Y yo les ayude.
Ese era mi trabajo, ayudar a todos con su amor, incluso a personas que no creían en mi existencia, como Magnus Bane.
Ambos habían regresado al mismo lugar.
-¿No lo ves?-dijo el moreno, el cual se alegraba de haber olvidado la bufanda- ahora debes decirme tu nombre.
A pesar de la insistencia del moreno, Alexander dijo "No ahora".
Así que decidieron irse a patinar, el moreno no aceptaría un "No" por respuesta, tal vez el tiempo paso muy rápido.
O tal vez yo lo hice pasar rápido, para que Alexander creyera tanto en mi no parecía demostrarlo.
-Bueno, chico de los guantes , es momento que yo me vaya...- Alexander sentía que no era lo correcto, pero sentía que debía de irse.
-¿No crees que el destino nos trajo aquí otra vez por algo- debo reconocerle a Magnus que era hábil con las palabras.- Por lo menos tu nombre....
Alexander casi olvidaba que llevaba una mochila, pero le di una pequeña ayuda.
-Espera- gritó, la gente los vio pero por primera vez no le importo- ten..- le extendio un billete de 1 dolar, un marcador y una libreta- escribe tu nombre en el y tu número en el.
Magnus lo miro extrañado pero lo hizo, tan pronto como lo hizo Alexander salio corriendo a un puesto de periódicos y compro.. ¿unos chicles?.
Magnus no pudo estar más confundido, había hecho que escribiera.... ¿Me quería dar más trabajo?.
-Cuando ese billete llegue a mis manos... será el momento en el que debo buscarte, juro que lo haré- sonrió y sus mejillas estaban sonrojadas, tal vez solo es el frió pensó Magnus.
-¿No debemos igualar las cosas?- Bueno eso era lo justo, así que Alec empezó a buscar otra cosa, hasta que dio con un libro "el chico de las estrellas".
-Cuando llegue a mi casa pondré mi en el y mi dirección- lo volvió a guardar- y lo venderé a una tienda de libros usados, entonces cuando llegue a tus manos... será tiempo de encontrarnos.
-Pero eso puede no pasar nunca...
Entraron en otra discusión y fueron a un hotel, pero ¿por que a ellos le dejaría fácil el amor si a todos se lo complique?Ahora estaban entrando a un hotel... casualmente tenía dos elevadores.
-Tu sube a uno- dijo Alec riendo y él se metió al contrario- si seleccionamos el mismo piso se significa que hoy tendrás suerte conmigo ...- espero que el otro dijera el nombre.
-Soy Magnus - dijo el moreno dudando un poco de saber donde se estaba metiendo.
-Soy Alec... Alexander de hecho- y en eso se cerraron las puertas .
Alexander elijo de inmediato el piso trece... Magnus tomo su desicion poco después.
El trece sería el número de la suerte, pero a Magnus le tenía que dar una lección por no creer en mi, así que el elevador se detuvo en el piso 2, y se metió un papá con su niño " van al piso 13, que suerte " pensó Magnus, pero yo tenía otros planes.
El niño presiono todos los botones, de una manera muy descortés y el elevador se paraba en cada piso.
ALexander espero....
Peor Magnus de seguro eligió otro piso, así que Alexander decidió bajar por las escalera, cuando la puerta de las escalera se cerro la del elevador de Magnus se abrió....
AMbos necesitaban vivir más, pero aún estaba ese libro y ese billete....
Bueno esto es todo, es corto pero no estoy bien emocionalmente así que no lo juzguen tan duro.