Capítulo 1

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-¡Esther, apúrate!- Gritó Anne.

-Ya voy molestos, sólo estoy algo desanimada, adelantense, si quieren- Dijo, la encontré algo deprimida, no sé porqué, digo, ella suele ser fría y seria, pero algo le está pasando.

-Est, ¿Te sucede algo?- Pregunté.

-Mark... Tú no te preocupes.

-¡Vamos vamos! ¡Amo éste parque! En especial cuando estoy con mis amigos- Anne siempre tan animada, es una chica con pelo rojizo oscuro y ojos cafés, baja estatura y pelo demasiado largo. Debo confesar, que estoy enamorado de ella.

-Muy bien... Aquí dejaré la canasta con la comida. ¡Esty! ¡Ayúdanos a poner el mantel!- Le grité a lo lejos, Esther es una de esas chicas que nada les importa y están serias todo el tiempo, pero en el interior seguro son buenas personas, tiene cabello negro rizado, y ojos celestes que me encantan, siempre se lo digo y se sonroja.

-¡Es sólo poner un mantel! ¡No necesitan mi ayuda!.

-Tiene razón, ven yo te ayudo- Dijo Anne.

Pusimos con delicadeza el mantel azul y sacamos la comida de la canasta.

Ah, me olvidé de presentarme, soy Mark Webber, tengo pelo rubio y ojos cafés, Esther y Anne son mis mejores amigas, somos inseparables y les tengo un gran aprecio.

-¿Comenzamos a comer?- Dijo Anne.

-De acuerdo.

De pronto llega Esther, deja su mochila y se sienta en frente de nosotros.

-Me comeré el sándwich de jamón- Dije tomando la comida.

-Mmm... Yo también-Dijo Anne haciendo lo mismo.

-¿Esther, tú qué quieres?-Dije.

-No tengo hambre.

-Hay sushi-Dije en tono burlón enseñándole el recipiente con el sushi, sé que le encanta.

-Ash, dame eso- Me lo sacó de las manos tomó los palillos y comenzó a comer.

-Ahh, qué lindas son las vacaciones ¿No creen?-Dijo Anne.

-Deja de verle el lado bueno a todo-Dijo Esther comiendo el sushi.

-Ay, no puedo.

-Opino que me gusta tu forma de pensar, Anne, define tu bella personalidad-Dije.

-Me alegra eso, Mark-Sonrió y me tomó de la mano tímidamente. Los dos nos miramos.

-Qué lindos se ven... Juntos...-Dijo Esther.

-Ay qué cosas dices Esty, sólo somos amigos.

-¿Te pasa algo, Esther? Te noto rara- Dije.

-Lo que pasa es que me da náuseas que sean tan melosos, se me fue el hambre-Dijo y dejó de comer el sushi- Voy a dar un paseo.

-¡Te acompaño! ¡Vamos Mark!.

-Ya, ya.

-Siempre tan animada-Dijo Esther.

Paseamos un rato, hablamos, y cuando se hizo el atardecer nos fuimos a nuestras casas, la pasamos bien los tres.

Llegué a mi casa saludé a mi madre y fui a mi habitación. Jugué en mi computadora y hablé con unos compañeros de la escuela.

Cené con mi madre, es lo poco de familia que tengo (Mi padre nos abandonó) pero soy feliz con ella.

-¿Cómo la pasaste con tus amigas?-Preguntó.

-Bien, supongo.

-¿Cuándo tendrás una novia?.

-¡Ay, mamá! No... Me interesan esas cosas...

-Ajá... Quiero una nuera.

-Aún no.

-Mmm... ¿Quién es la afortunada?

-¡Mamá!.

-Ya, ya, termina de comer.

Al finalizar la cena me dirigí a mi habitación a dormir, quería chatear con Anne y Esther, pero las dos estaban desconectadas, me pareció raro pero no le di importancia. Me dormí sin más.

Al otro día, por la mañana me levanto de la cama y me dirijo a la cocina por el desayuno. Me la encuentro a mí mamá sentada y con su teléfono en la mano.

-Mark...

-¿Qué sucede Mamá?

-¿Sabes qué pasó con Anne?.

-No...

-La madre me acaba de llamar llorando diciendo que anoche desapareció. ¿Sabes si se escapó o algo?

-¿Qué? No... ¿Cómo pudo haber pasado esto?-Me siento destrozado por esto, una fuerte depresión se me acerca, mi linda Anne, qué le habrá pasado a la pobre, espero que nadie le haya hecho nada... Espero que esté bien... Anne...

Cuidado Con Lo Que DeseasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora