CAPITULO 3 :PRIMER ENCUENTRO

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Sentía que mi mundo se derrumbaba con tan solo pensar que ahora mi vida se volvía egoísta , una existencia vacía y desmotivada

-¿Cenaras?-preguntó una fría voz tras la puerta.

-No gracias, no tengo hambre.-respondí caminando hacia la puerta con la esperanza de que entrara y pudiera darle respuestas a mis preguntas para lograr calmar mis nervios.
Pero eso no ocurrió, el solo se retiró al escuchar mis palabras.

Habia estado muy bien hasta que mi estomago me pedía algo de comida, ya había pasado buen rato y seguramente Kenneth estaría en cualquier parte menos en la cocina así que decidí abrir la puerta para asegurarme de que no hubiera nadie. Estaba todo oscuro a excepción de unas pequeñas luces que alumbraban escasamente el pasillo.
Bajaba lentamente las escaleras cuando una voz a mi espalda me brindo un gran sobresalto

-¿La señorita tiene hambre?-mi corazón volvió a latir cuando la suave voz me decía que no había sido descubierta por Kenneth

-La verdad si.- sonreí patéticamente

-Lamento decirle que el señor Lewis me dio orden de no servirle ni un poco de comida- solté un fuerte suspiro de resignación

-¿Desea algo ligero?- pregunto

Sonreí tontamente

-Déjeme decirle que no acostumbro desobedecer al señor Kenneth , pero creo que ha sido muy duro con ese castigo

Saco de la nevera unas cuantas frutas y las pico tranzando pequeños trozos, las puso en una bandejita y luego vertió Yogurth

-Tome señorita y no se demore,el señor Kenneth se pondría furioso si se entera que desobedecí sus ordenes

La señora no había ni terminado de advertirme cuando en la tranquilidad y silencio de la noche el sonido de unas llaves en la puerta principal nos ponían en alerta de la llegada de Kenneth.

-Vallase, yo diré que me serví sola.

Trate de empujarla para que se marchara a su habitación pero la pobre señora estaba nerviosa, y se negó a marcharse

-¿Puedo saber que hacen aun a estas horas despierta?- interrogo adentrándose en la cocina - ¿Jane, no fui claro durante la cena?- elevo una ceja esperando una respuesta pasando su mirada de ella a mi

-No la culpes, ella escucho el ruido que yo hacia en la cocina y bajo a ver que sucedía- interrumpí con audaz ingenio

-De todas formas-continuo y antes de que regañara mas a Jane interrumpi

-De todas formas ya Jane se iba-añadí

-Bien, ya puedes irte- Jane agacho su cabeza y se marcho.

-Creo que fui claro contigo respecto a mis reglas-me habló duramente.

-Eres un joven con actitudes de anciano y no pienso tolerarte.-le advertí regresando mi mirada a el.- en serio, relájate

- ¿Y si no que? ¿ te iras? -me desafió

-Créeme cualquier lugar lejos de tu arrogancia podría ser mejor

No respondió simplemente me dio una mirada aterradora y como ya se me hacia costumbre en el se marcho en silencio.

-Perdonelo señorita- Jane había regresado- no debió echarse la culpa de mis actos

-Tranquila Jane - le sonrei- es hora de dormir ¿Vamos?- asintió y juntas nos retiramos a nuestras debidas habitaciones.

Los rayos del sol invadían mi habitación causando un enorme fastidio para mis ojos.
Me levanté tan fastidiada que estaba segura que con Kenneth en mi vida este no seria un gran día, decidí bañarme y luego vestirme cómoda.

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