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Es el cumpleaños de Tsuzuku y por lo tanto su "maravilloso" novio Koichi decidió hacerle una fiesta. Si, es verdad que Tsuzuku dijo que no quería una, pero Koichi es un terco.
La fiesta había empezado hace casi una hora, pero mientras más tarde llegues a una fiesta mejor está el ambiente.

Mi cita de hoy sería una vieja amiga... le digo "vieja amiga" porque decir "folla-amigo" suena muy feo.

Cuando llegamos a la fiesta he de decir que no conocía a la mayoría de las personas, logré reconocer a Ryoga y a Aryu. Que por cierto, gracias a la presencia del último mencionado Koichi no se veía muy contento que digamos.

— ¿Como se siente tener que convivir con los amantes de tu novio? — le dije a Koichi después de beber un trago de cerveza.

— MiA... este no es el momento indicado para burlarte de mi — me miro de una forma de la cual si las miradas mataran, ya me estarían velando.

— ¡Entonces lo admites! Mira no te enojes, pero tú eres mejor, por algo eres su novio, ¿no? Algo debes de tener — dije mientras lo miraba de los pies a la cabeza.

— Mejor deja de hablar y ve a buscar a Meto que desde hace rato que está preguntando por ti.

Pobre Koichi, se le ve estresado... tal vez hoy no se lo quisieron coger, pero bueno, ese no es mi asunto.

Cambiando de tema, ¿Por qué Meto me está buscando? Hace ya un largo tiempo que no estamos junto gracias a su estupidez y mira que yo pensé que sería el primero en cagarla...
Lo que haré será buscarlo y ponerlo algo celoso con mi cita, tengo ganas de joder a alguien hoy.

Luego de una larga búsqueda entre tanta gente pude dar con él, desde la venta pude ver que estaba en el jardín. Pongamos el plan en marcha.
Salí al jardín junto a mi "pareja" tratando de hacer todo el ruido posible para llamar su atención.

— ¡MiA! ¿Qué haces? — dijo riendo mientras pasaba mis manos por sus glúteos.

— ¿Qué no es obvio? Nos vamos a divertir por nuestra propia cuenta — dije metiendo mi mano bajo su falda, a lo cual ella no se negó y solo se dejó hacer.

La cosa ya se estaba calentando cuando por fin pude escuchar esa vocecita que tanto quería escuchar.

— M-MiA... ¿podemos hablar? — mi plan estaba saliendo como yo quería.

Decidí hacer caso omiso, quería que se enfadara de verdad.

— ¡MiA! ¡Mírame cuando te hablo! — puso su mano en mi hombro haciéndome girar.

— Meto... ¡estoy ocupado! ¡¿Que no ves?! — dije señalando a mi acompañante.

— ¡Eso se soluciona fácil! — ahí estaba ese tono de voz de niño berrinchudo.

Me tomo de la muñeca y me llevo dentro de la casa hasta llegar a una habitación despejada de ruido y gente.

— ¡¿Quiero saber que hacías con esa maldita ofrecida!? ¡Deberías estar conmigo! ¡Por eso soy tu novio!

— ¿Novio? ¿De verdad piensas que seguimos siendo novios después de la estupidez que hiciste mientras estábamos de gira? — si, me molesta pensar en aquella situación.

— Yo... ¡fue un accidente!

— Aah... ¿un accidente dices? ¿Acaso te caíste por accidente sobre el pene de Masa? Porque por lo que yo vi no fue así.

— Tu lo hiciste muchas veces y yo jamás te dije nada... — el pobre tenía los ojos llorosos... pero no es mi culpa decirle sus verdades.

— No mientras éramos novios... está bien que ando acostándome con cualquiera, pero jamás te haría eso estando en una relación — me fui acercando cada vez más a él.

Estábamos tan cerca que puedo jurar que escuchaba los latidos de nuestros corazones al unísono.
No pudimos evitar lo inevitable... terminamos besándonos, era un beso que ambos deseábamos... o mejor dicho, necesitábamos.

El beso fue subiendo de intensidad, tanta que sentía que la ropa nos estorbaba. Comencé por desabrocharle el pantalón y quitarle la camisa para después recostarlo sobre la cama que había en esa habitación.

Me deshice del resto de su ropa, para así terminar viendo aquella erección que desde hace ya tiempo le incomodaba. Pude notar como sus mejillas se tornaron de rojo al saber como lo observaba y simplemente no pude evitar soltar una pequeña risa por tal gesto.

— MiA... te amo — se incorporó un poco para poder juntar sus labios con los míos en un dulce beso.

Después de ese beso, Meto se animó a quitarme la ropa, que como se lo agradezco porque ese pantalón ya me estaba matando.

Decidí entrar lentamente en el para no lastimarlo, a lo cual él soltó un pequeño gemido mientras con las pocas uñas que tenía las enterraba en mi espalda.
Comencé a moverme un poco más rápido cuando sentí que él ya se había acostumbrado, sus gemidos se hacían cada vez más sonoros lo cual me encantaba.

— MiA, por favor no pares — dijo con su voz agitada.

Esas fueron las palabras claves, la gota que derramó el vaso. Cada vez comenzaba a ir más rápido y con más fuerza, apretaba su cadera con fuerza tras cada estocada. Escuchar como sus glúteos golpeaba contra mi me excitaba cada vez más.
Ahí fue cuando pude sentir su pequeña mano bajar hasta tomar su miembro y comenzar a darse placer por su propia cuenta

Los minutos pasaron y ambos estábamos por llegar al climax. Ver su cara sonrojada y su cuerpo lleno de marcas gracias a mi boca me resultaba completamente placentero.

Ambos terminamos por corrernos al mismo tiempo, uniendo nuestros labios con un cálido beso para así terminar la noche diciéndonos un "te amo".













***
(⌒▽⌒) por fin actualice 😅 tarde mucho, lo sé y lo siento 😔 no tenía inspiración.

Estos dos capítulos fueron un "especial" (que este de "especial" no tiene nada :v) por el cumpleaños de Tsuzuku uwu se supone que debía subirlo ayer, pero no lo había terminado :v

PD. El yaoi no salió tan bueno como yo quería 😂 pero se los debía y espero que les guste 😋

HIATUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora