-9-
Un Moustro
Estaban en silencio, Draco apenas entreabrió los labios para recibir la primera cucharada, pero apretó los dientes, era humillante estar en esa posición, observaba lo que le ofrecía Hermione como si se tratara de veneno y extrañamente eso le consoló al menos por un segundo, pensar en que esa Gryffindor sería capaz de matarle, pero era absurdo, alguien como ella jamás atentaría contra la vida de nadie, ni siquiera con la de un patético ex mortifago fracasado.
Lo observo con ira en sus pupilas, con un profundo resentimiento y desprecio, pero no era dirigido hacia ella, era para el mismo, estaba tan asqueado de si mismo que no podía contener tanta repugnancia y se le escapaba de las manos y salía a través de su mirada cargada de odio, furia y repulsión.
Pero a Hermione no le importara encontrar ese tipo de cosas en los ojos grises de Malfoy, sin importar si iban o no dirigidas en su contra, estaba tan acostumbrada a esas miradas, a ese recordatorio de su estatus de sangre que viniendo de el que no se sentía afectada de ninguna manera.
Y a pesar de no ser capaz de sentir nada, sus palabras retumbaban en lo más hondo de su ser.
-Eres una desgraciada sangre sucia. -Había dicho, y esas palabras no evocaron más que recuerdos que intentaba borrar de su cabeza.
Ella lo sabía, sabía que ese era su verdadero origen, siendo hija de muggles jamás había esperado otra cosa y viniendo de un Malfoy sangre limpia era de esperarse. No le herían sus palabras venenosas hacia ya tanto tiempo que las escuchaba que se había inmunizado ante ellas, no así ahora que no era la misma, no le hacía daño escucharlas de nuevo, pero era quizás esa la primera vez que le llamaban así después de lo ocurrido.
El significado de la sangre había cambiado mucho desde entonces, y solo pensar en su origen era reafirmar su soledad, a sus padres muertos. Por eso el vacio en su mirada y su falta de reacción, ahora solo podía pensar en ellos.
-No vas a comer. -Dijo de repente y su voz se escucho mas ronca de lo que hubiera pensado.
Como respuesta el solo ladeo la cabeza y apretó los dientes con más fuerza. Con toda tranquilidad Hermione dejo la cuchara sobre el plato y tomo su varita, conjuro un hechizo en silencio y Draco no pudo moverse, estaba a completa merced de Granger.
Con suavidad hizo que girara su cara y apretando sus mejillas logro que abriera la boca sin problema. Tomo una servilleta y la coloco en su barbilla mientras que con la otra hacia llegar una cucharada de sopa a la boca del rubio.
No le quedo más remedio que tragar si no quería ahogarse o peor aun terminar con la poca dignidad que le quedaba al estar todo lleno de comida al no poder detenerla.
Hermione fue paciente, se tomo el tiempo necesario para darle cada cucharada, cuando termino limpio sus labios con la servilleta, tuvo la precaución de retirar todo antes de romper con el hechizo sabía lo que se avecinaba en cuanto recuperara su movilidad.
-Lo siento. -Se disculpo. -No deberías moverte demasiado si quieres recuperarte pronto, te dejare a solas, pero no hagas tonterías, no desearía tener que inmovilizarte de nuevo.
Con la misma pasividad con la que se había desenvuelto después de escuchar las duras palabras de Draco, salió de la habitación, cuando estaba por cerrar la puerta rompió el hechizo liberando al iracundo rubio que soltó un fuerte improperio al sentirse de nuevo amo de su cuerpo.
Estaba lo suficientemente cerca para oír sus gritos de rabia, pero no tanto como para ver las lagrimas que escurrían de unos ojos grises.
Le dolía cada parte de su piel al apretar los puños con fuerza, su piel extremadamente sensible se resentía por esa tirantes a la que la sometía mientras cerraba el puño en torno a la sabana que le cubría, giro su rostro con abatimiento cuando comenzó a ceder al dolor y mermo la fuerza de su puño, mas las lagrimas no aflojaron su paso surcando todo su rostro hasta perderse en su barbilla y cuello. Apretaba los dientes para evitar gemir como un crio y aun así desde el interior de su pecho resonaban pequeños ruidos síntomas de un llanto contenido.

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Sanando Mis Heridas
FanfictionMalfoy se lamentaba de tantas cosas, pero ya era tarde para enmendarlas, ya no disponía del tiempo y aunque lo tuviera las personas importantes en su vida se habían ido para jamás regresar, esa era la realidad, la verdad de un destino miserable que...