WEEKS | YOONMIN

Quinta semana.

LUNES.
12:03.

—No te miento, hyung, él estaba ahí, te lo juro —dijo el rubio llevándose otro bocado a su boca.

—No es que no te crea, Jiminie, pero estabas muy dormido —miraba su almuerzo.

—No me crees —negó un poco dolido.

—Reitero, no es que no te crea pero... Bueno... no te creo —dejó de ver su comida para verlo a los ojos—Perdón.

—Ya —respondió cortante.

—ChimChim...

—No me digas así.

—Bueno, Jiminie.

El nombrado suspiró por los apodos que su hyung le ponía—¿Qué?

—¿En serio crees que ese chico "rapero" estuvo frente a tu puerta? —hizo comillas con sus dedos.

—Sí, hyung, sí, él estuvo con Jungkook, el chico con el problema del celular.

—¿No crees que es una gran coincidencia? Digo, quien pensaría que después de tantas vueltas, terminarían uno frente al otro y justo en la puerta de tu casa, están destinados, es obra del destino—río pero Jimin no.

—Sólo es lindo, tiene un lindo rostro, cuerpo perfecto, voz extremadamente orgásmica, si tan sólo lo escucharas hablar, te correrías dos veces—Seokjin lo miró con obviedad— ¿Qué?

—Creo que tienes un nuevo crush—se llevó otro bocado pero no lo comió— si te escucharas como lo describes...

—No es mi crush, please.

—Sí lo es, como lo dijiste, seguramente lo escuchaste hablar y te mojaste—rió aún más.

—Da igual, sea como sea, ese peliceleste no es mi crush.

—Eso dirás ahora, seguramente lo busques en las redes, vas a googlear "chico rapero de pelo celeste como se llama Yahoo! Respuestas".

Odio que me conozca tanto, malditos labios andantes.

—Me ofendes.

—Te quiero y lo sabes—sonrió adorablemente.

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MARTES.
14:25.

Comenzaba el receso, Jimin y Jin no quisieron bajar, hoy era uno de esos días donde sentían vagancia hasta de respirar, así que decidieron quedarse en sus asientos y compartir lo que sobró de sus almuerzos. Ambos estaban bastantes exhaustos, se quedaron toda la noche viendo una serie estreno en Netflix, y hoy seguirían para terminarla.

Sacaron sus almuerzos y empezaron a comer lentamente, no eran los únicos que se saltaron el receso, en su curso había aproximadamente unos diez chicos, cinco hablaban sobre sus malas rachas con las chicas, otros tres sólo dormían, y los dos últimos comían y charlaban, eran los únicos que llamaban la atención gracias a sus potentes voces.

Ni Jimin ni Seokjin le dieron importancia hasta que oyeron que hablaban de unos de sus conocidos, exactamente de sus compañeros de la clase de gimnasia, ambos pusieron atención a lo que decían, no tenían otra cosa mejor que hacer, así que decidieron enterarse del chisme.

—Ay, ¿escuchaste lo de Moonbin? —un castaño cortó el silencio entre él y su amigo.

—No, ¿qué pasó?

El par de amigos agudizaron sus oídos para escuchar aún mejor el chisme, más Jimin.

—Parece ser que la semana pasada, Moonbin fue a una especie de show en un famoso bar del centro, y ese show lo hacían unos raperos, bah, esa comunidad que tienen, exactamente no tengo idea de eso, pero que dicen que Moonbin estuvo toda la noche a los besos con uno de ahí, que fueron al baño y le hizo un oral—alzó sus cejas— que idiota es Moonbin.