¡Mundo cruel!

Capítulo 19

Capítulo 19: No quiero que pelees con alguien que no sea yo

Narra Mili

Después de "hablar" Con Alex en el garage me cargo hasta su habitación mientras le gritaba todo tipo de cosas, lo hice hasta recordar que solo uso esta pelea como una tonta excusa para alejarme de el- te odio Alex- murmuré sabiendo que lo dije porque no puedo dejar de amarle, al entrar a su habitación se llevó otro puñetazo, trate de irme pero me sujeto y me empujó hasta que mis piernas chocaron con su cama me tumbo colocándose el sobre mi, me miraba intensamente con una mezcla de ira y deseo que le resultó hasta cierto punto excitante, aun así no quise ceder y empece a pegarle en el pecho tratando de quitarle pero solo sentí que sus manos sujetaron mis muñecas y subieron mis brazos hasta juntarlos sobre mi cabeza, pesa mucho estando así, sujeto mis manos juntas solo con una mano y la otra la uso de apoyo para no aplastarme

-Repitelo- susurro y no se a que se refiere, miro mis labios y mis ojos - repite que me odias mirándome a los ojos Milagros y juro que te soltare sin decirte nada, sin impedirte salir y no me acercarse más a ti pero para eso primero debes mirarme a los ojos y decirme que me odias- susuró mirandome intensamente, mis ojos se abrieron como platos, no sabía que lo escuchó, lo bueno es que el pensó que lo odio odio no que le amo y por es le "odio" Lo malo es que me pide que le mienta sin dejar de mirar mis ojos, su mirada esta cargada de emociones y entre ellas la frustración y la ira son las que más distingo

-Yo... - empece pero las palabras se trabaron en mis labios se que puedo mentirle pero no quiero hacerlo, no quiero decirle que le odio porque en realidad estoy enamorada de el, su mirada bajo a mis labios y de la nada sentí sus labios estamparse contra los míos en un beso totalmente salvaje y brusco, apenas pude seguirle el beso cuando reaccione, su mano libre fue a la parte de atrás de mi cabeza y se enredo en mi cabello impidiendo que me separe de el, cuando nos quedamos sin aire tiro de mi cabello dejando mi cuello expuesto y bajo besos por mi mentón hasta mi cuello, siguió hasta donde el escote de la camiseta le dejó, esta muy enfadado supongo

-Dime una sola cosa- susurró contra mis labios -¿porque dijiste eso? - pregunto y me mordi el labio, el me miraba curioso pero aún parecía enfadado

-¿Estas enfadado? - pregunte y el frunció el ceño

-Relacionadas contigo siento muchas cosas pero enfado no es una de ellas- dijo contra mis labios y le mire curiosa, el me soltó y se sentó a un lado mirando por la ventana - creo que antes de que te vayas contestaré a tu pregunta y te diré lo que te mencioné ayer cuando bailabamos - dijo y yo me senté a su lado mirándole a los ojos - el caso es que cuando mi madre murió yo empece con las pesadillas, eso lo sabes, desde que pasó tiempo contigo apenas las he tenido aunque tampoco duermo del todo bien, también desde que ella murió mi única compañia fue mi mejor amigo, el no me dejaba solo, pero yo vine aquí nada más cumplir 18 y el vendría en cuanto los cumpliera, por eso el llegó hacé tan poco, lo que cambio todo fue conocerte, pase de mi estúpida fachada de mujeriego, una que puse cuando supe que una chica que me "gustaba" Me traicionó y se tiro a muchos chicos, por eso me largue y vine aquí, pensé que era distinta y no lo fue, por suerte me di cuenta a tiempo, empece a tirarme a cada chica que encontraba, siempre con condones- dijo y no pude evitar mirarle con una ceja arqueada- de ellas no sabia lo que podían contagiarme, de ti si- dijo y me puse roja- el caso es que al llegar aquí de nuevo conocí a una rubia malhumorada que me quería matar, una que sin darme apenas cuenta me hizo dejar esa tontería de ser mujeriego y la primera chica por la que me he preocupado enserio desde que mi madre no está, a la que cuando tengo insomnio veo dormir y esa que me pone en mi lugar sin miedo, la que sin darme cuenta se coló en mi corazon y no sale, la rubia que me enamoró como nadie lo hizo antes- dijo y se levantó dejándome sola en su cama, sentí mis ojos abrirse como platos, el... Siente lo mismo que yo... El también me ama... Me levante y fui hasta el que estaba de pie mirando por la ventana, mire su mano y la cogi entre mis manos entrelace sus dedos con los de mi mano y no pude evitar jugar con su mano