cap#12 quiero encontrarte

4 0 0
                                    

Corría de un lado a otro, pero era inútil no los podía encontrar

-Frustrante y mucho es todo esto

Mis manos las volvía puños con sed de estrellarse en el rostro de Damian.

-Ese imbécil, lo odio... Lo odio... No quiero que toque a Amethyst, no quiero que la mire, no quiero que la toque, no quiero que respire tan siquiera..

Corrí de un lado a otro intentando encontrarlos, intentando llegar a ellos mi ira no podía controlarse y por primera vez desobedecería a madame Josephyn o.... Quizás no!.. Ella dijo, proteger a Amethyst bajo cualquier cosa y eso es lo que haré, le partiré la cara a ese idiota NADIE SE LLEVA A MI CHICA!..

Mi monólogo interno culminó con esa última oración causando en mi sorpresa.

-Mi... Chica?... Desde cuando Amethyst es tan influyente en mí?. Desde cuando... La considero mía, si ni siquiera ella parecer tomar enserio lo de anoche, ni siquiera sé su fue real. Oh~ demonios..

Dejo de caminar para llevar mi visión al pasto un poco desconcertado.

-Realmente, me gusto Amethyst?..

Mi corazón se detuvo por un momento, al fin mi cabeza iniciaba a aceptar lo que le insistía en negar a mi corazón.

-JA!... Donde la vieron?.. Yo Eithan Lyshjon castle byship, enamorado?.. Tsk!. Patrañas solo quiero a la mocosa para lograr mi libertad y librarme de la momia disecada de su tía y de una vez por todas acabar con este martidio de ser un maldito esclavo, te encontraré mocosa... Te encontraré a ti y al mugroso que te aleja de mi e interfiere en mis planes.

Al concentrarme, y respirar un poco vi la estatua de un ángel que se posaba en una de sus rodilla y la otra tocaba ligeramente su pecho con alas distendidas en todo su esplendor su mirada se dirigía al norte y su mirada se inclinaba en esa dirección como si de un enfrentamiento se tratase al mirarlo recordé los planos del laberinto, no podía perderme li recuerdo todo, al dirigirme al norte justo donde la estatua miraba encontré un ángel caído con ínfulas de grandeza como si incitara al ángel atacar sabiendo que sería derrotado, debo admitir que era una obra de arte las estatuas parecían contar una historia siguiendo el recorrido correcto, pero por ahora no estaba de humor como para admirar estatuas.

-Amethyst... Donde estas!?

Entre los arbustos aparece un perro que con solo una de sus patas casi me hace caer, un hermoso lobo siberiano de pelaje blanco como la nieve y su característicos ojos azules lo hacían ver hermoso se veía fuerte, seguro, imponente y rudo pero entre todo su lengua me dio un saludo paseándose por mi rostro.

--Heeey... Basta!..

Tomaba mi pantalón con su dientes y jugaba como si fuese su juguete.

--Oyeee, no... No!.. Bastaaa...

(..)

--Amethyst.... De verdad no me recuerdas?..

Tome por su hombros a la frágil chica, su sexys clavículas eran expuestas por ese delicado vestido, quien lo diseño fue un genio o quizás un total demonio, debo controlar las ganas de querer comermel....

--Sr. Damian, necesito la información, no estoy para perder el tiempo en recordarlo cuando de mis padres se trata.

Y así señores, de sacan de una sola pedrada de tus pensamientos morbosos.

-Sr?.. Por favor no me digas así, llamame Damian aunque prefiero que me vuelvas a llamar como cuando eramos niños.

-Vivir en el pasado no solucionará nada, no lo recuerdo y punto quizás cuando lo haga le haré saber, pero por ahora al punto, la información Damian.

            Realmente te conocí?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora