LOVELESS: Una chica sin amor

Parte 2: Golpes & noticias

Mi cabeza dolía y la luz que salía por aquella ventana incomodaba mis ojos aún cerrados. ¿Qué había pasado? Y ¿Porque me sentía tan débil? Sentí que todo giraba al rededor y no entendía que pasaba, hace un rato me había quedado dormida.

Lentamente fui abriendo mis ojos y mirando detalladamente mi alrededor estaba en la enfermería, una pequeña habitación blanca que apenas y contaba con cosas básicas para auxiliar a los estudiantes. Gire mi rostro y note que a mi lado estaba Emma.

—¿Cómo te sientes? —Pregunto tomando mi mano, note en su mirada la preocupación.

—Me siento bien, aunque algo adolorida y confundida ¿Que ha pasado? —Dije tocándome la
cabeza, notando que tenía una pequeña venda en ella, ¿En qué momento fui vendada?

—¿No lo recuerdas? —Negué lentamente con la cabeza, la cual sentía que explotaría en algún momento por el dolor.

—Solo recuerdo que quería admirar a los chicos, pero entonces me desmayé en medio de la cancha, luego me desperté y Mark me trato mal, me sentí mal y vine acá a dormir. No estaba así de adolorida no entiendo que paso.

—Ohh Dios mío Erika será que el golpe al caer afecto tu cerebro. —Emma empezó a revisarme la cabeza y yo la aparte, necesitaba contexto.

—Tú te desmayaste, pero no volviste a despertar hasta ahora. Lo que me contaron fue que te desmayaste. Mark alcanzo a agarrarte, pero el tropezó y tu terminaste encima suyo, golpeando así tu cabeza ya que él te termino tirando hacia un lado.

—Algunos chicos incluidos Mark y Nath trataron de trataron de traerte acá. Luego de tu desmayo, todo lo que paso fue tu imaginación linda, hasta ahora fuiste capaz de retomar tus sentidos.

No entendía nada, entonces las palabras hirientes de Mark las había imaginado, todo había sido demasiado real para mí, en el momento que llore y vomite, todo estaba muy claro para solo ser parte de mi imaginación. Como un golpe puede perturbar tanto a mi pobre cabeza hasta el punto de crear escenarios ficticios.

—Eso explica todo, aunque ahora podre decir que estuve en algún momento de mi vida sobre Mark, no sé si desmayarme fue premio o castigo. —Dije sonriéndole a Emma, para tranquilizarla ya que la veía un poco ansiosa. Le di poca importancia al tema y decidí dejar de pensar en lo que imaginé con Mark y Nath.

En ese momento entro Jhovany, un chico de A1 primer año de secundaria y aunque era mayor que nosotras habíamos perdido un par de años y por eso hasta ahora estaba en el primer nivel, además para ganar puntos extra estaba en el club de salud conmigo y por ende debía ayudar a la gente que estaba en enfermería.

—Disculpe Erika ¿Ya se siente mejor? —Dijo copiando una información básica para el registro, no pude evitar echarle un vistazo a su perfil perfecto, tenía un lindo cabello despeinado color caoba y las lindas pecas que adornaban su rostro lo hacían ver tierno, pero verlo morderse el labio en donde sabía que había un piercing que escondía en clase lo hacía ver sexy y concentrado llenando el registro.

Había rumores que decían que pertenecía a una de las pandillas del sector, otros decían que era gay o bisexual solo que lo tapaba para no ser juzgado, nadie realmente sabia la verdad y yo solo pensaba en lo perfectamente hermoso que era.

—Si muchísimo mejor. —Dije en un tono amigable y sincero, no era necesario que ellos se preocuparan por mí, no valía la pena.

—Perfecto, podría desocupar la camilla, ahora tengo más gente enferma esperando su turno. —Me entrego mi ficha para poder mostrarla en clase y me indico la salida con la cabeza.

—Si claro, ya pensábamos salir.

—Cuídese mejor Erika y nos vemos mañana en el club de salud, necesito ayuda con unos informes.—Sin decir nada más se dio la vuelta y siguió en lo suyo.