Capitulo 1.

681 71 7
                                    

Capitulo 1

Nicholas observo con una mirada irritada como Tiffy, Taffy y Toffy, sus trillizos primos, emprendían la huida sin siquiera mirar hacia atrás y sin importarles que Nicholas aun estuviera atrapado debajo de la montaña de cajas que habían caído sobre él cuando intento huir.

¡Malditos traidores! ¡No tratare nunca más con esos bastardos! Pensó con irritación mientras luchaba por salir de debajo de la cajas de regalo que se apilaban sobre él.

Tenía que admitirlo, la tarea estaba resultando ser más difícil de lo que se creía, pero Nicholas estaba determinado, porque si el gran hombre lo atrapaba de nuevo, sería un elfo muerto.

Él lucho con renovado propósito y al fin pudo librarse de las cajas mientras escuchaba a la distancia las coloridas maldiciones que eran lanzadas sobre su nombre. Él nunca había escuchado su nombre siendo pronunciado después de tan imaginativos improperios. Era algo así como una nueva hazaña.

Nicholas se levanto y sacudió el polvo de colores fuera de su uniforme y comenzó su camino fuera del almacén antes de que la fuerte presencia en su espalda y la mano tomándolo por el cuello lo detuvieran.

Él podía sentir el aura letal que salía de la persona detrás de él y sus ojos se abrieron como platos. Nicholas se quedo completamente quieto, sin ser lo suficientemente estúpido o temerario como para intentar escapar a esas alturas.

Estaba completamente jodido.

—¿A dónde diablos crees que vas? —preguntó con una atronadora voz la persona detrás de él mientras el agarre en su cuello se apretaba.

—¿A dar de comer a los renos? —respondió Nicholas en una inestable voz, pero incluso antes de que las palabras salieran de su boca, supo que solo se estaba hundiendo aun más.

—¿Por qué no lo intentas de nuevo, Nicholas? —el agarre en el cuello de Nicholas fue intensificado mientras era rudamente sacudido como una de esos muñecos de trapo.

Él hizo una mueca imaginando lo verdaderamente enojado que el gran hombre estaba como para recurrir a esos tratos siendo que era generalmente una persona amable.

La mano en su cuello fue retirada, pero antes de que Nicholas pudiera dar las gracias por ello, su brazo fue tomado y él fue girado para que pudiera enfrentarse a su ejecutor.

Frente a él se encontraba un hombre alto, de por lo menos 2.10m, vestido con un overol rojo profundo, con los musculosos brazos cruzados sobre el pecho y un ceño fruncido en su rostro. Su impecable cabello blanco estaba echado hacia atrás y atado con una cinta de cuero, mientras que su barba de candado se veía cada día más larga y comenzaba a tomar el color de su cabello, dejando su negro natural detrás, guantes negros cubrían sus manos y sus siempre presentes botas de motoristas le daban una muy mala sensación a Nicholas mientras el aura amenazante e intimidante aumentaba. Quien dijo que Santa Claus era amor y paz era porque nunca había conocido a este hombre y su pasado de pandillero.

Nicholas sintió como si fuera a vomitar.

Después de mirar fijamente a Nicholas durante unos segundos, Santa sacudió la cabeza y suspiro con cansancio.

—Ven a mi oficina Nicholas —exhaló antes de darse media vuelta y comenzar a caminar hacia las escaleras al otro lado de la habitación.

—Veras... tengo algunas cosas que hacer —evadió Nicholas mientras daba unos cuantos pasos hacia atrás—. Quizás pueda ir en otro momento...

—No es una sugerencia, es una orden —la atronadora y oscura voz se escucho en todo el almacén y Nicholas supo que estaba completamente perdido.

Pasos de Elfo. #LGBTEspañolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora