Dirty Friend

Capítulo 12

PD: Ahora Yoongi tiene el pelo negro (porque YOLO)

☪️Some years later☪️

— Mhm... — Yoongi clavó los dedos en la cadera del rubio.

— A-Ah, oppa...

El mayor entraba y salía de Jimin a gran velocidad. Sus muslos chocaban contra el trasero del rubio.

— Y-Yoongi... — la saliva caía por la comisura de Jimin, deslizándose por su barbilla. Su cabeza estaba pegada al colchón y su trasero estaba alzado —. ¡O-Oh! ¡Ahí! — gimió el menor cuando Yoongi tocó su próstata.

El mayor sonrió con malicia, golpeando suavemente el punto de Jimin, haciéndole quejarse en silencio.

— ¿Te gusta? ¿Eh, mi pequeña zorrita, te gusta?

Jimin puso los ojos en blanco, mordiéndose el labio y haciendo un sonido gutural desde lo más profundo de su garganta cuando su novio se hundió de nuevo, tocando su dulce punto sensible durante unos segundos. Una pequeña lágrima quería salir del ojito izquierdo de Jimin, quien apretaba las sábanas mientras jadeaba cada pocos segundos.

— P-Por favor...

Yoongi sonrió.

— Por favor, qué, mi amor.

Jimin cogió aire y pronunció las palabras como pudo:

— Fólleme más rápido y profundo oppa... Por favor, hágame ver las estrellas...

Yoongi hizo caso, penetrando de forma más veloz y profunda al pequeño rubio. El pelinegro gruñó, sintiendo su miembro rodeado por las paredes del menor. Jimin suspiró cuando el pálido golpeó de forma fuerte su próstata, sintiendo que estaba en el cielo. Unos cortos "ah" salían de la boca de Jimin mientras Yoongi seguía embistiéndole profundo en su entrada. Las mejillas sonrojadas y mojadas por lágrimas del pequeño resultaban adorables a ojos de Yoongi.

— Me vengo... — murmuró Jimin entre los jadeos y gruñidos de la habitación.

— Yo también... — Yoongi informó al menor.

El mayor tomó el miembro del pasivo, masturbándole para que se viniera. Jimin se retorcía bajo el pálido cuerpo de Yoongi, gritando como gata en celo. Los sollozos del rubio mezclados con los sonidos sucios que su boca producía era música a oídos del pelinegro.

Jimin se corrió sobre las sábanas, manchando estas de semen. Yoongi se mordió su labio con fuerza cuando las paredes de Jimin apretaron su miembro, haciéndole sentir un placer incomparable.

— Jimin, te amo y no sabes cuánto... — susurró Yoongi en el oído del menor, corriéndose en el interior de este.

Salió del interior de su novio para tumbarse a su lado en la cama. Llevaban cuatro largos años de noviazgo, felices, con algunas peleas de celos por parte de Yoongi, pues odiaba que se acercaran a su pequeño y coquetearan con él aun sabiendo que Jimin era suyo.

Porque Jimin era suyo, de su propiedad, tanto en cuerpo como en alma, y Yoongi era de Jimin, siempre lo sería, su amor no acabaría nunca, una confesión temprana, pero verdadera, lo juraron. Ambos juraron que siempre estarían juntos, y siempre lo estuvieron, jamás los separararon, solo la muerte podía hacer la pérdida real. Pero no importa qué se cruce en sus caminos, Yoongi y Jimin lucharían juntos ante todo. Los dos lo sabían.

☪️

— Amor — susurró Yoongi en el oído de Jimin, mordiendo su lóbulo de forma juguetona.

— ¿Qué quiere, hyung? — dijo Jimin mirándose aún en el espejo, abrochando su camisa.

La pareja se habían duchado para quitar el sudor y semen de su cuerpo, debían arreglarse para ir a una cena con sus amigos a un restaurante.

Yoongi le dio una nalgada a Jimin.

— Sabes cómo debes llamarme, hazlo — gruñó el pelinegro, mordiendo el hombro de Jimin sobre la camisa blanca.

— ¿Oppa?

La mano de Yoongi volvió a impactar contra el glúteo derecho cubierto por el pantalón ajustado de Jimin.

— Daddy... ¿qué quiere?

— Abróchame la corbata, no sé.

Jimin gruñó, llevando sus pequeñas manos a la pieza de tela, comenzando a hacer maniobras para anudar la corbata.

— Listo, ¿algo más?

— Ven conmigo.

Yoongi tomó la mano de Jimin, y lo guió hasta el salón. Susurró un "Espera aquí" y dejó un suave y corto beso en los labios de Jimin para irse un momento de la sala. Jimin esperó, cruzado de brazos y con el ceño fruncido, seguro que era una de las tonterías de Yoongi.

Vio al pelinegro pálido entrar a la sala. Tomó al rubio de la mano y lo movió hasta el centro de la habitación. Comenzó a agacharse, posándose en una de sus rodillas, arrodillándose así. Sacó una pequeña cajita del bolsillo de su americana y la abrió, mostrando un anillo.

— Park Jimin, te amo como no amé a nadie nunca, por eso... ¿quieres casarte conmigo?

Jimin, con lágrimas en sus ojos, asintió eufóricamente. El pelinegro cogió el anillo dorado y lo deslizó por el dedo anular del menor. Se levantó, quedando frente a Jimin, quien se tiró sobre él y lo abrazó.

Yoongi estrechó el cuerpo del pequeño entre sus brazos. El menor lloraba en el pecho del contrario. Min besó el cabello rubio de Park, oyendo sus sollozos de felicidad.

— No contestaste — Yoongi ansiaba escuchar las palabras.

— ¡Claro que me casaré contigo, idiota! — rió entre lágrimas Jimin, y besó a su prometido en los labios, provocando esas mariposas que sintió la primera vez que ambos labios se unieron hace cuatro años atrás.

☪️