9.

1.2K 125 29
                                    

El aire que había contenido salió de golpe, aquello no podía estar pasando, sus ojos respondieron antes de él, con lágrimas saliendo de él sin tratar de detenerse.

Dick había dejado de escuchar, después de soltar un desgarrador grito, porque dolía. Dolía tanto que quemaba. Los presentes desviaron la vista conteniendo su propio llanto o llorando con él.

Su alfa estaba muerto, pálido sobre esa camilla y con heridas por todos lados.

Dick se rompió con la pura idea de no volver a estar con Jason, el llanto que soltó comenzó a asfixiarlo.

Bruce se había agachado a levantarlo, y dejó que este llorara en su hombro, las feromonas dulces del celo eran remplazadas completamente por el amargo aroma de dolor que desprendía.

El aroma era enfermizo, agrio, amargo, picaba en la nariz de mala forma, la esencia de ambos omegas se mezcló inundando toda la casa con esta.

Apestaba a dolor.

Lo peor es que así duró seis meses.

La peor parte para Dick fue enterrarlo.

Al día siguiente de que el cuerpo de Jason llegara a la mansión, Bruce decidió hacerlo. Alfred fue quién con todo el trabajo del mundo lo preparó, llorando en el proceso.

Sólo pudo ponerle un traje y maquillar sus golpes, no se atrevió a hacer otra cosa, fue un entierro discreto. Sólo para la familia Wayne y los cercanos.

Bruce quería mantenerlo en secreto, y todos respetaron su decisión. Al relevar la muerte del alfa, quien fuera que lo hubiera matado, se enteraría de su identidad. Así que dio cómo desaparecido a su hijo mayor, las noticias volaron por todo el mundo.

El hijo mayor de Bruce Wayne había desaparecido.

El primer Robin de Batman había muerto.

Los cercanos al murciélago se preguntaban que era lo que había sucedido.

¿Que había pasado con Jason?

El mensaje que había recibido el alfa era tan amenazador como preocupante. Ni siquiera se lo pensó dos veces, y actuó bajo sus instintos, más si se trataba de amenazar a su omega.

Lo primero que hizo fue llamar a Roy, que le prometió llegar ahí en dos horas. Jason no le preguntó como pero sólo colgó y pasó antes a comprar algo para el omega, según sus cuentas, en tres días cumplían su aniversario. Guardó con cuidado el collar y condujo a la mansión con los nervios de punta. Hizo otras dos paradas en el camino y llamó a Roy para ver como iba el asunto.

En la mansión, entró a la computadora del murciélago, porque necesitaba saber la ubicación exacta de donde le habían enviado el mensaje. Descargó unos archivos que Roy le envió al respecto del sujeto que le envió mensaje, y descubrió que era ruso, un alfa que tiempo atrás había secuestrado a su omega.

Dick entró en ese momento a distraerlo, el omega era su única distracción desde siempre, porque tanto el alfa como el omega sabían que el precioso menor tenía a Jason en sus manos. Así que Jason decidió prestarle atención a su lindo omega durante unos segundos.

Procuró no distraerse mucho con él, iba a salvarlo, y eso fue lo que lo armó de valor para seguir con lo que hacía.

Se fue con el ligero temor de dejar desprotegido a Richard, y el no haberle dicho nada a Bruce, pero aquello era bueno si pensaba a futuro.

No tardó en llegar a la dirección que le había enviado Roy, quien ya le esperaba con el traje de flecha verde puesto, Jason lo abrazó antes de desmayarlo y subirlo al auto del pelirrojo, puso el conductor automático y lo envió hacia casa de Wally West. De todas formas el velocista se llevaba bien con el otro pelirrojo aunque Jason lo odiara.

Bounce Back (ᴊᴀʏᴅɪᴄᴋ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora