Un asesino de guantes blancos

capítulo 6: Cambios mentales

Hoy era el segundo día que Esteban se quedaba en casa, hoy el no trabajaba ya que era domingo, así que aprovechamos el día y le sacamos provecho y fuimos al velódromo de Lanús. Caminando en silencio, la calle estaba vacía, ni un alma pasaba por esas pequeñas 4 cuadras que se hacían infinitas, era un silencio casi de película que hacía que el simple sonido del viento te de escalofríos, me encendí un cigarrillo mientras caminaba y en ese momento Esteban rompió ese catastrófico silencio.

—  ¿cómo empezaste con esto?

yo no entendía bien a qué se refería entonces pregunté.

— ¿que cosa?

— Tus adicciones ¿porque empezaste? 

— Nose, capas estaba pasando una etapa de descubrimiento que me terminó condenando con la dependencia.

— ¿no pensás dejarlo?

— Por ahora no, estoy bien asi.

No llegaba a entender porque me preguntaba estas cosas, en un momento sentí que le daba pena por el simple hecho de que no reflejaba mis emociones o sentimientos, lo que el menos llegó a pensar es que si sufro pero no lo demuestro ya que mis adicciones logran que este mundo lleno de desgracias logren ser más soportables. 

Llegamos al velódromo y había poca gente, no entendía porque, ese lugar siempre era muy visitado, pero ignore esos detalles ya que capas es porque era domingo, pero ¿no tendría que ser al revés? igual era un dia raro o capas era yo por ese sueño, no pare de pensar en toda la noche que significaba y capas aun lo seguía pensando, nose bien lo que vaya a pasar, solo se que era un dia extraño para mi.

llegando las 6 PM decidimos volver,ya que habíamos pasado toda la tarde tomando mates sin pronunciar palabra, hasta que Esteban de nuevo tiró sus dudas que hacen que mis pensamientos vuelen.

—  ¿estas bien clau?

—  Si primo, estoy bien —hago una pausa— ¿porque preguntas?

— porque no hablaste en toda la tarde.

— es normal de mi primo, no pasa nada.

Le mentí, ya que no era normal esto, no me sentía como siempre, me invaden las preguntas ¿será por su presencia? ¿estaré loco por todo lo que pasó? ¿tengo que dejar las drogas porque ya me están quemando? mis gritos de ayuda eran mudos ya que ni yo entendía lo que me pasaba.

Esa noche no soñé, me dormí a las 11 PM y sentí que cerré los ojos y parecieron 5 minutos que habían pasado hasta que los abrí, pero ya eran las 8 AM, Esteban se había ido a su trabajo y después de ahi se iba a estudiar, yo por mi parte falte al colegio y seguí durmiendo. Cuando me quise dar cuenta eran las 4 PM, dormí todo el dia y no había no salido de joda la noche anterior, ¿que me pasa? ¿sera cansancio acumulado? ¿estrés? nose, lo único que quería en ese momento era dejar de pensar. Salí y me fume un faso con unos vecinos de barrio, desde la muerte de Cris no fumaba, capas era eso lo que me pasaba, un horrible y melancólico periodo de abstinencia. Entre a mi casa re mambeado y me acosté a escuchar música mientras invitaba a unos amigos a la joda por mi cumpleaños. Cuando llegó Esteban yo estaba muriéndome de risa por un programa de comedy center, mis ojos achinados y mi cara de colgado delataban el estado en que me encontraba, entonces Esteban preguntó.

— ¿porque haces esto?

— ¿que cosa?

— dale claudio ¿me ves cara de boludo?

— no te entiendo primo.   —sabía de lo que me hablaba pero solamente me hacía el tonto—

— ¿estas drogado?

— no primo, solo me estoy riendo de las boludeces de Keny, nada más. 

Esteban, con cara de decepción se acostó a dormir, nunca lo vi con esa cara, igual no me puse a pensar ya que el viaje estaba re bueno y no daba tirar abajo un viaje tan lindo.

Sin darme cuenta ya solo faltaban 3 dias para mi cumpleaños, Esteban ese dia se tomó franco ya que no cursaba y teníamos que ir a comprar bebidas para el #28O que era mi cumpleaños, hoy me levante con buen humor, nose porque, pero me levanté feliz y no pensaba en el porque de nada, por primera vez en mucho tiempo volví a pensar en algo que no sean mis dudas o sueños.
Cristian no toleraba que fume, me drogue o tomé, por eso me hacía tantas preguntas, pero porque lo veo cada día con menos ánimo era mi pregunta en ese momento. Mientras hablábamos destape una cerveza que recién compramos y empecé a tomar mientras hablábamos de la vida y de los idas y vueltas del destino. En ese momento Esteban me sacó la cerveza de la mano y empezó a tomar el, como que entraba en el ambiente de fiesta y eso me gustaba porque sabía que en 3 días el iba a estar ahí y la iba a pasar bien.
Faltando un día empezaron a caer mensajes pidiendo de que si se podían sumar a mi fiesta, estaba re contento al punto de querer drogarme y viajar a otro mundo, iba a encenderse un porro hasta que entró Esteban a mi cuarto, me sorprendí, estaba borracho, le pregunté porque lo hizo y no me quiso responder, entonces le saque la botella de licor que tenía y lo mandé a que se bañe, por primera vez sentí lo que era la pena.
Llego mi gran día, hoy cumplía 16 años de edad y mi cuerpo lo sentía ya que me levanté con más energía que nunca, Esteban se levantó y estaba con mejor cara que yo a pesar de la resaca, no entiendo el porqué pero no importaba ya que estaba pensando en el alcohol, la música y el descontrol que iba a haber a la noche. Fui al kiosco a comprar 5 paquetes de cigarrillos ya que al haber mucho alcohol tenía que haber mucho cigarro, en el trayecto del viaje vi que mi primo estaba raro, con la mirada perdida, esa fue la primera vez de los 10 días que pregunte yo algo
— ¿estás bien?
— Si, ¿Porque?
— No, por nada.
— Estoy pensando en esta noche, va a ser muy extraña.
— ¿porque?
— Lo presiento.
Decidí guardar silencio y seguir con mis compras.
Esa noche empezé a recibir a mis amigos y a los amigos de mis amigos, mi primo estaba en un costado peleando por teléfono con la novia, cuando corto me acerque
— ¿estás bien primo?
— si men, vos tranquilo
Empezamos a tomar y a bailar con la música que eligió Luquitas, mi primo de sangre, estábamos todos te gedes, algunos en la terraza fumando faso, otros en la pieza "jugando", hoy era un día para que se "maten", pero no en un sentido literal.
Llego castillo, un vecino tranza del barrio y me ofreció 20 pastillas de éxtasis para entrar a la fiesta, yo por supuesto acepté. Estábamos revisando drogados todos, estaba re drogado, tanto que no sabía dónde estaba Esteban, cuando lo empiezo a buscar vi que estaba consumiendo una pastilla de éxtasis y estaba sentado con una chica en sus piernas, yo no entendía bien pero había una frase en mi puerta "lo que pase en esta joda, queda en esta joda".
Fue pasando la noche y yo empezaba a perder la conciencia, me estaba por desmayar, estaba sufriendo una sobre dosis, algo que nunca me pasó, pero nadie me ayudó, la última imagen que tuve de esa noche fue a Esteban fumando un faso ¿No era asmático? No tuve tiempo de pensar que se me apagó la luz en mi cabeza, me había dormido por la droga.
En ese momento volví a ese sueño, ese sueño que me dejó pensando durante tanto tiempo, esas tres lapidas. Me acerque hacia ellas pero vi que un cuerpo estaba entrando en la fosa de la tumba, corrí a ver qué es lo que pasaba, la tumba se empezó a completar
"QEPD LEONEL QUISPE
15-04-1996 / 28-10-2014"
empezaron mis flashbacks y empezé a preguntarme
— ¿Quien es Leonel?...
Después de 15 segundos preste atención a la fecha de nacimiento y en ese momento desperté.
Fui corriendo a la sala y ahí estaba, Esteban Leonel Quispe, en el sillón tirado con la sala vacía y la chica llorando, estaba muerto, llame a una ambulancia diciendo que encontré a un hombre tirado en mi vereda ya que si entraban a mi casa nos detenían a todos por las cantidades de droga que había. Cuando el médico lo reviso me acerque y pregunte
— ¿Esta bien?
— Este hombre murió hace un aproximado de 3 horas, asfixia por colapso de pulmones por los signos que tiene
Ahí es cuando entré a mi casa sin llorar, sin dar marcas de tristeza y saque a todos de mi casa. Empezé a limpiar y vi un papel en el sillón que estaba Esteban que decía esto
— "Claudio, te pido perdón, pero quiero hacerte ver lo que yo sentía cada vez que yo te veía drogado, si muero en el intento quiero que dejes todas tus adicciones"
En ese momento quebré por primera vez, caí de rodillas, me tiré en el piso y empezé a decir "lo mate" entre llantos de culpabilidad y tristeza acumulada, ahí empezaron mis cambios mentales, pero en ese momento solo podía llorar.
(Fin del capítulo 6)