Capítulo 12

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— Está arriba

Fue lo que me dijo Fran al verme en su puerta. Le agradecí y subí las escaleras, pensando en las palabras que usaría para disculparme con ella... Aunque no pude hacerlo porque mis pensamientos estaban siendo invadidos por una conversación que tuve con esa voz de camino a allí

/ Oye... ¿Que hay sobre Alba?
[ ¿Te refieres a...?
/ Tus sentimientos 
[ Es... Tu sabes, es mi amiga
/ ¿Nada más?
[ Nada más
/ Pensé que había algo más, te preocupaste mucho cuando ella se fue
[ Cualquiera lo haría
/ Si, pero lo tuyo fue... Extraño

Esa conversación no tuvo ninguna finalidad especial, o al menos eso había pensado. Durante ese corto recorrido de la entrada a la habitación donde Ana esperaba lo pensé... ¿Era sólo amistad?... ¿Era sólo el sentimiento de ser una familia?... No lo sabía, no podía saberlo, después de todo es difícil cuando quieres ser una familia para esa persona y estás decidido a hacerlo. Yo no veía a Alba cómo nada más que una hermana, al igual que Gya... Incluso diría que las veía como mis hijas, a quienes debía proteger y enseñar, nada más

Llegué junto a Ana y ella me miró con desaprobación, tenía todo el derecho, pero pese a eso sólo me indicó que Alba estaba allí y bajó las escaleras, tal vez para ir junto a Fran

/ Aquí estás, vamos

Suspiré para tranquilizarme y abrí la puerta, entonces ella volteó a verme nada más hacerlo... Me congelé... ¿Que iba a decirle?

Nos observamos durante unos segundos y sus ojos se cristalizaron, entonces fue hasta mí y me abrazó... Me sorprendí, pensé que sería yo quien tendría que ir a ella para que me perdonara

— Alba

Ella me abrazó más fuerte, yo supuse que lo hizo para que no hablara, así que eso hice, sólo correspondí su abrazo... Todo parecía ir a acabar bien, con ese final feliz que sólo te cuentan en historias... Y es por eso que sólo parecía

— Se acabó el tiempo

Era ella, nada menos que la bruja, y a su lado estaba Gya, con una expresión triste, algo pasaba sin duda. Alba me soltó y se alejó para ponerse junto a Gya, quien tomó su mano... Ambas lloraban   

— ¿Que pasa?

— No sé si te lo dije, pero también supondré que tuviste que haberlo intuido. Nosotras entregamos pero también monitorizamos... Hay veces donde los chicos parecen buenas opciones, pero siempre pasan cosas que hacen que esas opciones cambien

Empezaba a entender por donde iba y no me gustaba

— Tu eres un buen chico, de eso no hay duda, pero lo que nos importa es el trato que se les da a ellas, y este, por desgracia, no fue el mejor... Lo siento, Edward. Y por si tenías curiosidad... El antiguo dueño de Gya, ya nos encargamos de él

— ¿Eh...?

E igual que la vez en mi casa, ella sólo desapareció... Pero no fue sólo ella, si no también Gya y Alba. Me quedé quieto en mi lugar, no sabía cómo reaccionar, pero mejor dicho, no quería hacerlo... No quería aceptar que ellas se habían ido y para no volver

Ese día fue el peor. Sólo me fui de casa de Fran para ir a la mía, donde lloré... Lloré y lloré como no lo hice antes, ni siquiera cuando mamá murió... Había sido tan repentino. No supe nada de ellas después de eso, era obvio, pero todo lo que les pertenecía había desaparecido, incluso las fotos de ellas... Pasaron las semanas, los meses, un año después yo ya podía vivir pasando el 80% del día sin recordarlas, pero siempre terminaba haciéndolo. Volví al instituto tras recuperarme, conocí a personas nuevas...

Pasaron cuatro años, ellas ya no estaban en mi memoria, las había olvidado. Fran y Ana hicieron publica su relación, diciendo que se casarían, después de todo ya eran mayores de edad. Yo por mi lado seguía solo, trabajando en un buen lugar junto a Fran donde conseguí el suficiente dinero para independizarme totalmente y además comprar un auto. Pasó un año más, y un día mientras me preparaba para volver a casa junto a Fran después de la jornada laboral pasó algo que nunca esperé. Íbamos y volvíamos a pie de ese lugar, como había sido desde el principio, después de todo tuvimos suerte de conseguir cada uno una casa de buen tamaño y a buen precio, una al lado de la otra, que quedaban cerca del trabajo 

— ¿Esperabas visita?

Me dijo él igual de confundido que yo al ver a dos personas frente a la puerta de mi casa, dos chicas, no podía reconocerlas pero parecían esperar a alguien

[ ¿Las conozco?
/ Vaya que lo haces

No podía recordar, pero si esa voz decía que sí entonces era así

— Iré a ver que quieren

Fran sólo asintió y yo me dispuse a hacer lo que dije, acercándome a ellas quiénes voltearon a verme cuando escucharon mis pasos. Las observé un poco, pero seguía sin recordar plenamente, sin embargo, tenía un leve presentimiento de haber visto esos pares de ojos verdes y dorados en el pasado  

Estaba por hablar, hasta que la chica de ojos dorados me abrazó repentinamente, siendo seguida por la de ojos verdes. Todo me pareció extraño en ese preciso momento, pero entonces lo recordé cuando la de ojos dorados habló, su voz siempre viviría en mi mente aunque no pudiera siquiera recordarla... Siempre podría reconocerla

— Lo extrañamos mucho, amo

Sólo eso fue suficiente para hacerme recordar... Sólo eso fue suficiente para hacerme llorar como la vez que ellas se fueron... Sólo eso fue suficiente para corresponder el abrazo, repitiéndoles que las extrañaba y lo sentía

...

...

...

Y así termina, llegando a este día, donde vivo feliz junto a mi esposa, Alba, y junto a Gya, quien parece más una mascota que antes

...

Nos obligaron a dejarte... Pero las convencimos de dejarnos volver, ahora no nos iremos, ni hoy ni nunca

Alba y Gya, para usted, nuestro cuidador... Nuestro amado amo ♥...

Fin


Mi Vida Junto a... ¿Un Gato?  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora