Rose

°Capítulo 1°

-¡No eres nada! – él me grita y luego me golpea.

Abro los ojos al escuchar el despertador, otra vez las pesadillas.

Cierro con  fuerza mis ojos y dejó escapar un suspiro lleno de cansancio, mi cabeza duele y mi cuerpo está cubierto con una fina capa de sudor.

Miró la hora, las 5:45 de la mañana, tengo aun media hora para arreglarme, me levanto y me dirijo al baño, me deshago de mi pijama y dejó que el agua fría relaje mis músculos, no entiendo como las personas se pueden bañar con agua caliente, la odio.

Después de bañarme me pongo un jean azul claro con rotos, unas botas cortas hasta los tobillos café claro, una blusa blanca simple con cuello en V, me aplico poco maquillaje y bajo a desayunar, tomo una manzana y me voy al garaje, tomo mi Audi y me voy a la universidad.

Estoy estudiando derecho, voy en mi 4 semestre con 20 años, vivo sola con una fortuna que dejó mi padr...que me dejó mi progenitor.

Sigo en la casa de mi infancia, no tengo nana, no tengo un novio popular,  no tengo unos padres que me miman o que me quieran, estoy sola.

Soy una chica de estatura promedio, de cabello castaño claro pero me lo tinture de rubio y me llega hasta los hombros, ojos azules con un poco de gris y tés blanca,  un buen cuerpo gracias a los genes y al mucho ejercicio que hago.

Llego a la universidad de Stanford, antes quería estudiar Hotelería y Turismo pero el derecho me pareció mucho más interesante.

Llego a mi destino y bajo de mi auto, entro tranquilamente al edificio pero Erica me detiene.

- Reunión en el Gimnasio, todos deben asistir – me mira de arriba abajo – incluso tu.

Se da media vuelta golpeándome con sus largas extensiones negras en mi cara.

No debes agredir a nadie, no debes agredir a nadie.

Erica es la típica chica popular, mimada y rica, siempre hemos tenido nuestro conflicto porque toda la riqueza que me quedo, la tengo a mi disposición, en cambio ella tiene tres hermanos menores con los cuales compartir su "preciada" fortuna.

Ella no sabe lo que tiene, yo daría todo mi dinero por tener a mi hermana de nuevo a mi lado.

Suspiro y tomo mis cosas para dirigirme al Gimnasio, me siento en la primera fila para ver que estupidez dirá Erica esta vez.

Al lado mío se sienta Ele mi mejor amiga, nos conocimos hace 5 años en unas circunstancias nada lindas y desde ahí no nos hemos separado.

- Hola, mi amada Rose – mi amiga saluda guiñándome un ojo.

Sonrío – Hola Ele ¿Cómo estas?

Ella rueda los ojos – No seas tan educada, me agobias – las dos nos reímos – y respondiendo a tu pregunta, estoy con sueño, mucho – aparece Erica en la mitad del escenario improvisado que siempre colocan para eventos o cosas por el estilo – Ahora esta ¿Qué querrá?

- No lo se, pero saliendo de ella, nada bueno seguro.

- Hoy estamos aquí para desenmascarar a cierta chica – Comienza a hablar y a caminar sonriendo cínicamente – una chica que ha tratado de subir de nivel, no importa si tiene dinero o no, porque por fin sabremos de donde sale – empiezan a reproducirse unas imágenes donde una chica, que no recuerdo su nombre, aparece con muy poca ropa, con exceso de maquillaje y con tacones gigantes en una de las esquinas del barrio más peligroso de California – Sara, una estudiante de odontología, no es nada más y nada menos que una Prostituta – Un reflector señala a la pobre chica que está llorando en su asiento – no te hagas la víctima, solo eres una vil Zorra que trata de ser más de lo que te mereces.

- ¡Cállate! ¡Tu no sabes nada! – la chica le grita a Erica con la voz quebrada en medio de los brazos de un chico que no alcanzo a reconocer.

- Oh, claro que sí, no se necesita ser un genio para saber lo que haces solo observando estas imágenes.

Oh Erica, me gustaría que te pudieras colocar en los zapatos de la chica y que te callaras al menos una vez en tu vida, me pongo de pie llamando la atención de todos en el Gimnasio y me dispongo a caminar hacia Erica.