ahora.

***

Por la mañana, se despertó con un intenso dolor de cabeza. Todo su cuerpo estaba entumecido, y su pierna derecha ligeramente acalambrada. En su mente, los fragmentos de sueño seguían girando con la participación de sus padres, la escuela y algunos conocidos, que fueron gradualmente borrados de su memoria. Todo se convirtió en un lío incomprensible.

Con el ceño fruncido, frotando sus somnolientos ojos, pasó lentamente al baño y dejando un camino de prendas, desenroscó el grifo del agua fría y se puso bajo el chorro. El agua drenó sobre su cuerpo, llevándose consigo todos los pensamientos y dejando un vacío en su cabeza.

Ya volviendo en sí, Chanyeol salió de la ducha, se secó rápidamente con una toalla limpia mientras salía del baño. Se puso el uniforme y fue hacia su escritorio, tomando la mochila con las cosas correctas para estudiar.

Mirando la cama de su compañero, frunció el ceño. Ahora Sehun tambien se había ido, ¿tal vez Park estaba maldito? Era la única explicación del por qué todos con quienes se comunicaba, desaparecían por un largo tiempo. O quizá tenía un horrible carácter y por eso nadie quería hacerle compañía. No, la última opción no quedaba.

Baekhyun se había ido por una razón seria, y Sehun ...claramente no era el mismo caso que con Baekhyun o Jongdae. Lo ayudó ayer e hizo algo por lo cual ahora estaba ausente. Era necesario adivinar a dónde había sido enviado, si es que lo atraparon.

Cerró de un portazo mientras salía de la habitación.

Llegó a su lugar preferido y se metió la mano en el bolsillo para coger un paquete de cigarrillos. Chanyeol vio a la figura familiar acercarse.

–Hola, cariño. —Jongdae le sonrió amigablemente— ¿Me extrañaste?

–Insanamente. —respondió Park, y por primera vez lo dijo sin sarcasmo— Realmente te extrañé, dime, ¿dónde estabas?

–Te lo diré, pero primero vayamos a almorzar. Estoy tan hambriento que podría comerme cualquier cosa. —se quejó el más joven, saltando con impaciencia en el lugar.

Estaba claro que el chico estaba de buen humor, y el mismo Chanyeol podía sentirse más cálido en su corazón. Jongdae siempre podía hacer sonreír a cualquiera.