Cuando el domingo finalmente llegó yo era un desastre. Me mantuve ocupada; limpié, jugué con Layla, hice un almuerzo enorme, pero cuando el reloj finalmente marcó las dos en punto, sabía que tenía que llamar a Justin antes de que él enviara a la caballería.
—Hola —respondió la voz profunda de Justin. El fondo era muy ruidoso.
—Si este es un mal momento, llamaré después —dije, rezando para que dijera “Está bien”.
—______, nena, trae tu trasero aquí. —Luego colgó.
¡Joder! ¡Estoy enferma de que la gente me cuelgue el teléfono!
Agarré mi bolso y me encaminé hacia la puerta.
—Nena, ¡Ven y dale a mamá algo de azúcar! —grité mientras esperaba en la puerta principal. Ella volteó por la esquina y se estrelló contra mí justo cuando yo me agachaba y abría mis brazos.
Le di un gran beso en la boca y terminé con brillo labial de sabor a fresa en mis labios.
—Tengo que correr a hacer algunas diligencias, así que se buena con la tía T mientras estoy ausente.
—Siempre soy buena —respondió en un tono exageradamente dramático. No pude evitar sonreír.
—Tienes razón. Te amo.
—También te amo, mamá. ¡Adiós! —gritó y se alejó corriendo.
Una hora después estaba sentada en mi camión afuera de un bar llamado Taberna BOQ. Esta era la dirección en la tarjeta que Justin le dio a Trish, pero no tenía ni idea de por qué quería él que nos encontráramos aquí.
El lugar estaba ubicado en Clear Lake, justo en el agua y no lejos de donde crecí.
Estaba empezando a ponerme nerviosa. En el fondo de mi mente empecé a preguntarme si tal vez Ryan tenía razón; quizás estaba tomando la decisión equivocada al encontrarme con Justin.
Me puse tan nerviosa que estuve a punto de poner el camión en reversa, cuando la puerta del lado del conductor se abrió.
—Apaga el camión y bájate, ______.
Me di la vuelta para fulminar con la mirada a Justin y rápidamente tomé inventario. Usaba una sólida camiseta negra semi-ajustada en la que se leía Taverna BOQ en la parte frontal izquierda en letras blancas. Tenía jeans desgastados y botas de motociclista negras.
¡Ugh! ¿¡Por qué tenía que ser tan malditamente caliente!?
Suspire sonoramente, me di la vuelta, saqué la llave y agarré mi bolso.
Cuando me bajé, Justin cerró la puerta y envolvió un brazo alrededor de mis hombros para guiarme hacia adelante, y él no iba a mostrarse fácil respecto de ello. Sabía que me estaba diciendo sin palabras que no se estaba andando con rodeos. Me sostuvo tan apretada contra su costado que tuve que poner mi brazo alrededor de su espalda, doblar mi codo y descansar mi mano en medio de sus omoplatos porque no tenía otro lugar en donde ponerla. Me negaba a envolver mi mano alrededor de su cintura.
—No tienes que maltratarme, ¿sabes? —dije tratando de sacudírmelo de encima.
—Esto no está ni cerca de lo que quiero hacerte en realidad —contestó duramente. Rodé mis ojos.
Caminamos a través de la puerta principal y me di cuenta de lejos que el lugar tenía clase. La vista del lago y la decoración de pesca le daban un aspecto relajado, pero todo se veía muy elegante. También estaba lleno de clientes. Apuesto a que los empleados hicieron su noche gracias a ello. Justin me siguió llevando a través de un par de pasillos, hasta que llegamos a la puerta de una oficina por la que me hizo pasar. Rápidamente tomé un vistazo del entorno, notando los recortes de periódicos y fotografías de Justin en uniforme militar que colgaban de la pared.
Interesante.
Estaba a punto de empezar a leer un artículo fragmentado cuando dijo irritadamente.
—Siéntate, _______. Me has tenido esperando lo suficiente.
¡Mierda!
Tomé asiento en la silla de visitantes y él se sentó detrás del escritorio, posó sus codos sobre él y entrelazó las manos debajo de su mentón. No dijo nada más, sólo se limitó a observarme.
—¿Eres el administrados de este lugar? —pregunté nerviosamente.
Respondió inmediatamente.
—Este es mi lugar. Soy el propietario.
—Oh —respondí en voz baja y miré alrededor de la habitación—Es lindo. ¿Qué significa BOQ?
—Bachelor Office Quarters. Vivienda para marines solteros. Ahora, vayamos al punto de esta reunión, _____. ¿Cómo vamos a organizarnos para que pueda ver a mi hija?