CAPÍTULO 13: SECRETOS Y MENTIRAS

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N/A: Muchas gracias a todos por leer y comentar... Siento no haber actualizado la semana pasada. Estuve con gripe y he estado fuera unos días...

CAPÍTULO 13: SECRETOS Y MENTIRAS

A Cooper le extrañó que llamaran al timbre. Después de mucho trabajo y de varios viajes a Nueva York para encontrar un apartamento para él, por fin había podido mudarse. Pocas personas sabían dónde vivía y sabía que su hermano estaba en una reunión con el amigo que había comprado el teatro.

Mientras iba a abrir, pensó que podría ser Sam. Tal vez quería hablar con él en persona sobre algo... Notaba a su hermano tan enamorado y se conocían desde hacía tanto tiempo que no le sorprendería si el rubio le mostraba un anillo y le consultaba la mejor manera de proponerle matrimonio.

Sin embargo, se sorprendió al ver a Rachel ahí. No había hablado mucho con ella y, aparte de ser amiga de su hermano y de su ex, no sabía mucho de ella.

–Hola... ¿Puedo pasar? –Ella preguntó algo cohibida.

–Claro... –El mayor se apartó para que pasara y los dos se sentaron en el sofá. – ¿En qué puedo ayudarte?

–Necesito tu ayuda. Pero antes tengo que contarte algo... Tu hermano no es realmente pareja de Sam. –Ella explicó.

–¿Qué? ¡Claro que lo son! Los dos me lo dijeron en una videollamada...

–Están fingiendo. Sam quiere ser padre y quiere adoptar... La única manera de que pueda hacerlo es si se casa... Como van a investigar sus vidas, temían que alguien los descubriera, por lo que han planeado fingir una relación, casarse y luego adoptar. Sin embargo, tu hermano está muy enamorado y lo está pasando muy mal... No es sólo que tengan que besarse y mostrarse cariñosos cuando los demás estamos cerca, también lo hacen cuando están a solas y se han acostado juntos varias veces. Creo que Sam también le corresponde, pero ambos temen decirle al otro lo que sienten porque valoran su amistad. Le he intentado decir a tu hermano que se sincere, pero no me quiere escuchar. Necesito ayuda. –Rachel habló. Estaba tan nerviosa que estaba hablando a toda prisa, pero, por suerte, Cooper comprendió todo.

–¿Tienes algún plan? –Él quiso saber.

–Blaine nunca hará un movimiento porque está convencido de que Sam es heterosexual, por lo que tendríamos que convencer a Sam... Pero él y yo no somos tan amigos y no he conseguido ni que se sincere completamente. No sé cómo hacer que todo salga a la luz. –Ella suspiró frustrada.

–¿Tienes algún plan? –El mayor quiso saber.

–No, pero entre los dos algo pensaremos...

–Hola. –Sam entró en su apartamento y sonrió al ver a Blaine sentado con su cuaderno delante, escribiendo. –¿No sería más fácil que escribieras en el ordenador? Quiero decir, podrías borrar, corregir, cambiar, ordenar todo sin problemas.

–Lo sé, pero sólo escribo ideas y pequeñas escenas que se me van ocurriendo. Cuando tengo algo más o menos claro, es cuando lo escribo al ordenador. Es más fácil para mí sacar el papel y boli que buscar el ordenador y esperar a que encienda. La inspiración viene cuando menos la esperas. –El moreno explicó.

–He ido a una joyería. –El rubio le mostró la bolsa.

–¿Para qué? –El actor dejó su cuaderno y se levantó para ver la bolsa.

–Tendremos que comprometernos antes de casarnos, ¿no? Necesitarás llevar anillo y todo eso... Además, querría que empecemos a planear la boda cuanto antes. –El dibujante comentó.

–Tienes razón... –Anderson sintió un nudo en el estómago. Siempre se imaginó una propuesta de matrimonio romántica, pero nada similar a eso.

–¡Pruébate el anillo! A ver si necesitamos ajustarlo. –Evans intentó controlarse. Le habría gustado hacerlo de otra manera, pero no quería mostrar lo que sentía por miedo a perder a su mejor amigo si no era correspondido. A pesar de todo, sintió unas mariposas en su estómago cuando el otro colocó el anillo en el lugar que correspondía.

–Está perfecto. –Blaine susurró. –Es muy bonito. Gracias.

–A partir de ahora, eres mi prometido.

Decidieron que, a pesar de que no habían tenido una pedida romántica, sí tenían que hacer algo para darles la noticia a sus amigos. Sabían que debía parecer una celebración, por lo que reservaron un restaurante algo más elegante de lo habitual.

Blaine llevaba puesto el anillo, aunque le pesaba más que ese fino aro de oro. Sabía que estaba llegando a un punto sin retorno, que en cuestión de pocos meses estaría caminando hacia el altar, donde el amor de su vida lo esperaría. Sin embargo, lo que debería ser motivo de alegría, a él le destrozaba el corazón.

No era una boda por amor, era para poder encontrar un bebé al que cuidar y amar durante el resto de sus vidas, un bebé que en algún momento tendría tres padres y una madre... O al menos, eso era lo que esperaba.

A pesar de todo, le estaba costando mucho más de lo que pensaban. Su amistad estaba en peligro y el moreno empezaba a pensar que acabarían distanciándose definitivamente.

Aun así, sonreía de manera amplia mientras sus amigos llegaban para la cena. Al final, sabía que debía aparentar que era el momento más feliz de su vida.

–¡Nos casamos! –Sam gritó emocionado cuando todos estuvieron sentados. A partir de ahí, todos se mostraron felices mientras los abrazaban. Las chicas pidieron ver el anillo y estuvieron un rato preguntando en los planes de boda.

–Todavía no hemos hablado... –Blaine dijo con las mejillas sonrojadas. –Supongo que será algo sencillo...

–Protestaría porque quiero una gran boda, pero no seríais vosotros si os casáis de otra manera. –Santana reconoció.

Después de un rato, el moreno se disculpó para ir al baño y Rachel dijo que lo acompañaba.

–¿Sabes que no podéis ir al mismo? –La latina miró a su antigua compañera de apartamento de manera extraña.

–Eres muy graciosa. –Berry se burló mientras arrastraba a su amigo hacia un lugar en el que pudieran hablar en privado. Estaban tan concentrados que no sabían que les estaban siguiendo.

Cuando estuvieron lejos, Rachel comentó enfadada. –Se supone que ibas a hablar con Sam para parar esta locura.

–No recuerdo haberte dicho que lo haría. –Blaine frunció el ceño.

–Una boda falsa no es lo que ahora necesitas...

–¿Una boda falsa? –Santana cuestionó sorprendida y luego miró al hombre. –Cuando he venido siguiéndoos, no sabía que iba a obtener una información tan jugosa... ¡Explícate!

–Sam quería adoptar un bebé y lo tendrá más fácil si está casado... –El moreno comenzó.

–¿Y aceptaste? ¿A pesar de estar enamorado de él? ¡Ahora entiendo todo! –La latina comenzó a recordar las frases que les habían dicho la pareja y lo que habían visto hasta que se dio cuenta de algo. –¿Habéis tenido sexo?

–Por favor Santana, no digas nada... Nuestro plan es casarnos, adoptar y divorciarnos... ¿Nos guardarás el secreto? –El actor pidió desesperado.

–Ni siquiera se lo diré a Britt, aunque sé que le romperá el corazón vuestro divorcio... –Lopez aceptó, sabía que tenía que hacer lo que su amigo le pidiera.

–Con todo aclarado... Voy al baño.

Anderson se fue y las chicas se quedaron a solas. Santana iba a volver a la mesa cuando Rachel la detuvo.

–Cooper y yo creemos que Sam y Blaine sienten algo y queremos hacer algo para juntarlos... Bueno, sé que Blaine está enamorado y sospecho que Sam también... No sabemos qué hacer. Sabemos que Blaine no dirá nada, que tiene que ser Sam, pero... ¿Cómo? –La más baja comentó.

–¿Tenéis dinero que estéis dispuestos a gastar? –La latina sonrió de manera maliciosa.

–Sí, Cooper tiene unos ahorros que me ha dicho que podríamos usar. –Berry admitió.

–No hay nada mejor que los celos para que Sammy reaccione...

Una Propuesta Diferente (Blam - Boyxboy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora